Esta es la razón por la que a veces la ropa huele mal aunque esté recién lavada

¿Alguna vez has notado que tu ropa huele mal incluso después de haberla lavado? Este problema, que afecta a muchas personas, ha sido objeto de un reciente estudio publicado en la revista Textile Research Journal que ha revelado las causas detrás de este fenómeno. La investigación, liderada por Rachel McQueen, científica de la Universidad de Alberta, ofrece nuevas perspectivas sobre cómo los diferentes tipos de fibras absorben y liberan los compuestos responsables del mal olor.

El estudio demostró que las telas hechas de fibras naturales, como el algodón, el lino y el cáñamo, tienden a absorber y liberar menores cantidades de compuestos olorosos en comparación con las fibras sintéticas como el poliéster y la lana. McQueen explicó, en declaraciones recogidas por IFL Science, que "las fibras celulósicas, que aman el agua, como el algodón y la viscosa, absorben más agua del sudor que el poliéster". Esto es significativo porque los compuestos olorosos del sudor están mayoritariamente en los componentes grasos, los cuales no se disuelven en agua y son más afines al poliéster.

Para analizar el comportamiento de las diferentes telas, el equipo de McQueen simuló los efectos del ejercicio en varias fibras. Sumergieron las telas en una solución de sudor artificial, las agitaron y luego las dejaron reposar para permitir que las partículas de olor se impregnasen. Utilizando la espectrometría de masas, una técnica que mide la relación masa-carga de los iones en una muestra, lograron cuantificar el grado de mal olor de cada tejido.

Optar por fibras naturales y tener en cuenta las características de cada tejido puede ser clave para mantener la frescura de las prendas

Los resultados indicaron que el poliéster es especialmente propenso a absorber y liberar malos olores. McQueen advirtió que "básicamente, si te preocupa la ropa con mal olor, entonces aléjate del poliéster". Incluso con algunas prendas que afirman tener propiedades antiolor, estas pueden no ser tan efectivas debido a la química de las fibras y su interacción con los compuestos odorantes. Aunque las fibras sintéticas como el nylon y la lana también absorbieron más olor que las naturales, mostraron una notable reducción del mal olor después de 24 horas al airearse, sugiriendo que estos materiales pueden no necesitar un lavado tan frecuente como el poliéster.

Recomendaciones prácticas

Este descubrimiento tiene implicaciones prácticas para quienes buscan evitar la ropa maloliente. Optar por fibras naturales y tener en cuenta las características de cada tejido puede ser clave para mantener la frescura de las prendas.