De 1977 a 2015, los carteles electorales de la democracia
Uno de los momentos más emotivos de toda campaña electoral es el pistoletazo de salida: la pegada de carteles. Tanto en diciembre, como en estas elecciones veraniegas, ha
ECD, CDC y PSC se agruparon de cara a estos comicios.
El PSP del profesor Enrique Tierno Galván se presentó a las elecciones con varios partidos que habían formado parte de la Federación de Partidos Socialistas, bajo el nombre Unidad Socialista. Obtiene 6 escaños.
La extrema derecha entró en el Congreso con un escaño.
El líder del PSOE consiguió la mayoría absoluta, 202 de los 350 escaños.
Revalidó la mayoría absoluta.
El 4 de septiembre de 1989, José María Aznar, entonces presidente de la Junta de Castilla y León, fue elegido candidato a las elecciones generales, a propuesta del propio Fraga, exlíder de Alianza popular.
Y fueron a más, hacia la mayoría absoluta.
Foto: REUTERS (Juan Medina).
Uno de los momentos más emotivos de toda campaña electoral es el pistoletazo de salida: la pegada de carteles.
Tanto en diciembre, como en estas elecciones veraniegas, ha despertado especial interés porque hemos vistos rostros y siglas nuevas, colores que amenazan con irrumpir en el hemiciclo y voces que según el CIS están calando entre los electores.
Desde las primeras elecciones de la democracia ha existido propaganda y carteles electores. El joven Suárez, un Fraga bajo las siglas de Alianza Popular, o un Jordi Pujol presentándose en coalición, son algunos de los protagonistas que inundaron las fachadas y paredes de la España de 1977. En ese momento y hasta las elecciones de 1982 cobró mucha importancia la palabra "vota": "Votar centro es votar Suárez", "Vota PSOE", "Vota Fuerza Nueva", "Pon tu voto a trabajar", eslogan del PCE con un jovencísimo Santiago Carrilo como imagen... "Vota" fue rescatado en 2008, cuando José Luis Rodríguez Zapatero pedía que se votase "con todas tus fuerzas".
A partir de 1986 los eslóganes difundían mensajes distintos, muy positivos: "¡Palabra!", "Capaces de hacerlo", "Ahora", "Merecemos una España mejor", "Vamos a más"...
El comodín de "cambio" es un recurso que ha surtido efecto en dos citas claves de la historia. Le valió a Felipe González en 1982, era una palabra que aunaba el sentimiento de gran parte de la población; y le valió a Mariano Rajoy en 2011 cuando pedía que España se sumase al cambio.
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