Los críticos del PSOE andaluz levantan la voz contra Espadas pese al bálsamo de los ERE

En el PSOE de Andalucía han abierto una puerta que hasta ahora estaba cerrada, al menos en público. A pesar del ambiente casi festivo por la revisión del caso de los ERE que ha hecho posible el Tribunal Constitucional, el líder de los socialistas andaluces, Juan Espadas, salió del Comité Director del partido más débil de lo que había entrado. En las cinco horas que ha durado la reunión del máximo órgano del PSOE-A entre congresos se han escuchado por primera vez voces críticas de dirigentes que apoyaron al exalcalde de Sevilla en su pugna con Susana Díaz por el control de la mayor federación socialista.

"No han sido sólo los susanistas", expresan fuentes presenten en el encuentro celebrado en un hotel de la capital andaluza. Este gesto demuestra que el partido ha cruzado un rubicón, a pesar de que Espadas ha recibido apoyos explícitos entre las 27 intervenciones que han sucedido a su intervención inicial, las de los 8 secretarios generales provinciales y otras de muy diversa procedencia. Nadie ha exigido al líder del PSOE andaluz una convocatoria inmediata de un cónclave para sustituirlo, pero cargos que se movilizaron para hacer secretario general a Espadas le han afeado que el proyecto de cambio que defendieron "no se ha producido" en los dos años y medio que ya suma el político sevillano al frente de la formación.

Espadas ganó las elecciones internas a Susana Díaz en junio de 2021, pero no fue entronizado hasta noviembre de ese año en un congreso que sirvió para dejar claro que el equilibrio que mantenía en pie al exregidor sevillano era más frágil de lo que aparentaba. Entre los pronunciamientos críticos destacan los del secretario general de Cádiz, Juan Carlos Ruiz Boix, procedente de una provincia donde las familias históricas del partido se aliaron para apoyar a Espadas contra Díaz convencidos de la necesidad de cambio. El diputado y alcalde de San Roque abogó por una mayor integración de las distintas corrientes del partido, una crítica habitual de los afines a la expresidenta de la Junta, que ella misma ha deslizado en público en sus participaciones en tertulias televisivas.

Las cuatro derrotas electorales que ha cosechado han resquebrajado los pilares sobre los que se sostiene el secretario general del PSOE andaluz. Al doloroso resultado de las andaluzas de junio de 2022, con una mayoría inédita para el PP de Juanma Moreno, hay que añadir los fracasos en las municipales de mayo y las generales de julio de 2023 y en las recientes europeas del pasado mes de junio. Muchos situan la más problemáticas de estas derrotas en las municipales de 2023, cuando los socialistas se dejaron por el camino gran parte del poder institucional que atesoraban, con lo que eso significa para la vida interna de un partido.

Entre las críticas que se han oído en el hotel Silken Al-Andalus, próximo al estadio Benito Villamarín, destacan también las peticiones de "reflexión, análisis y autocrítica" con el objetivo de "redefinir el proyecto de oposición". En su réplica final, Espadas ha tomado nota y ha anunciado que en septiembre el PSOE andaluz celebrará una "conferencia política" para rearmar ideológicamente a un partido que no sabe todavía cómo hincarle el diente a la sólida mayoría de Juanma Moreno. En su intervención en abierto, el secretario general dio algunas pistas de hacia dónde cree que debe ir la labor de oposición con el objetivo último de elevar la participación por medio de la movilización de los votantes de izquierdas.

"No podemos ganar con una participación del 49% en las europeas", dijo el político sevillano, que pidió a los presentes implicación para pelear en "cada loseta" en un llamamiento que sonó un poco a regañina. Espadas pidió implicación a un partido con una militancia de 46.000 afiliados, pero que pasa por una crisis institucional y en la que muchos cuadros han perdido su medio de vida tras el batacazo de las municipales. "El PSOE es un organismo vivo, es un todo que sólo funciona si cada una de sus partes hace su tarea", abundó Espadas, que abogó por centrarse en explicar a la ciudadanía los problemas de la sanidad pública y defender las políticas que hace el Gobierno central desde Madrid y que "benefician" a los andaluces. "Las elecciones se ganan en 38 municipios", espetó el líder socialista, que aludía a las 13 ciudades de más de 100.000 habitantes, a otras 11 de la costa y 14 de interior. Es ahí donde el PSOE andaluz quiere dar la batalla en las elecciones de 2026 para tener opciones de imponerse al PP

El efecto Chaves

A pesar de la relevancia de la reunión, sobre el caluroso ambiente que reinaba en la sala planeaba una cierta satisfacción. Sólo unas horas antes del Comité Director el PSOE ha escenificado la vuelta a la vida pública de Manuel Chaves y el resto de exaltos cargos a los que el Constitucional ha concedido amparo parcial en su revisión del relato jurídico del caso de los ERE. "Es el principio del fin del ciclo de victorias del PP en Andalucía", dijo el expresidente andaluz en la sede de San Vicente. La duda es si Juan Espadas es capaz de activar al partido para que la profecía de Chaves se cumpla, a pesar de que los socialistas se afanarán en los próximos meses en reivindicar la gestión de esas generaciones de dirigentes que han estado casi escondidos por su implicación en el caso.

A la espera del resultado que pueda ofrecer la conferencia política ideada por Espadas, distintas fuentes del partido ya dan por hecho que habrá un Congreso en el que se planteará un proyecto alternativo al actual. Una fuente socialista recuerda cómo se conformó una mayoría alrededor del exalcalde de Sevilla con el objetivo de desalojar a Susana Díaz del poder orgánico en San Vicente. Entonces el político sevillano asumió una difícil tarea apoyado desde Ferraz. Y en Madrid le reconocen al exregidor hispalense el trabajo realizado a pesar de los malos resultados electorales.

"Juan Espadas no es un líder disruptivo", admitía hace unos días una fuente de la dirección federal, que defiende que la alternativa, de salir adelante, debe esbozarse desde Andalucía y no desde Madrid. "Andalucía ya tiene su propio calendario y esto no se puede parar", expresa otra fuente presente en la reunión del jueves. Hasta ahora había cierto consenso en que los tiempos orgánicos para una posible renovación del PSOE andaluz dependían de lo que ocurriera en Cataluña con la investidura de Salvador Illa. "Será cuando quiera Marta Rovira", bromeaba una fuente socialista antes del cónclave, en alusión a la dependencia que tiene Ferraz de lo que ocurra en la Generalitat. En Ferraz aseguran que quieren mantener un perfil bajo, como ya hicieron en la renovación orgánica de Extremadura hace unos meses, pero en Andalucía también hay quien cree que para armar una mayoría alternativa será necesaria la participación de Madrid.