Una invasión de ultras de extrema derecha detuvo el partido del Athletic
Los hinchas británicos tienen mala fama en Europa, pero este jueves fueron los ultras del modesto Austria de Viena que marcaron la noche en la Liga Europa al
Los hinchas británicos tienen mala fama en Europa, pero este jueves fueron los ultras del modesto Austria de Viena que marcaron la noche en la Liga Europa al provocar una interrupción de casi media hora contra el Athletic de Bilbao. Todo comenzó apenas comenzada la segunda parte cuando el sector radical de los austríacos encendió varias bengalas, inundando de un espeso humo el pequeño estadio vienés, donde la selección española se entrenó el año pasado antes de la gran final de la Eurocopa.
Así, se produjo la primera interrupción de cinco minutos cuando el encuentro iba 0-1 para los vascos. Un cuarto de hora más tarde y tras una controvertida decisión del árbitro, el noruego Oddvar Moen, los fanáticos del Austria perdieron los papeles por completo al tirar objetos al campo. Por megafonía los responsables del Austria, incluyendo el propio presidente del club violeta, trataron de tranquilizar a la hinchada, que había desplegado en su sector banderas españolas pre constitucionales e incluso una pancarta con el lema "Viva Franco". En vano. Cayeron más objetos sobre el campo y los insultos contra el colegiado y la plantilla visitante aumentaron de tono.
Finalmente cuando un grupo de ultras austríacos logró saltar la valla que separa las gradas del terreno de juego, el árbitro escandinavo interrumpió el encuentro y medio centenar de policías antidisturbios salieron al campo. Fue entonces cuando Markus Kraetschmer, gerente general del Austria, intentó personalmente frenar la entrada de más hinchas al campo de juego. Durante casi media hora, los jugadores de ambos equipos permanecieron en los vestuarios, ante los desesperados suplicios de los responsables del club vienés a su hinchada de que mantenga la calma ante las graves consecuencias que le esperan al Austria.
Ahora habrá que ver cuál será la sanción que emitirá el comité disciplinario de la UEFA contra el club vienés, que tradicionalmente representa a las clases sociales más favorecidas de Viena, una ciudad conocida como la capital mundial de la música y la cultura. Este jueves los hinchas del Austria han aportado una nueva y menos favorecida faceta a la imagen de esta ciudad.
El Athletic sigue en Europa tras golear en Viena
El Athletic cumplió este jueves ante el Austria de Viena el objetivo de asegurar la continuidad en la Liga Europa, al firmar una goleada (0-3) en un encuentro marcado por los incidentes provocados por los ultras locales, que invadieron el terreno de juego y obligaron a interrumpir el partido durante 20 minutos.
Los hombres de Joaquín Caparrós saltaron al césped del estadio Franz Horr en un ambiente frío en lo atmosférico pero bien caldeado en las gradas, con 11.000 aficionados violetas animando a un equipo al que sólo le valía la victoria para seguir vivo en la competición europea.
Ficha técnica
Austria de Viena: Safar - Klein, Dragovic, Bak, Suttner - Baumgartlinger - E. Sulimani (Krammer. m. 49) , Junuzovic, Liendl (Schumacher, m. 57) , Acimovic y Diabang (Topioc, m. 82).
Athletic: Iraizoz - Iraola, San Jose, Amorebieta, Castillo - Iturraspe, Javi Martinez, Gurpegi (Etxeberría, m. 90), Yeste - Muniain (De Marcos, m. 63) y F. Llorente (Díaz de Cerio, m. 88)
Goles: 0-1: m.19: Llorente, 0-2: m.61: San José, 0-3: m.85: Llorente.
Árbitro: Svein Oddvar Moen (Noruega). Mostró cartulina amarilla a Sulimani (m. 10), San José (m. 33), Dragovic (m. 61).
Incidencias: Estadio Franz Horr, aforo completo de 11.000 localidades. El encuentro tuvo que ser interrumpido en dos ocasiones por el lanzamiento de bengalas y la invasión del terreno por parte de aficionados radicales vieneses.
Los hinchas británicos tienen mala fama en Europa, pero este jueves fueron los ultras del modesto Austria de Viena que marcaron la noche en la Liga Europa al provocar una interrupción de casi media hora contra el Athletic de Bilbao. Todo comenzó apenas comenzada la segunda parte cuando el sector radical de los austríacos encendió varias bengalas, inundando de un espeso humo el pequeño estadio vienés, donde la selección española se entrenó el año pasado antes de la gran final de la Eurocopa.
Así, se produjo la primera interrupción de cinco minutos cuando el encuentro iba 0-1 para los vascos. Un cuarto de hora más tarde y tras una controvertida decisión del árbitro, el noruego Oddvar Moen, los fanáticos del Austria perdieron los papeles por completo al tirar objetos al campo. Por megafonía los responsables del Austria, incluyendo el propio presidente del club violeta, trataron de tranquilizar a la hinchada, que había desplegado en su sector banderas españolas pre constitucionales e incluso una pancarta con el lema "Viva Franco". En vano. Cayeron más objetos sobre el campo y los insultos contra el colegiado y la plantilla visitante aumentaron de tono.
Finalmente cuando un grupo de ultras austríacos logró saltar la valla que separa las gradas del terreno de juego, el árbitro escandinavo interrumpió el encuentro y medio centenar de policías antidisturbios salieron al campo. Fue entonces cuando Markus Kraetschmer, gerente general del Austria, intentó personalmente frenar la entrada de más hinchas al campo de juego. Durante casi media hora, los jugadores de ambos equipos permanecieron en los vestuarios, ante los desesperados suplicios de los responsables del club vienés a su hinchada de que mantenga la calma ante las graves consecuencias que le esperan al Austria.
Ahora habrá que ver cuál será la sanción que emitirá el comité disciplinario de la UEFA contra el club vienés, que tradicionalmente representa a las clases sociales más favorecidas de Viena, una ciudad conocida como la capital mundial de la música y la cultura. Este jueves los hinchas del Austria han aportado una nueva y menos favorecida faceta a la imagen de esta ciudad.