Estas son las preocupaciones de la nueva acción social (y sus estrategias para tener mayor impacto)

Hay quien dice que el mundo es un lugar mejor en algunos ámbitos, aunque es justo reconocer que los actuales conflictos bélicos, el cambio climático y las secuelas de la pandemia dibujan un contexto, como mínimo, muy complejo. Desgraciadamente, sigue existiendo pobreza y exclusión social, personas vulnerables, catátrofes naturales, guerras y violaciones de los derechos humanos. Sin embargo, para hacer frente a estos y otros problemas, el tercer sector incrementa su capacidad año tras año, gracias a unas organizaciones que tienen un mayor impacto, así como a unos voluntarios y unas compañías privadas cada vez más comprometidos.

Para conocer de primera mano cuáles son sus preocupaciones, así como sus principales líneas de actuación, El Confidencial organizó junto a Banco Santander una mesa redonda titulada Compromiso social y estrategias de colaboración efectiva, que contó con la participación de cinco expertos: María Ruiz-Moyano, directora de Acción Social de Banco Santander; Beatriz Martín Padura, directora general de Fad Juventud; Guiomar Todó, directora general adjunta de Educo ONG; Josep Pifarré, director asistencial de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios en España; y Mari Satur Torre, gerente de la Fundación Cruz Roja Española.

Antes de que las diferentes organizaciones invitadas pudieran compartir sus principales inquietudes de forma detallada, María Ruiz-Moyano, directora de Acción Social de Banco Santander, quiso contextualizar la situación global: “En estos momentos, las empresas sentimos la necesidad de actuar de manera responsable, ya que los desafíos internacionales son cada vez más complejos debido a los efectos de la pandemia, los conflictos bélicos o el cambio climático”. Para ser más eficaces en este cometido, la directora de Acción Social de Banco Santander recomendó “tener muy claro el objetivo de los proyectos de acción social y cuál es el propósito que se persigue con esa actividad”. “No se trata de que cada empresa atienda todas las necesidades sociales —continuó la experta—, sino de centrar la ayuda para tener mayor impacto”, repasó en su primera intervención.

"No se trata de que cada empresa atienda todas las necesidades, sino de centrar la ayuda para tener impacto", Mª Ruiz-Moyano (Santander)

En términos generales, los participantes reconocieron esta complejidad de la coyuntura global, aunque una de las preocupaciones destacó por sus características y dramáticas consecuencias: “Llevamos una década advirtiendo de que uno de cada tres niños y niñas en España vive en riesgo de pobreza y exclusión social. Esto es intolerable en cualquier país, pero mucho más en la cuarta potencia económica de la Unión Europea”, alertó Guiomar Todó. Desde su punto de vista, “la infancia debe ser colocada en el centro de las políticas, pese a que los afectados no estén en edad de votar. Es necesario garantizar su derecho a una educación adecuada, incluyendo el acceso a los comedores escolares, ya que son espacios que garantizan una alimentación saludable cada día”. La directora general adjunta de Educo ONG concretó que “esta desatención a los más pequeños se produce porque faltan datos específicos, lo que contribuye a la invisibilidad del problema”.

Tras la infancia, la siguiente etapa de la vida que despertó interés entre los participantes fue la juventud. Así, Beatriz Martín puso encima de la mesa algunos datos que reflejan los desvelos de la organización que representa: “Un 56,9% de los adolescentes reconoce haber consumido alcohol en el último mes, mientras que cerca de un 30% admite que se trata de un consumo problemático”, concretó. En la misma línea, la directora general de Fad Juventud también puso el foco en la tecnología porque “es una de las cuestiones emergentes en plena digitalización, de la mano de contenidos dañinos e inapropiados, discursos basados en desinformación o vulneraciones de su seguridad y privacidad”. En lo que respecta a la salud mental, “el 60% de los jóvenes reconocen tener malestar emocional, hasta el punto de que ahora hay más jóvenes con ilusiones suicidas, además de que uno de cada tres admite tomar hipnosedantes de forma frecuente”, según enumeró.

"Un tercio de los niños vive en riesgo de exclusión social. Esto es intolerable en la cuarta potencia económica de la UE", Guiomar Todó (Educo)

Continuando con los jóvenes, Josep Pifarré explicó que “habitualmente se considera que el perfil más extendido de persona sin hogar es varón, mayor y con problemas de salud mental o adicciones. Sin embargo, esta realidad está cambiando. Ahora tenemos un 30% de personas jóvenes sin hogar y numerosas mujeres viviendo en la calle. Nuestra obligación es atender esta nueva situación”. Por esta razón, la receta prescrita por el director asistencial de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios en España es tan sencilla como “adaptarse”. “Nuestra organización lleva 500 años atendiendo a personas vulnerables —prosiguió—, pero su perfil va cambiando con el paso del tiempo. La forma más efectiva de mejorar su situación es generar nuevos proyectos basados en una perspectiva de mente abierta y que sirvan para dar respuesta desde dos ejes de actuación: la prevención y la asistencia integral”, subrayó.

