"No hay supervivientes en mis peleas": Golovkin lanza el primer golpe a Canelo

Los golpes previos al combate entre Canelo y Golovkin se estaban haciendo esperar, pero el kazajo ya se ha subido al ring verbal. "No hay supervivientes en mis combates", afirmó 'GGG' después de convalidar su peso en el prepesaje habital de la semana antes de la cita. El actual campeón mundial de peso medio es el favorito entre los expertos y las casas de apuestas. Con un 38-0 a su favor (33 KO) y, a pesar de su edad, todo parece indicar que llevará al mexicano a su terreno en un combate en el que se enfrentarán dos estilos muy ofensivos.

"Yo no soy Julio César Chavez y Canelo no es Danny Jacobs", afirmó el pugilista cuando los periodistas pusieron en duda su estado físico. Ante las críticas, Golovkin, que tuvo que esforzarse más de la cuenta en su último combate, ante Jacobs, al que ganó por puntos, salió del paso: "El boxeo es un negocio. Si hubiera noqueado a Jacobs, esta pelea contra Canelo no se hubiera producido", aseguró. Afirmación a la que su entrenador, Abel Sánchez, también se unió: "No haber noqueado a Jacobs nos ha traído dos cosas buenas: la pelea contra Canelo y la enseñanza de que Golovkin puede aguantar un combate de 12 asaltos sin problemas".

Las negociaciones para que el combate del año se produzca, y de paso eclipse los últimos destellos de la pelea de los mil millones, han durado dos años. De esta forma, el Kazajo y su equipo mantienen la teoría de que el mexicano habría evitado la pelea si Golovkin hubiese machacado a Jacobs. No fue así. Situación, la del 'knock out', que tampoco saboreó Canelo en su precedente con Chávez. "Parecía un pato", dijo el kazajo sobre la postura de su rival del próximo 16 de septiembre. "Chávez no había peleado por debajo de las 167 libras en cinco años. Se le notaba muy delgado y difícilmente podía lanza un golpe. Si esa misma versión de Chávez se hubiese enfrentado a Golovkin, le habríamos destrozado", sentenció su entrenador.

Golovkin, en busca del récord

'GGG' llega al T-Mobile Arena invicto. Golovkin ha defendido el título de campeón de peso medio durante años. En concreto, lleva 18 defensas consecutivas del título que la acredita como campeón, dos menos que las de Bernard Hopkins​, que ostenta la mejor marca de la historia. "Ahora es el momento de que escribamos nuestra propia historia. Me siento emocionado por esta pelea y todo marcha perfecto", dijo su entrenador a falta de cinco días para un combate que aún no tiene proveedor televisivo en España. De ganar, Gennady colaría su nombra entre los grandes de su categoría y compartiría estandarte con boxeadores de la talla de Carlos Manzón o Marvin Hagler.

Golokin se encuentra concentrado en su centro de entrenamiento instalado en las montañas del Big Bear, en California, mientras que Canelo estudia minuciosamente los movimientos del rival para apostar por una estrategia más técnica que ofensiva. De hecho, su entrenador, José Reynoso, aseguró que ya conocen algunos de los puntos débiles de su rival y que trabajarán para dañarlo lo máximo posible. "Vamos a explotarlas el 16 de septiembre. Por eso lo estudiamos al detalle y trabajamos ahora en nuestro plan", aseguró el 'Chepo'.

En juego estarán un título honorífico y tres de los cuatro cinturones de la categoría (WBC, WBA e IBF), según anunció el promotor del boxeador kazajo, Tom Loeffer, tras la reacción de Canelo. El mexicano, de ganar, aseguró que no aceptará el título del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Una decisión que parece que tomó por su mala relación con la organización, quien ya ha establecido el peso en 168 libras. Un total de 76,2 kg que ninguno ha superado en el prepesaje y de los que ya presumen en sus redes sociales.

El verdadero combate

Ninguno de los dos pugilistas que se subirán al ring de Las Vegas fue puesto contra la lona en su carrera profesional y se espera un duelo frenético con la mirada de nuevo puesta en la edad de los contrincantes. Canelo es 7 años más joven que Golovkin, un punto a favor en cuanto a resistencia se refiere, pero que no siempre se refleja sobre el cuadrilátero. Ya se vio en el Mayweather-McGregor del pasado 26 de agosto, aunque la 'farsa' no es comparable a este "verdadero combate" de boxeo, tal y como lo definió el promotor de Álvarez, Oscar de la Hoya, quien vaticinó que el combate será el "más grande de los pesos medios en la historia del boxeo".

De momento, Golovkin no cree que su edad afecte al duelo: "Me siento grandioso a mi edad, hago mis entrenamientos día a día e incluso me veo más joven que Canelo". Además, zanjó con un nuevo golpe los rumores sobre su posible retirada tras la pelea. "Quiero pelear cinco años más, quizá hasta los 40; sé que es un deporte peligroso y exigente, pero me siento bien", aseguró a menos de una semana para el desenlace de un combate que ya ha noqueado en ventas al que protagonizaron Floyd y Conor.