¿Es cierto que el ejercicio físico frecuente mejora la calidad y duración de tus erecciones?

Se calcula que en nuestro país hay alrededor de entre 5 y 7 millones que sufren de disfunción eréctil, un problema sexual caracterizado por la imposibilidad de tener una erección o mantenerla durante lo que dura el coito, lo cual indudablemente redunda no solo en una evidente disminución del bienestar sexual, sino también en una menor autoestima y una mayor inseguridad a la hora de practicar sexo.

Las causas pueden ser muy variadas, y normalmente se asocia a enfermedades crónicas o sistémicas (como la hipertensión arterial o niveles altos de colesterol), pero también a factores negativos relacionados con el estilo de vida, como el tabaquismo. Ahora, cabe preguntarse si también dentro de esta categoría entra el sedentarismo, puesto que sin duda es uno de los hábitos más perjudiciales para la salud en general, contribuyendo al sobrepeso o a una peor salud cardiovascular.

Y sí, efectivamente, no hacer ejercicio físico contribuye a una peor salud sexual en lo que a las erecciones se refiere. Así lo certifica la doctora Rena Malik, uróloga y sexóloga, que a través de su cuenta de YouTube explica dudas y conocimientos básicos sobre la sexualidad masculina y femenina. En uno de sus vídeos recientes, analiza la que ella cree que es la forma más eficaz y "científicamente probada" de mejorar los efectos de la disfunción eréctil sin recurrir a la intervención médica: el ejercicio cardiovascular.

Para demostrarlo la experta se apoya en un metaanálisis de varios estudios sobre los efectos del ejercicio aeróbico en la función eréctil que probó que las personas que incorporaron ejercicio aeróbico frecuente en sus rutinas, como andar en bici o correr, reportaron mejoras a la hora de mantener su miembro siempre en funcionamiento. Lo más curioso y positivo es que se reportaron mejoras en el índice de función eréctil de aquellas personas con disfunción severa. Sin embargo, aquellos que tenían breves episodios de este problema sexual apenas notaron cambios.

El ejercicio cardiovascular, bueno para todo

Como es lógico y apuntábamos al inicio, esta clase de problema sexual masculino se relaciona con el flujo sanguíneo y la salud cardíaca, por lo que mejorarla a través del ejercicio aeróbico tiene su efecto 'ahí abajo'. Y, por supuesto, el hecho de salir frecuentemente a correr, andar en bici o simplemente caminar también mejora el control de los niveles de azúcar en sangre y mejora la presión arterial, los cuales son factores que también se relacionan con una pérdida de vigor en las erecciones. "A nivel celular, facilita la capacidad del cuerpo para crear óxido nítrico, el botón de encendido de las erecciones", asegura Malik, en declaraciones recogidas por la revista Men's Health.

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"No importa de qué tipo sea o cuál se haga, el ejercicio físico siempre mejora la función sexual", asegura la experta, "ya que estimula la producción de testosterona al perfeccionar la función del eje hipotalámico-hipofisario y reduce la globulina fijadora de hormonas sexuales, liberando más testosterona". Por último, la sexóloga concluye que "no existen soluciones rápidas" para la disfunción eréctil. "No tienes que ir al gimnasio, puedes salir y caminar, jugar con tus hijos o hacer cualquier tipo de actividad física que disfrutes. Hazlo con regularidad y entonces mejorar la situación".