Audiovisual Sport desconvoca la reunión de sus socios y tensa la guerra del fútbol con Mediapro

Vuelve a encallarse la guerra del fútbol. Pese a que el pasado jueves Sogecable aceptó sentarse en la misma mesa que Mediapro, por la mediación de la Liga de Fútbol Profesional, la compañía de la familia Polanco demostró ayer que sigue en sus trece y que no moverá un ápice su posición.

En la reunión del jueves, celebrada en la sede de la LFP en Madrid, los representantes de Audiovisual Sport, Daniel Margalef y Alvaro Lacalle, pidieron posponer cualquier acuerdo con Mediapro y su número dos, Tatxo Benet, hasta conocer la opinión de los socios de su compañía en un consejo de administración que Audiovisual iba a celebrar ayer miércoles.

Pero, finalmente, esa reunión del consejo de administración no se ha producido y, por tanto, no hay propuesta de Sogecable para acabar con la guerra del fútbol que dura ya dos jornadas de liga. La posición de Audiovisual Sport, controlada en un 80% por Sogecable y en un 20% por TV3, sigue firme: los derechos de emisión de los partidos son de ellos y Mediapro no está cumpliendo la ley.

Ayer, César Alierta, presidente de Telefónica, accionista de Sogecable con un 17%, insistió desde Londres en esta idea: “Los contratos están para cumplirlos”, aseguró, en referencia al ‘status quo’ anterior a esta batalla que daba a Audiovisual Sport los derechos de emisión.

Mientras, a última hora de la tarde de ayer, ni Mediapro ni la Liga de Fútbol Profesional habían recibido ninguna llamada ni ninguna noticia oficial de los gestores de Audiovisual. “No tenemos noticia, pero a nosotros no tienen por qué llamarnos”, explica Tatxo Benet.

Mañana finaliza el ultimátum de la Liga

La Liga de Fútbol Profesional ya está preparada para hacer efectiva su amenaza de dar la señal de los partidos a las televisiones para que se cumpla la ley, es decir, que haya partidos en abierto, en pay per view y no falle la señal para las televisiones internacionales, si Sogecable y Mediapro no firmaban la pipa de la paz.

Esa amenaza cumple mañana viernes, día en el que la LFP mantiene la reunión de su Comisión Delegada, que debe tomar la decisión definitiva. Según declaró ayer un directivo de este organismo al diario El Mundo, han reservado diez millones de euros para alquilar los equipos de televisión necesarios para entrar en los campos de fútbol y dar ellos la señal.

Si la decisión tomada es esa, que todo apunta a que sí, no se podrá hacer materialmente efectiva hasta la siguiente jornada, la cuarta, la del fin de semana del 22 y 23 de septiembre. Lo que pasará en los partidos de este fin de semana es una incógnita.