Las bodas, al igual que otro tipo de celebraciones, no son iguales en todo el mundo. Más allá de que en todos los lugares dos personas se van a unir en matrimonio, la ceremonia puede ser totalmente diferente, lo que puede provocar un choque cultural. Muchos extranjeros que se han mudado a España utilizan las redes para mostrar todo aquello que les parece raro de nuestro país.
La modelo e influencer venezolana, Camila Cisneros, ha generado un debate en redes tras criticar el comportamiento de los invitados en las bodas españolas. A través de un vídeo compartido en TikTok, la joven expresó su sorpresa y descontento con una actitud común que se ha encontrado en varios casamientos.
"Cuando yo me case a mí me van a criticar"
Cisneros llevaba tiempo hablar de este tema a sus seguidores. Y es que ha observado los españoles critican cada detalle de las celebraciones nupciales en España. "Las bodas son un tema serio. En Latinoamérica también son superserias, pero aquí los invitados opinan como si la boda fuese de ellos".
La influencer destacó cómo los asistentes no dudan en expresar sus opiniones sobre el vestido de la novia o la decoración, algo que considera excesivo. La modelo mencionó que, aunque ya ha aceptado que el día que se case recibirá críticas, le sorprende la intensidad de las opiniones en España. "Ya hice las paces con que cuando yo me case a mí me van a criticar. Yo tengo mi estilo y ya está", dijo, señalando que no le preocupa cumplir con los estándares europeos o españoles.
Para Cisneros, la presión sobre las novias en España es excesiva. "Siento que sufren demasiado por el tema novias, el tema protocolo", afirmó. Según la joven, una boda debería ser una celebración personal y única, donde la pareja decida todo según su propio gusto y estilo, sin tener que preocuparse por las opiniones ajenas.
También cuestiona la necesidad de seguir un protocolo tan estricto y criticó a aquellos invitados que juzgan a los novios. "Si tú estás invitando a gente que te preocupa que te vayan a criticar, algo está mal y no es la gente", aseguró, sugiriendo que las bodas deberían ser un momento de felicidad y celebración libre de juicios. "Dejen que cada quien se vista como quiera, que cada quien lo celebre como quiera o ponga lo que quiera", concluyó la venezolana.