Pero para desentrañar la complejidad del contexto actual, es necesario compartir y analizar la información. En este sentido, desde Fundación Cruz Roja Española se especificó que “tras un ejercicio de deliberación, hemos comenzado a impulsar el pensamiento humanitario. Queremos ser un centro de reflexión donde especialistas y referentes de distintos ámbitos de conocimiento aborden en profundidad la situación desde una perspectiva más humana. Así podremos entender nuestro impacto y anticiparnos a las nuevas situaciones de vulnerabilidad”, enfatizó.

¿Cómo está cambiando la acción social?

Los participantes en la mesa redonda coincidieron en que, actualmente, las organizaciones y las empresas aprenden unas de otras y crean sinergias para ser más eficaces en sus proyectos e intervenciones y, en paralelo, desarrollan nuevas líneas de actuación. Sobre esta cuestión, Beatriz Martín reconoció que “hace años, se veía mal en el sector que nos profesionalizáramos o que realizáramos campañas de comunicación. Parecía que era malgastar el dinero. Sin embargo, ahora todos coincidimos en que es importante gestionar bien, comunicar, influir, escuchar, intervenir y prevenir”, remarcó. “También es importante evolucionar y adaptarse a los nuevos tiempos", aclaró la experta.

"El 60% de los jóvenes tiene malestar emocional y uno de cada tres toma hipnosedantes de forma frecuente", Beatriz Martín (Fad Juventud)

Por su parte, en los últimos años, desde el Banco Santander “se ha puesto el foco en la educación financiera. Nos sirve para fomentar la inclusión social porque la educación financiera es una asignatura pendiente en numerosos colectivos vulnerables, especialmente en España. De hecho, según el último informe PISA, nuestro país se encuentra en el puesto número 12 de un total de 20”. Además, cabe destacar la iniciativa "Euros de tu nómina" que durante 16 años ha permitido que miles de empleados implicados con causas sociales cedan un porcentaje de su nómina a las ONG que trabajan con los colectivos más vulnerables.

El dato es otro de los elementos que está transformando el tercer sector: “Nos sirve para tener una mayor incidencia política, pero también para movilizar a la sociedad. Cuando ponemos informes encima de la mesa, queda explicada la realidad de aquello que hacemos sobre el terreno. Nos ayudan a difundir la actividad en los medios o a dar sentido a las ayudas que recibimos”, detalló Guiomar Todó. La responsable de Educo constató que “los datos son fundamentales para monitorear y rendir cuentas. Por ejemplo, nuestra organización cuenta con casi 80.000 donantes, además de entidades financiadoras”. Al mismo tiempo, desde la ONG reconocen que también se mira a las nuevas tecnologías: “En nuestro caso, estamos trabajando con una startup que está desarrollando una app capaz de identificar cómo se sienten las niñas y niños, gracias a la IA”, relató.

"El perfil de las personas sin hogar ha cambiado: un 30% son jóvenes y muchas de ellas son mujeres", Josep Pifarré (San Juan de Dios)

Mari Satur Torre coincidió con su compañera de tertulia e indicó que “los datos e informes aportan valor. Es nuestro punto de partida para que los expertos contribuyan con sus análisis desde el punto de vista científico, pero también humanitario”. La acción social se construye “de forma colaborativa”, enfatizó la experta, para después añadir que “buscamos diversidad y todos los perfiles suman, ya sean académicos, empresariales, del tercer sector o de la ciudadanía”. Bajo su perspectiva, “solo así podemos adentrarnos en profundidad en las problemáticas para luego compartir resultados. En estos tiempos complejos es importante sensibilizar e impulsar el conocimiento, así como recabar compromisos”, reivindicó.

Por último, este análisis de la nueva acción social llevó a Josep Pifarré a defender la importancia de la prevención: “Si se actúa cuando una persona ya se ha roto, no habrá marcha atrás. Lo ideal es que no se rompan. Para lograrlo, hay que poner medios enfocados a prevenir”, aseveró. ¿Cómo? “Con innovación, investigación y medición del impacto”, recomendó el representante de San Juan de Dios. Pero, antes de concluir, el experto dio una última clave: “Los tiempos cambian y las personas también. En estos momentos, la única manera efectiva de trabajar es co-creando. Es decir, las organizaciones no deben hacer algo por los afectados, sino construir algo junto a ellos. Este cambio de paradigma es muy reciente y por eso ya no se habla de atender desde el cuidado, sino desde la oportunidad”, destacó.