Dos españoles muertos, dos desaparecidos y seis rescatados tras el naufragio del buque pesquero Argos en las Malvinas
El Argos Georgia se fue a pique al sur de Malvinas en medio de un gran temporal. De sus 27 tripulantes, 10 son españoles. Hay 14 supervivientes, 8 víctimas y 5 personas sin localizar
El pesquero Argos Georgia, que ha naufragado con 27 marineros a bordo. (EFE)
Una vía de agua en pleno temporal hizo naufragar al pesquero Argos Georgia, un palangrero con bandera de Santa Helena que faenaba en el Atlántico Sur, a unas 170 millas al sureste de las islas Malvinas (Argentina). O lo que es lo mismo: a más de 300 kilómetros de la costa y en medio de un mar infernal cuya bravura complica cualquier rescate hasta el nivel de gesta épica. Conforme avanzaron las horas, los malos presagios se fueron confirmando y el suceso se convirtió en otra catástrofe marítima.
La Delegación del Gobierno en Galicia confirmó al filo de esta medianoche el fallecimiento de ocho de los 27 tripulantes,. Otras cinco personas siguen desaparecidas -prosigue la búsqueda- y se ha podido rescatar con vida a 14 supervivientes. Trece de ellos se dirigen a tierra firme en el patrullero Lilibet, mientras que el pesquero Robin M Lee, que rescató a otro tripulante, permanecerá en la zona toda la noche.
Dos de las ocho víctimas mortales son españolas. Uno es el patrón del barco, César A. , natural de Vigo, y el segundo, el cocinero del buque, Santiago L., de la localidad de Baiona, casado y con dos hijos.
Entre los tripulantes españoles, hay dos personas que siguen desaparecidas mientras que otros seis han logrado sobrevivir al naufragio. Entre ellos estarían varios marinos gallegos: el capitán, el primer oficial y el jefe de máquinas, vecinos de la zona de Ribeira (A Coruña), además de una bióloga de Murcia bregada en misiones de observación de pesca y mamíferos marinos del Instituto Español de Oceanografía.
Al cierre de esta edición, todavía son 5 los marineros del Argos desaparecidos y las autoridades locales insisten en que, pese a la climatología adversa, prosigue el operativo de búsqueda. En las primeras horas se han sucedido las labores de identificación tanto de las víctimas mortales como de los desaparecidos, mientras los rescatados se han afanado en telefonear a sus familias desde alta mar para comunicarles su estado. Según la información que traslada la Delegación del Gobierno, "todos los supervivientes gozan de buena saliud y tan solo se han reportado enfermedades y lesiones leves".
Fue el pesquero Puerto Toro el que dio con dos cuerpos sin vida en alta mar, mientras que el buque Robin M Lee, de una armadora viguesa que faenaba en la misma zona, ha podido rescatar con vida a un hombre y recuperar el cadáver de otro.
Las autoridades locales insisten en que las malas condiciones meteorológicas, sumadas a la enorme distancia a la zona del naufragio desde tierra, han impedido el despegue de los helicópteros de rescate durante la jornada del martes. "Una decisión que se revisa cada hora por si hubiera una ventana", puntualizan. Los medios movilizados en la zona, precisan, son "una patrullera (FPV Lilibet), dos pesqueros y un avión".
El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, está siendo el encargado de trasladar "personalmente" a las familias de los marineros gallegos la información que les transmiten desde el archipiélago del Atlántico Sur.
El Gobierno de las islas Falklands (Malvinas), un archipiélago británico en ultramar, informó a última hora de esta tarde que los 14 supervivientes serán trasladados "al Hospital King Edward VII Memorial para una evaluación médica". También viajan a tierra los cuerpos sin vida de ocho marineros para su identificación, mientras que prosiguen la búsqueda de los cinco desaparecidos.
Un buque de 2018 en la tempestad
La primera alerta del naufragio la dio el propio buque Argos Georgia, el lunes 22 de julio, al detectar una vía de agua en medio de un fuerte temporal en el mar, de acuerdo al comunicado oficial del Gobierno de las Falklands (Malvinas) al que ha accedido El Confidencial.
El pesquero estaba en tránsito hacia los caladeros y solicitó ayuda a unas 200 millas al sur de Puerto Stanley, si bien la situación del buque empeoró rápidamente y acabó por hundirse en cuestión de horas cuando sus tripulantes ya habían abandonado el barco en tres lanchas salvavidas. Fue a las 21:00 horas (hora española).
De acuerdo con el relato de las autoridades de las islas, el operativo de rescate que se activó de inmediato logró avistar una de las balsas, pero fracasó "ante unas condiciones climáticas extremadamente desafiantes" que obligaron al helicóptero a regresar a la base para repostar. El segundo intento fue todavía peor porque la tempestad seguía azotando.
El Argos Georgia es un palangrero congelador -54 metros de eslora (largo) por 13 de manga (ancho) de una armadora de capital británico y noruego que operaba bajo bandera de Santa Helena en los caladeros del Atlántico Sur, frente a las costas de Argentina, en la zona más austral del planeta. De acuerdo con la ficha del buque, fue construido en 2018.
La primera alerta del naufragio la dio el propio Argos Georgia al detectar una vía de agua en medio de un fuerte temporal en el mar
No obstante, cada naufragio agita fantasmas y reabre heridas en puertos gallegos como Ribeira, Marín o Vigo, donde han perdido a muchos vecinos en las fauces del mar. Nerviosismo y tensión son los dos sentimientos que imperan a este lado del Atlántico, en la cofradía del puerto de Ribeira, de donde serían vecinos algunos de los diez tripulantes españoles, además de Baiona (Pontevedra), de donde era natural el cocinero del barco.
En la memoria colectiva está la tragedia del Villa de Pitanxo, que naufragó en Terranova (Canadá) en 2022 y se cobró 21 víctimas, la gran mayoría marineros gallegos de la zona de Marín, donde tenía su puerto base.