Prisa desmantela la plantilla de 'Cinco Días' tras la entrada de Liberty

Jueves, 23 de diciembre. Una de la tarde. Prisa envía a los periodistas por e-mail su felicitación navideña: “Te deseamos felices fiestas y próspero Año Nuevo. Esperamos que 2011 sea un año lleno de éxitos, tanto en lo personal como en lo profesional”. Todo un alarde de sensibilidad. Apenas unos minutos antes, en la sede de Cinco Días, un abogado de KPMG dibujaba un futuro menos brillante para los profesionales del periódico ‘salmón’ del grupo. El consejero delegado, Juan Luis Cebrián, quieren 25 bajas voluntarias en el rotativo antes del 20 enero; si no, “se tomarán otras medidas”.

Es el primer recorte drástico de plantilla que plantea abiertamente la compañía de los Polanco desde que asumieran la mayoría del grupo las firmas integradas en la sociedad estadounidense Liberty Acquisition Holdings Corp. Esta decisión viene a sumarse a la delicada situación de los profesionales de CNN+ y Cuatro. Fuentes internas de Prisa dan por hecho que el cierre de la cadena de información 24 horas y la venta de su canal en abierto a Telecinco pondrán en la calle a otras 140 personas. ¿Sólo el principio? El Comité Intercentros del Grupo Prisa se teme lo peor y no descarta una huelga de todas las cabeceras del grupo, incluidas El País y As.

De momento, los trabajadores de Cinco Días acordaron el jueves que no firmarán las informaciones que publiquen hasta que el próximo día 4 de enero vuelvan a encontrarse con los representantes de la empresa y se les faciliten más detalles sobre el plan en marcha. En el encuentro del jueves, en el que también estaban presentes el director del diario, Jorge Rivera, y un representante de Recursos Humanos de Prisa, se comunicó la intención de contratar en paralelo a 12 técnicos informáticos para reforzar la página web del grupo, por la que se quiere apostar decididamente. Se mantendrá el papel, pero con un formato reducido a 32 páginas.

Toda una revolución que se produce apenas días después de que los accionistas de Prisa diera luz verde el 27 de noviembre a la entrada de Liberty en el capital de Prisa. Los Polanco veían reducida su participación en la compañía de una cuota mayoritaria del 70% al apenas 35% que registra actualmente la CNMV. Todo a cambio de recibir una inyección de cash de 650 millones, un montante clave para lograr el visto bueno de los bancos para la refinanciación de su deuda hasta 2013. Mediante esta aportación, sumada a las otras desinversiones acometidas por el grupo de medios, se busca dejar el agujero de la sociedad en 3.300 millones de euros, frente a los casi 5.000 con que se cerraba 2009.

Los contenidos se resentirán

El nuevo planteamiento para Cinco Dias, que cuenta con 87 profesionales en plantilla incluida la parte de administrativa y de gerencia, parece enlazar con la intención expresada por el consejero delegado en la última Junta Extraordinaria de accionistas. Se quiere evolucionar hacia un grupo de tecnología avanzada. Eso sí, no parece que tenga problemas en dejarse por el camino la calidad de la información. Fuentes presentes en la Asamblea celebrada el jueves explican a El Confidencial que los representantes de la empresa dijeron ser conscientes de que los cambios planteados implicarán que los contenidos se resientan. Sólo un mal menor que se asume.

Del mismo modo, la empresa explicó que hay dinero para pagar las indemnizaciones y que quieren tener resuelta la cuestión en la primera parte del año. El planteamiento es abonar a los que decidan acogerse al plan de bajas incentivadas un máximo de 45 días por año, tope que se rebajaría en función de los años de trabajo en el diario. El nuevo periódico también implicará cambios organizativos. Se pretende establecer nuevos turnos, arrancando a las siete u ocho de la mañana hasta las ocho de la tarde, siempre con el objetivo de dar más importancia a Internet. Al igual que en El País, se establecerá una mesa central que coordine el trabajo, al tiempo que se reducirá el número de secciones en el papel.

Como ya explicó este diario, los gestores de Liberty no vienen a España para socorrer a los Polanco por puro altruismo. “Si dentro de un año existe la necesidad urgente de vender un activo, tomaremos una decisión”, aseguraba Martin E.Franklin, presidente de la compañía, en un artículo publicado por The New York Times. “Todas las ventas hechas hasta ahora han sido forzadas, lo que no permite maximizar su valor”, lamentaba el ejecutivo. En la documentación remitida a la SEC, Liberty ya aseguraba que “si el cash flow operativo y los recursos de capital de Prisa son insuficientes para cumplir con las obligaciones de la deuda, puede verse forzada a vender activos, buscar equity adicional o ir a una mayor reestructuración de la deuda”. Parece que los primeros ajustes tocan al ámbito laboral.

¿Por qué comunicar la decisión un día antes de Nochebuena? Se explicó que para que los trabajadores reflexionen en familia durante el periodo vacacional sobre las posibilidades que se les presentan. El propio Cebrián ya avanzó durante la última Junta que era necesario “abordar un plan de reestructuración en profundidad que mejore la rentabilidad y la eficiencia operativa del grupo”. De momento, ya está prevista una concentración de los trabajadores el día 28 de diciembre a las ocho de la tarde frente a la sede de la compañía.