Es noticia
Nacentia: la opción de un parto natural no medicalizado
  1. Alma, Corazón, Vida

Nacentia: la opción de un parto natural no medicalizado

El pavoroso aumento de cesáreas en España, alertado desde las autoridades sanitarias europeas, así como la tendencia a la total medicalización del parto empieza a pasar

Foto: Nacentia: la opción de un parto natural no medicalizado
Nacentia: la opción de un parto natural no medicalizado

El pavoroso aumento de cesáreas en España, alertado desde las autoridades sanitarias europeas, así como la tendencia a la total medicalización del parto empieza a pasar de un avance para las mujeres a una artificialidad nada beneficiosa ni para la madre ni para el bebé. Por ello, muchas futuras mamás empiezan a exigir la posibilidad de elegir cómo parir, un proceso que no debe entenderse como una operación quirúrjica y debe vivirse con la máxima intimidad y tranquilidad.

La doctora Regina Cárdenas promueve un parto alternativo, diferente al parto convencional, pero igualmente seguro: Nacentia. Se trata de un parto vivido de forma natural, no medicalizado, pero utilizando todas las técnicas de control de dolor y de bienestar materno-fetal, que son compatibles con la libertad de movimientos y con la autonomía en la toma de decisiones.

La madre da a luz cuando ella y su hijo están preparados para ello, respetando el proceso fisiológico del parto y el tiempo de dilatación, sin provocar las contracciones mediante oxitocina. Ella será la que decida en qué postura se encuentra más cómoda, si prefiere pasear, también podrá beber y comer si lo desea, es decir, considerar en todo momento que la paciente es la protagonista de este evento. El objetivo es conseguir vivir tanto el embarazo como el momento del parto con mucha más intensidad.

Cárdenas asegura que hay un control permanente por parte del equipo médico, garantizando el bienestar de la madre y del bebé. El parto natural no significa dejar de lado la técnica más avanzada ni la anestesia epidural, que se utilizará, si la paciente lo desea, de una forma progresiva en función del dolor de cada momento.

Ambiente adecuado

Las salas de parto deben estar adaptadas a este tipo de alumbramientos. Tienen que ser amplias y estar ambientadas de tal forma que provoquen una mayor sensación de intimidad. Una vez que nace el bebé, no se le separa bruscamente de la madre, sino que está en contacto con ella durante los primeros minutos, consiguiendo que la recepción sea lo más humana posible.

No se practican episiotomías ni ninguna otra técnica agresiva para la mujer. Las cesáreas se llevan a cabo única y exclusivamente si es estrictamente necesario.

Cabe recordar que en los países en los que se ha vuelto a este tipo de partos los resultados obtenidos en cuanto a la incidencia de cesáreas, problemas después del parto, etcétera, es muy inferior a la que se tiene hoy día en España. Los partos no medicalizados es un práctica cada vez más demandada en nuestro país, y realizada extensivamente en los países nórdicos y de América del Sur.

El pavoroso aumento de cesáreas en España, alertado desde las autoridades sanitarias europeas, así como la tendencia a la total medicalización del parto empieza a pasar de un avance para las mujeres a una artificialidad nada beneficiosa ni para la madre ni para el bebé. Por ello, muchas futuras mamás empiezan a exigir la posibilidad de elegir cómo parir, un proceso que no debe entenderse como una operación quirúrjica y debe vivirse con la máxima intimidad y tranquilidad.