Recuerda a 1898, por C. Fernández

Estimado director,

en referencia a su artículo de ayer "Pedro Sánchez e Iván Redondo: dar cera, pulir cera", el problema es el desmatelamiento institucional y el desarme moral: el todo vale con tal de seguir en el poder le pasará una factura exhorbitante, en términos económicos, sociales y políticos, a nuestro querido país y lo pagarán las generaciones futuras. No hay que ser un gran profeta para atisbar que el futuro traerá un empobrecimiento generalizado de los españoles, una división social que hará mas difícil la convivencia e incrementará la violencia.

La gran labor del Partido Socialista en los años ochenta del siglo pasado, de la mano de dirigentes capaces, moralmente solventes y con un proyecto de país que llevaron a cabo cuando accedieron al Gobierno y pusieron a España en la vanguardia de Europa, ha sido desmantelada y dilapidada por un presidente de Gobierno que alardea de ser socialista, progresista, ecologista y no se cuantos "istas" mas, pero que está en las antípodas de lo que conceptualmente se entiende por una persona capaz y de progreso.

Confiemos en que en las próximas elecciones nos podamos quitar la mascarilla y el velo que no nos deja ver el destrozo causado y a los responsables del mismo y acertemos al votar en consecuencia. Y mientras tanto, hay que apretar los dientes, trabajar los que estemos en condiciones de hacerlo y ayudar a los que tenemos cerca a superar de la mejor manera posible este marasmo que me recuerda mucho a la crisis de 1898.

Carlos Fernández