La deportista a seguir | La niña maravilla que ya sueña con imitar los pasos de Ricky Rubio

Cuando hablamos de Ricky Rubio, posiblemente lo hacemos de uno de los mejores jugadores de todos los tiempos de nuestro país. A sus 31 años, lleva toda una vida ligado al deporte de la canasta y puede presumir de ser uno de los grandes bases de la historia del baloncesto nacional. Sin embargo, a pesar de sus increíbles números y su habilidad para derribar defensas gracias a su capacidad analítica, hubo un tiempo en el que estuvo muy discutido. ¿El motivo? Su tiro.

Rubio debutó en ACB de la mano de Joventut con solo 15 años y pronto se convirtió en un soplo de aire fresco para el baloncesto nacional. Era un jugador capaz de todo: leía el juego a la perfección, era valiente en ataque y un gran defensor, lo que pronto le valió para que los grandes equipos se fijaran en él. Tras fichar por el Barcelona en 2009, un par de años después se convertiría en jugador NBA... donde no siempre fue valorado como merecía e, incluso, se le llegó a criticar.

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Algunos medios de comunicación norteamericanos llegaron a afirmar que se trataba de uno de los bases con peor tiro de la historia de la competición, sobre todo porque Ricky se 'olvidó' de la canasta. En sus primeros años en la NBA, consciente de que en el cuerpo a cuerpo tenía todas las de perder, decidió convertirse en un asistente de lujo mientras cogía músculo. Pronto ganó esa masa necesaria para competir, pero le cogió gusto a eso de hacer brillar a sus compañeros.

Y aunque no es menos cierto que sus porcentajes anotadores han mejorado clarísimamente, con una media en la NBA de más de 11 puntos por partido en sus ya once temporadas en la competición, Ricky se ha quedado con ese estigma. De hecho, solo hay que ver cómo se ha convertido en el gran líder de los últimos títulos de la Selección, donde su aportación anotadora ha sido básica. Es, sin duda, un caso muy parecido al de Ada Toribio, la futura joya del baloncesto nacional.

Con solo 14 años, Ada Toribio está llamada a ser una de las grandes referencias del baloncesto de nuestro país. No en vano, en el primer gran torneo de la categoría, la Minicopa LF Endesa, se ha convertido en la MVP y la líder de su equipo, Movistar Estudiantes, para llevarle al triunfo final en el campeonato. Y es que esta joven, que a pesar de su insultante juventud lleva varios años sonando en el mundo del baloncesto, es un soplo de aire fresco y está llamada a grandes éxitos.

Formada en las categorías inferiores de Las Rozas, desde donde ya comenzó a hacerse un nombre, Toribio fichó por Movistar Estudiantes el pasado curso, donde se ha convertido en toda una referencia. De hecho, en la Minicopa ha sido su explosión: ha promediado 14,8 puntos, 6 rebotes, 4,8 asistencias y 4,5 robos, destacando especialmente en la final, en la que llevó a su equipo al triunfo por 48 a 60 frente a IDK Euskotren, en la que fue la gran estrella del partido.

Durante el gran partido, Toribio fue la gran líder de Estudiantes y, a pesar de su corta edad, mostró una veteranía en la pista impropia de alguien tan joven. En la final registró 25 puntos, 10 rebotes, 8 robos y 4 asistencias... y, todo ello, a sabiendas de que su gran 'debe' es el lanzamiento. Tal y como le ocurriera a Ricky Rubio, aún tiene mucho que mejorar en el tiro, si bien es una verdadera referencia repartiendo juego y liderando el equipo con el balón en sus manos.

Aún es pronto para saber cuál será tu techo, pero lo cierto es que la joven jugadora lo tiene todo para convertirse en una de las grandes referencias del baloncesto nacional en los próximos años. De hecho, desde que comenzara a hacer deporte, su nivel ha sido tan elevado que siempre ha jugado con compañeras que tenían uno o dos años más que ella. En la Minicopa ha demostrado su enorme calidad: queda por ver dónde llega, pero solo con un año más, Ricky ya debutaba en ACB...