Receta electrónica: lección internacional de la farmacia andaluza

La implantación de la receta electrónica de forma universal no es una quimera, y así lo han demostrado los farmacéuticos de Andalucía después de más de cinco años de trabajo. Allí, el empeño de los colegios profesionales de cada provincia ha conseguido conectar todas las oficinas de farmacia, desde las situadas en capitales a las de los pueblos más remotos, mediante una Intranet que permite la dispensación digital de medicamentos, además de otras ventajas como el contacto ‘on line’ con el médico, el fácil acceso a la historia farmacológica, el seguimiento farmacoterapéutico y los análisis estadísticos para gestión de riesgos.

En 2007, se alcanzaron las diez millones de dispensaciones vía electrónica, el 99,77% de ellas sin incidencias, y la inversión realizada desde 2003 no ha superado los 6.000 euros por farmacia. La efectividad es patente y expertos en economía y tecnología de la salud de varios países ya se han interesado por el proyecto bautizado como ‘Alhucemas’.

La puesta de largo del proyecto corrió a cargo del presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos (COF) de Sevilla, Manuel Pérez, sus homólogos en Málaga Javier Tudela, en Huelva Francisco Peinado y el responsable de Receta Electrónica del COF de Sevilla Manuel Ojeda. A la presentación también acudieron el presidente y secretario del COF de Madrid Alberto García Ramos y Luis González, respectivamente. Ramos manifestó su agradecimiento a la iniciativa de los farmacéuticos andaluces que tantos pasos está ahorrando a la implantación de un proyecto similar en Madrid. No obstante, también reconoció cierta envidia porque: “Aquí estamos a años luz de Andalucía”.

Los pilares del proyecto son la universalidad (participación de todas las farmacias independientemente de su ubicación o conocimientos tecnológicos), la máxima garantía (igualdad de condiciones para todas las farmacias), máxima seguridad (en materia de comunicaciones, responsabilidad civil y protección de datos) y autonomía desde los colegios (sin vinculaciones comerciales que pudieran limitar o condicionar futuras ampliaciones). ‘Alhucemas’ se basa en una Intranet corporativa, un call center de gestión colegial, la gestión del módulo de facturación colegial y la firma electrónica.

Colaboraciones esenciales

La colaboración de Telefónica para llevar el ADSL a todos los rincones de Andalucía ha sido fundamental. Así como la de la Administración a través del Sistema Andaluz de Salud, quien se encargaba de adecuar en materia informática a los centros de atención primaria para que se pudieran interconectar con todas las farmacias de la comunidad.

De esta manera, ninguna oficina de farmacia se encontraba en ventaja con respecto a las demás porque todas comparten ya la tecnología y, por tanto, se refuerza el modelo mediterráneo del sector basado en la existencia de un establecimiento por cada 4.000 habitantes como máximo y en todas las localidades de España.

Un chivato del desabastecimiento

No obstante, se echa de menos algún tipo de subvención, toda vez que el servicio de salud se va a beneficiar cualitativa y cuantitativamente. En el primer caso, porque los pacientes no tendrán que acudir al médico de cabecera sólo para pedir ‘recetas’. En el segundo, porque la receta electrónica facilita la prescripción por principio activo fomentada en Andalucía y, por tanto, la contención del gasto.

En otro orden de cosas, y según los presidentes de los colegios farmacéuticos presentes, las relaciones con las cooperativas de distribución no cambian en absoluto. Pero sí con la industria a corto o medio plazo, porque si en una oficina no existe stock de un determinado fármaco, inmediatamente se puede comprobar si se encuentra en otras farmacias o que, efectivamente, se ha producido un desabastecimiento puntual por parte de los laboratorios.