¡Raúl, presidente!

Iker Casillas lo dijo hace unas semanas: "Me encantaría ser presidente del Real Madrid dentro de unos años". Su compañero Raúl González Blanco es más callado y reservado. Cada uno es como es y el '7' blanco, que vive en una nube gracias a su espectacular temporada, ya prepara el futuro. O mejor dicho, escucha lo que dicen a su alrededor. No sólo sus íntimos, sino también madridistas con fuerza, tradición y pedigrí, que encajan piezas y comienzan a ver cuál debe ser el futuro. Que esté tranquilo Ramón Calderón, al menos de momento, que no van a por él. Pero lo cierto es que un sector importante del madridismo apuesta por Raúl... como futuro presidente del equipo blanco. Las familias blancas se van posicionando, pero algunas ya tienen claro que Raúl como cabeza de cartel será imbatible. Y ya han comenzado su estrategia para atraer a un icono del madridismo que, cosas de la vida, ha salido reforzado de su ostracismo en la selección. Si hubiera que votar un 'Papa blanco', la fumata sería inmediata. Saldría Raúl por mayoría absoluta.

El '7’ sabe que existen movimientos para convertirle en la clave de bóveda de una futura candidatura de consenso. Pero él mismo entiende que es demasiado joven y que debería pasar por una etapa de aprendizaje. Le gusta mucho el fútbol, estudiar tácticas equipos rivales y todo eso. Pero ni él ni sus íntimos le ven como entrenador, al albur de un mal resultado que cuestione el prestigio que se ha ganado vestido de corto. Su entorno cree que debe picar más alto y que un puesto de responsabilidad en la cúpula dirigente del club sería un paso intermedio antes de metas mayores. Calderón, que prefiere tenerlo como amigo, le renovará año a año hasta que cumpla los 40 si el jugador aguanta el ritmo, que tiene pinta que lo hará. Y después quiere ofrecerle un cargo de relieve. El problema para el actual presidente es que él durará lo que dure su mandato o quizás algo más. Pero Raúl ya es inmortal. Y la pista de salida se abrirá en el mismo momento en que se retire como jugador. Raúl González Blanco presidente. Como Beckenbauer en el Bayern. Esa es la idea. Y no de unos cualquiera.