Presionan a Ramón Calderón para que aparte del Real Madrid a su mecenas Alfonso Carrascosa, consejero delegado de Legálitas

Han tenido que recular y cuando se admiten errores siempre puede haber víctimas. En este caso, incluso puede haber sangre y algún chamuscado. Alfonso Carrascosa, consejero delegado de Legálitas y asesor, sostén, mecenas, ideólogo y paladín de Ramón Calderón (muchos empleados del club afirman en privado que es el presidente del Real Madrid en la sombra), se ha expuesto demasiado como consecuencia del caso destapado por la COPE, el de los avales irregulares para convertir la Asamblea de compromisarios del Real Madrid en lo más parecido al cuarto de estar de la casa de Ramón Calderón (ver noticia). La comparecencia de Carrascosa, a petición propia, en El Tirachinas de la COPE, confirmando que toda la trama era así y que los directivos madridistas estaban detrás, fue calificada como desafortunada por amigos y enemigos, y ha provocado que incluso un sector de la junta pida a Calderón que aparte de la circulación a Carrascosa, que no se exponga más e incluso que se anuncie su marcha.

El problema es que Calderón no puede hacer eso. Principalmente porque Carrascosa es su gran valedor, el hombre que le abrió la puerta de la presidencia con sus gestiones en los tribunales y el que mantiene abiertos los grifos de la fontanería del Bernabéu. No puede ser directivo por no tener la antigüedad necesaria como socio, cinco años, pero tiene más poder que toda la junta unida. Además, no puede echarle porque teóricamente no está, como reconoció Calderón a pregunta de De la Morena el pasado año en El Larguero. Pero Carrascosa se mueve por el madridismo y reparte tarjetas como las que ilustran esta noticia.

El presidente tuvo que dar marcha atrás y anular el proceso de elección de esos compromisarios ante el escándalo que supuso admitir que se enviaban papeletas a los socios pidiendo el aval y dejando en blanco la casilla en la que debía ir el nombre del asambleísta votado. Ya se encargaban Calderón y sus secuaces de rellenar con algún amigo, conocido o afín.

Carrascosa fue el hombre orquesta en la operación (como lo había sido en toda la trama del voto por correo y en la estrategia de judicializar el proceso electoral para que Calderón saliera presidente). No solo porque los envíos de las papeletas los pagó Legálitas y los realizó otra empresa suya, así como las gestiones para contactar con los avalistas que no sabían a quien avalaba, sino porque tuvo que ser él quien diera la cara para defender lo indefendible en la misma COPE. El hombre se apartó de la circulación durante los días siguientes y se marchó a Venezuela ya que, entre otras cosas, los máximos accionistas de la empresa de abogados que dirige no estaban excesivamente satisfechos por haber visto vinculado el nombre de su firma a una especie de chanchullo. Legal, sí, pero chanchullo al fin y al cabo. Hasta el propio Carrascosa recoció que, "a lo mejor, no era ético, pero que era legal". Aunque el hecho de que su empresa manejara el censo de socios del Real Madrid, como reconocían las comerciales de su empresa, atenta contra la Ley de Protección de datos y puede ser considerado delitos.

Pero hay nuevas vías de confrontación. La Plataforma Madridista que preside el animoso Eugenio Martínez Bravo ha pedido explicaciones por este asunto. No se conforma con el hecho de que Calderón anulara el proceso y admitiera su error. No, quiere que se depuren responsabilidades e incluso está dispuesto a pedir que se retire la condición de socio del citado Carrascosa y de todos los socios que fueron manipulados. Hay más, la propia junta electoral del club decidió pedir el pasado jueves que el proceso de elección de compromisarios siguiera pero anulando simplemente los votos logrados irregularmente por la junta de Calderón, a la que acusó de fraude.

Carrascosa está en el ojo del huracán, se le considera el cerebro gris y algunos compañeros de viaje de Calderón creen que ya es un lastre, que se nota demasiado su condición de "Rasputín de la corte". El presidente tratará de apartarlo de la vía pública, pero será difícil que Carrascosa abandone ese despacho del Bernabéu desde el que dirige los destinos del club y aspectos tales como la admisión de nuevos abonados, los cambios en las propiedades de diversos palcos y muchas cosas más.