Esta cardióloga española explica si es normal notar tus propios latidos en el corazón: "Hay situaciones"

La cardióloga española Magdalena Perello ha abordado una pregunta común que muchos se hacen: ¿es normal notar los latidos del corazón? En un reciente vídeo subido a TikTok, Perello explica en qué circunstancias es habitual percibir los latidos cardíacos y cuándo podría ser motivo de preocupación. Según ella, es completamente normal sentir los latidos del corazón durante el ejercicio físico intenso. "Tu corazón aumenta la frecuencia cardíaca y la contractibilidad para llevar más sangre al sistema respiratorio y a los músculos", señala la especialista. Este aumento es una respuesta natural del cuerpo para satisfacer la mayor demanda de oxígeno y nutrientes.

Otro momento en el que se pueden notar los latidos es en reposo, especialmente si se está tumbado y relajado. Perello indica que palpando ciertas arterias superficiales, como la temporal, la carótida o la radial, se puede sentir el pulso cardíaco. "El corazón transmite la sangre a través de las arterias y, al palpar las arterias más superficiales, se puede sentir el pulso", explica.

El estrés y los nervios también pueden acelerar el ritmo cardíaco, llevando a una frecuencia de entre 100 y 120 latidos por minuto. "Esto es normal. Puedes notar que el corazón va un poquito más rápido, un poquito más acelerado en reposo", añade Perello. Sin embargo, hay situaciones en las que notar los latidos del corazón podría indicar un problema más serio. Perello advierte que si se experimentan palpitaciones fuertes o taquicardias irregulares acompañadas de dolor torácico, mareo, pérdida de conocimiento o falta de aire, es crucial buscar atención médica. "En estas circunstancias, esto deberías consultar porque podría tratarse de una arritmia, y lo más importante es diagnosticarla para poder poner un tratamiento adecuado", enfatiza la cardióloga.

Con estos consejos, Perello busca aclarar cuándo es normal sentir los latidos del corazón y cuándo es necesario prestar atención a posibles señales de alerta. Su mensaje final es una invitación a cuidarse y a estar atentos a las señales del propio cuerpo.