Las empresas sacan provecho de una moda que les permite atraer capital sin ser los mejores de su clase: se envuelven en burocracia 'verde' y venden bien el paquete
A corto plazo, todo seguirá en manos de Putin y sus decisiones. Lo más probable es que mantenga las idas y venidas con el Nordstream. Provoca subidas de precios que aprovecha para mejorar sus ingresos de días posteriores
Nadie discute que la energía más barata es la que no se consume. Esa es la idea del plan del Gobierno, al que no es ajena esa pulsión de la izquierda por decirnos cómo tenemos que vivir
El mundo va a necesitar seis millones de barriles diarios más entre el año pasado y el que viene. Si no se producen, las subidas de precio serán inevitables
En un país como el nuestro, con un déficit público estructural y una abultadísima deuda, hay que preguntarse si es posible un camino alternativo para atender a quienes lo necesitan sin favorecer a los más pudientes
La obsesión con el mercado eléctrico del Gobierno español es lo que nos adentra en un fárrago apenas comprensible de cambios regulatorios, subvenciones cruzadas, recargos artificiales y precios intervenidos
De todas las ensoñaciones gasistas, la que figura en el frontispicio de la transición ecológica es la conversión de España en una potencia exportadora de hidrógeno
La calculada y temerosa posición europea no ha impedido que los precios del petróleo y sobre todo los del gas se hayan disparado en los mercados internacionales
Es potestad del Gobierno y de la mayoría parlamentaria que lo apoya establecer los impuestos que considere oportunos, pero la inflación no se corrige subiendo los costes de las empresas
Cuando la terca realidad impone sus restricciones, suele recurrirse a la aparición de nuevas circunstancias que invalidan el cálculo inicial del Gobierno o simplemente nos hacen comulgar con una realidad paralela
A largo plazo, dada nuestra absoluta dependencia del exterior, mejorar nuestra seguridad energética solo es posible si reducimos nuestros consumos de petróleo y gas
Para sobrellevar la crisis, Europa da ayudas a consumidores y empresas incluso más generosas —sobre todo en el caso de las empresas— que las nuestras, pero respeta el funcionamiento del mercado