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La TDT de pago sale adelante a pesar de las presiones de Prisa
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EL REAL DECRETO SE VOTA MAÑANA EN EL CONGRESO

La TDT de pago sale adelante a pesar de las presiones de Prisa

El Pleno del Congreso ha aprobado hoy con 183 votos a favor, 150 en contra y 6 adbstenciones el decreto ley que regula la Televisión Digital Terrestre

Foto: La TDT de pago sale adelante a pesar de las presiones de Prisa
La TDT de pago sale adelante a pesar de las presiones de Prisa

El Pleno del Congreso ha aprobado hoy con 183 votos a favor, 150 en contra y 6 adbstenciones el decreto ley que regula la Televisión Digital Terrestre de pago. De poco han servido las presiones del Grupo Prisa que, a través de sus medios de comunicación, intentó detener dicha aprobación de la TDT por los grandes perjuicios que le supone.   

Todos los ojos miraban a CiU en la votación de hoy. El Gobierno necesitaba sus votos para sacar adelante la TDT. Y los diferentes medios de comunicación habían sacado en los últimos días la artillería para defender sus intereses. “Durán i Lleida se ha reunido con todos los grupos privados sin excepción”, explicaba a El Confidencial el portavoz de Economía de la formación catalana, Josep Sánchez Llibre. ¿Única oposición frontal? La de Prisa, cuyo consejero delegado, Juan Luis Cebrián, ha emprendido una dura campaña contra el Ejecutivo y busca a la desesperada frenar la convalidación del real decreto en la Cámara.

“Han puesto toda la carne en el asador. Han estado especialmente agresivos y se han dirigido a diferentes formaciones para intentar pararlo”, aseguran fuentes del sector y constatan fuentes parlamentarias. Sin embargo, la clave fue el nacionalismo catalán, después de que PP y IU hubieran avanzado que votarán en contra de la convalidación. Y no parece lógico pensar que Jaume Roures, principal interesado en sacarlo adelante, no haya jugado sus bazas. Con los 169 escaños del PSOE y los 10 de CiU se aseguró la luz verde del texto, aprobado de urgencia por el Gobierno a mediados de agosto. Sánchez Llibre no soltó prenda ayer sobre cuál sería la decisión final de su grupo: “Fijaremos posición hoy (por este miércoles)”, añadió a este periódico, sin dar más precisiones.

En el sector, no se concibe un futuro sin la TDT de pago. Hasta tal punto de que el consejero delegado de La Sexta, José Miguel Contreras, se refirió ayer a su intención de liderar una plataforma de televisión de pago con Gol TV como “punta de lanza”. La reflexión de Contreras es clara: con la entrada de la TDT habrá 24 canales privados y la Ley General Audiovisual permite que sean de pago el 50% de cada operador; luego parece razonable pensar en una plataforma con 12 canales de pago. No obstante, fuentes del sector cuestionaron que algún operador pueda asociarse a una plataforma de pago “no neutral”.

Una realidad que Prisa no parece aceptar. La postrera entrada en vigor de la TDT de pago confirmará la devaluación de Digital Plus, un activo que la compañía intenta colocar a Telefónica y Vivendi -al menos en un 40%- para hacer caja y responder a las demandas de sus bancos acreedores. A principios de año no aceptaba una cifra por debajo de 2.500 millones de euros. Hoy se aceptaría una valoración de 2.000 millones. “Lo que no se entiende es que sigan en esa burbuja cuando el Gobierno viene avisándoles desde hace meses de que la TDT de pago se va a aprobar”, explican fuentes del sector. En abril, Industria ya hizo un amago que se paró desde Moncloa. Prisa lograba ganar tiempo.

La ruptura con Roures agrava el problema

El anuncio antes del verano de conversaciones con Imagina para la integración de sus área audiovisuales, con Cuatro y La Sexta como principales reclamos, convertía el problema en solución. Mediapro tiene el fútbol y la TDT de pago es la mejor forma de explotarlo. En el seno de la productora de Roures todavía hoy no se explican qué pasó dentro del grupo para que Prisa, con todo acordado para la fusión tres días antes de que concluyera el plazo para negociar, se descolgara en el último momento reclamando la gestión del holding. Lo explicó ayer a este diario José Miguel Contreras: “Se produjo todo de forma muy cordial. La última reunión duró siete minutos. Cambiaron nuestra condición inicial de que los derechos políticos fueran 50%-50% y todo se fue al traste”. Las fechas son importantes. El 7 de agosto las negociaciones quedan rotas y el día 13, sin dar a Prisa más árnica, quien actúa es el Gobierno.

Ese jueves el Ejecutivo aprueba la TDT de pago mediante real decreto ley. Tarde, muy tarde para Mediapro, que con el arranque de la Liga en perspectiva no puede solucionar el problema de los descodificadores, según lamentaban ayer Contreras y el propio Roures, en una comparecencia en el Congreso. Pero muy pronto para Cebrián, cuya ira culmina el 21 de agosto con un incendiario artículo en El País, amplificado convenientemente por el resto de medios del grupo: “Nos oponemos a un decreto de urgencia. Me parece anticonstitucional, sin ningún tipo de motivo aparente, cuando no sea beneficiar a los amigos del Gobierno”. Los mismos con los que negociaba hacía dos semanas.

Y más paradojas. Los argumentos que utiliza Prisa y que ha intentado trasladar a los grupos a la desesperada son similares a los que lhan llevado al PP a votar no. También se refieren los populares a que es una medida “hecha para favorecer a un grupo amigo”. También se pone en solfa la “agosticidad” que mencionaba Cebrián y la fórmula del real decreto. “Se ha abusado de esta figura, que sólo debe darse en casos de extraordinaria y urgente necesidad y ante circunstancias que son difíciles o imposibles de anticipar. No parece que el apagón analógico, que es la razón con la que se justifica su urgencia, no fuera previsible, cuando fue el propio Gobierno el que lo adelantó en 2005 al 3 de abril de 2010”, aseguran fuentes parlamentarias populares.

El Pleno del Congreso ha aprobado hoy con 183 votos a favor, 150 en contra y 6 adbstenciones el decreto ley que regula la Televisión Digital Terrestre de pago. De poco han servido las presiones del Grupo Prisa que, a través de sus medios de comunicación, intentó detener dicha aprobación de la TDT por los grandes perjuicios que le supone.   

CiU Juan Luis Cebrián