Cómo teletrabajar con éxito cuando vives en un piso compartido

La oportunidad de trabajar desde casa nos llegó por sorpresa cuando comenzó la pandemia, y muchas personas parecen bastante contentas con el resultado y la posibilidad de conciliar la vida laboral y personal sin tener que comerse varios atascos en la idea y vuelta. Sin embargo, desde un primer momento se observó que no todo el mundo tiene las mismas condiciones para poder trabajar apropiadamente, y cuando tienes que compartir casa y "oficina" con miembros de la familia o amigos, las cosas pueden ponerse difíciles.

De hecho, es lo que le ha sucedido a muchos jóvenes profesionales (y no tan jóvenes), de pronto se han encontrado con que debían compartir un espacio limitado con otras personas, cada una de ellas con sus propios horarios de trabajo, rutinas y/o responsabilidades diarias. ¿Es posible mantener la cordura así y no acabar discutiendo en el proceso? ¿Continuar con la productividad intacta? ¡Sí! El Grupo Robert Walters ha establecido una guía con algunos consejos que servirán para que puedas trabajar desde casa y continúes manteniendo una buena relación con tus compañeros de piso.

Si estáis todos teletrabajando, es importante compartir responsabilidades para que nadie cargue con el peso de mantener la casa limpia

1. Sentar las “reglas del juego” desde un inicio

Establecer ciertas reglas y acuerdos será una buena idea.

• Por ejemplo, es buena idea pensar en repartir las diferentes zonas del piso en función del trabajo a realizar. Por ejemplo, podéis acordar que la zona con mejor conexión a internet se destine a videoconferencias, o que todas las llamadas telefónicas se realicen en los respectivos dormitorios con el fin de no molestar al resto.
• Asignación de las tareas domésticas. Si estáis todos teletrabajando, es importante compartir responsabilidades para que nadie cargue con el peso de mantener la casa limpia. En otras circunstancias tal vez debería hacerlo quien tenga mayor disponibilidad horaria, pero ahora las cosas han cambiado.

2. Organizar reuniones

Puedes optar por establecer una reunión matutina con tus compañeros de piso, especialmente si sois muchos. Durante la reunión podríais hablar de vuestros horarios para ese día, incluyendo cualquier llamada o videoconferencia importante para la cual necesitéis tranquilidad y silencio, o cumplir con un plazo urgente para el cual no debéis ser interrumpidos.

No acapares los espacios comunes, limpia cuando ensucies, realiza el mínimo ruido, si vas a hacer café quizá sería buena idea que prepararas para todos...

Elabora un calendario que sea sencillo, que cuente con notas adhesivas de colores para clasificar las distintas actividades. De esta manera evitaréis que surja cualquier conflicto en el día a día.

3. Ser empático

Parece fácil, ¿verdad? Sin embargo, cuando las personas se ven obligadas repentinamente a pasar mucho tiempo juntas es fácil que surjan tensiones ante el más mínimo desacuerdo. Por este motivo, es importante mantener siempre la empatía hacia las personas con las que vives. No acapares los espacios comunes, limpia cuando ensucies, realiza el mínimo ruido, si vas a hacer café quizá sería buena idea que prepararas para todos... apreciarán tu gesto.

4. Disfrutar de la compañía de los demás

En una época en la que muchos se sienten aislados y desconectados, el hecho de compartir piso ofrece la posibilidad de mantener una interacción regular con otras personas. Aprovecha esta situación para disfrutar de la compañía de los demás, para compartir momentos que podrían resultarte muy beneficiosos para tu salud física y mental. Esto no sólo fortalecerá tus relaciones personales y el clima general de la casa, sino que te ayudará a mantener un estado de ánimo positivo durante tus jornadas de teletrabajo.