El pueblo a una hora de Sevilla que es un refugio perfecto para hacer turismo y escapar del calor

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“Sevilla tiene un color especial” cantan Los del Río. La capital andaluza es un símbolo en cuanto a turismo se refiere. Cientos de miles de turistas alrededor del mundo acuden a Sevilla para disfrutar de su gente, su comida y sus zonas emblemáticas como el barrio de Triana y la Plaza de España. Aunque también hay que reconocer que hay que echarle valor para ir allí en pleno periodo estival. Por ello, si quieres huir del calor capitalino, el pueblo de Santa Olalla es una gran opción.

Situado a apenas una hora de Sevilla, este municipio onubense se encuentra al nordeste de la provincia de Huelva. Está inmerso entre el Parque Nacional de la Sierra de Aracena y los Picos de Aroche. Destaca por sus dehesas y las pequeñas elevaciones cubiertas, además de por los bosques llenos de encinas y alcornoques, entre los que discurren muchos arroyos. Todo ello ofrece un entorno espectacular.

El pueblo de Santa Olalla tiene un enorme patrimonio cultural e histórico, debido a que su fundación data de la época romana, cuando era conocido como Ponciana. Cuenta con un castillo fortaleza que data nada menos que del siglo XIII, además de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, cuya construcción abarcó desde el siglo XIV hasta el XVIII.

En cuanto a las festividades, Santa Olalla tampoco se queda corto. Sus dos fiestas grandes son la Romería de Santa Eulalia, celebrada en mayo; y la Feria de Agosto. Durante la romería, el pueblo se llena de devotos llegados de todas partes del país para procesar a la patrona del pueblo. En cuanto a la feria, es la fiesta grande del municipio. Más de 50 casetas repartidas en los que se celebran grandes actividades.