La alcaldesa de París se jugó sufrir diarrea y gastroenteritis al bañarse en un Sena contaminado
Anne Hidalgo se sumergió en el Sena junto al presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos para demostrar que las aguas son aptas. Los resultados dicen lo contrario
La alcaldesa de París, durante su baño en el Sena. (Europa Press)
El día que la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y el presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos, Tony Estanguet, se bañaron en el Sena, las aguas del río francés superaban los niveles de contaminación máximos que marca la Agencia Nacional de Salud, Alimentación, Medio Ambiente y Seguridad Laboral (ANSES). Ambos cargos políticos quisieron demostrar que el consistorio había cumplido con su promesa de revitalizar un río de aguas opacas cuyo estado ha puesto en jaque las pruebas de natación de los Juegos Olímpicos.
La inversión en el Sena, que supera los 1.400 millones desde 2016, estaba volcada para poder celebrar la prueba de natación del triatlón para hombres, mujeres y relevo mixto, así como los maratones de aguas abiertas masculino y femenino. "Estamos contentos de ver que lo hemos conseguido", destacó Hidalgo tras haberse no solo zambullido en el río, sino también nadado unas decenas de metros. "Por supuesto que va a permitir las pruebas de los Juegos Olímpicos, por supuesto que va a permitir el baño el próximo año. Es un legado importante", subrayó.
"Formidable" fue la palabra que empleó Estanguet para describir el chapuzón, en declaraciones a la prensa, además de remarcar que supone un "mensaje muy importante a todos los atletas". Fue un "desafío" que "no fue simple", coincidieron ambos, al remarcar que la recuperación del Sena -tras casi un siglo en el que el baño no estuvo autorizado por razones sanitarias- ha sido un reto que ha costado cuatro años de trabajo intenso y de coordinación a distintos niveles de la Administración.
Anne Hidalgo, durante el chapuzón. (Europa Press)
No es la primera vez
Sin embargo, los datos publicados en el sitio web de la ciudad de París sobre el día 17 de julio en Bras Marie, el lugar donde el alcalde chapoteó, muestran que se han superado los umbrales de bacterias E. coli recomendados por las autoridades sanitarias europeas, tal y como adelantó France Info.
Por tanto, ese día se rebasó el límite de 900 UFC/100 ml fijado por la directiva europea para autorizar el baño al público en general. Entre los síntomas conocidos de esta bacteria fecal, la E.Coli puede provocar diarrea o colitis hemorrágica. ¿Estará todo el mundo que se bañó en buenas condiciones? Nadie se ha quejado públicamente, aunque en este caso, la procesión puede ir por dentro.
Decenas de personas se adentraron en el Sena. (Europa Press)
Pero no es la primera vez que se nada en aguas que no cumplen los umbrales de calidad. Ya en el verano de 2023, durante las pruebas de preparación para los Juegos Olímpicos, los atletas pudieron sumergirse en el río a pesar de la excesiva contaminación.