Alrededor de 200 aficionados apoyan a la plantilla del Levante y piden la dimisión del consejo

Alrededor de doscientos aficionados del Levante expresaron el jueves su apoyo a los jugadores y empleados del club y reclamaron la dimisión del consejo de administración durante una concentración promovida por la delegación de peñas a las puertas del estadio Ciudad de Valencia. Los mismos jugadores del primer equipo y el filial de Segunda División B se mezclaron entre los aficionados para hacer público su malestar por los impagos y la "incapacidad" de la que, a su juicio, adolece el consejo para encontrar una solución a los problemas económicos. Así, peñistas, accionistas minoritarios y jugadores veteranos se sumaron a esta concentración a pesar de la lluvia y expresaron un sentimiento unánime contra el consejo de administración y el ex presidente Pedro Villarroel, a quien consideran culpable de la actual situación de quiebra.

Los manifestantes exhibieron dos pancartas con los lemas "Villarroel culpable" y "Consejo dimisión" y corearon lemas como "jugadores caballeros, directivos embusteros", "Romero marioneta" o "Armando métele" en alusión al incidente de la mañana del jueves entre Armando Lozano y Pedro Villarroel. La concentración, que estuvo controlada por agentes de la policía nacional, se desarrolló en el aparcamiento del estadio Ciudad de Valencia durante aproximadamente una hora y concluyó sin ningún tipo de incidentes. El capitán del Levante Luis Manuel Rubiales agradeció el apoyo de los aficionados e informó de que el presidente del club, Julio Romero, ha apuntado la posibilidad de que el próximo lunes se pueda alcanzar un acuerdo con una entidad financiera para la concesión de un crédito. "El motor de este club es la afición, hemos de estar agradecidos. Nuestra reivindicaciones son justas, queremos que se encuentre una solución o que se permita la llegada de nuevos inversores", explicó. Asimismo, el vicepresidente de la delegación de peñas, Miguel Naranjo, explicó a Efe que en las próximas horas se van a promover varias reuniones para estudiar posibles movilizaciones en el encuentro que Levante y Valencia jugarán el domingo.

Y es que las cuentas siguen sin estar claras en el Levante UD. Los continuos rumores acerca de alguna posible administración desleal sigue sonando cada vez más fuerte y los expertos auguran a que el día que se conozca ‘el pastel’, el agujero va a ser más hondo de lo que se teme. Villarroel, entre las cosas que dijo ayer cuando tuvo la reyerta con los jugadores, fue que dejó 12 millones de euros en las arcas del Levante. Nadie de allí se lo tragó. Los futbolistas esperan que un grupo nuevo de inversores meta el dinero necesario para salvar a la entidad y –sobre todo- para poder cobrar. Los dos entrenadores que han dejado esta temporada de entrenar al club valenciano, al menos, no se fueron con las manos vacías. Abel Resinos cobró una parte de lo que le correspondía gracias a la amenaza de embargo sobre la taquilla en el partido Levante-Real Madrid. Esa noche el ex meta rojiblanco se embolsó 50.000 euros. Gianni de Biasi pudo cobrar poco más de 300.000 euros aunque perdonó lo que le correspondía desde estas Navidades. Ahora entrena al Torino italiano.