No es la de San Jorge: no podrás evitar hacer decenas de fotos a esta increíble playa oculta de Galicia

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El norte de España es una gran opción para visitar durante la época estival. El sofocante calor que hace en prácticamente toda la península convierte a esta zona en un oasis debido a sus temperaturas más relajadas y soportables. Qué mejor que disfrutar de la tranquilidad que puede ofrecer estar tumbado en la playa que hacer en la de Lagoelas, una de las más calmadas y ocultas de toda Galicia.

Situada en el concello de Cangas de Morrazo, de la provincia de Pontevedra, se localiza bastante cercana a otra playa más conocida, la de Menduiña, ubicada en la costa oriental de la ría de Aldán. Hay un motivo por el cual esta playa escondida no es tan concurrida. Para acceder a ella, hay que atravesar un sendero a pie por el monte que tiene una longitud de entre dos y tres kilómetros, lo cual hace que mucha gente no le apetezca meterse esa paliza. Ellos se lo pierden.

Una vez allí, lo primero que te llamará la atención es su arena. La finura que posee, unido a su color blanco, hace que parezca que estás andando sobre suelo normal. Eso sí, hay que tener en cuenta una cosa respecto a la naturaleza. Intenta ir algún día que sepas que no vaya a haber mucho viento, puesto que no hay manera de resguardarse, y cuando se levanta la arena la estancia puede volverse algo incómoda.

Por último, la playa de Lagoelas ofrece un enclave ideal para los amantes del senderismo. Además del camino que hay que recorrer para llegar a ella, al estar situada en el cabo de Udra dispones de una ruta completa por toda la zona en la que podrás maravillarte con las vistas de la costa, y después de hacer deporte refrescarse en sus tranquilas aguas.