Philipsen se corona rey del caos en el Tour de Francia con Van der Poel como asistente de lujo

El ciclista belga Jasper Philipsen (Alpecin Fenix) conseguió este martes su segunda victoria consecutiva en el Tour de Francia tras imponerse en un disputado esprint en la cuarta etapa, de 183 kilómetros entre Dax y Nogaro, con un final marcado por las aparatosas caídas cerca de la meta.

Tras una jornada muy tranquila, en la que ni siquiera se formó una fuga hasta pasados los 100 primeros kilómetros, de nuevo Philipsen aprovechó un lanzamiento excelso de su compañero neerlandés Mathieu Van Der Poel para ser el más rápido en un esprint de foto 'finish' sobre el australiano Caleb Ewan (Lotto Dstny).

En la clasificación general, el inglés Adam Yates (UAE Team Emirates) se mantiene líder con seis segundos de ventaja sobre su compañero, el esloveno Tadej Pogacar, misma diferencia que sobre su hermano Simon Yates (Jayco Alula). De este modo, Jasper Philipsen confirmó su condición de llegador más fuerte después de que el año pasado se impusiera en Carcasona y en los Campos Elíseos.

Las caídas... y el embrollo

La fuga se disparó a 86 kilómetros de meta con Cosnefroy y Delaplace. La travesura del dúo galo se esfumó a 23 km del circuito Paul Armagnac. Los ejércitos de los candidatos marcharon a bloque hasta la estampida definitiva. Surgieron los nervios habituales, ya dentro del circuito se sucedieron las caídas. En la primera quedó eliminado el campeón de Europa, Fabio Jakobsen. Tal vez el favorito.

Cada uno buscó su espacio. El Jumbo preparó el despegue de Van Aert hasta con 4 hombres, pero el que lanzó el órdago fue el Alpecin con Van der Poel de nuevo como lanzador 'premium'. La pleitesía del rey del ciclocros y de la Roubaix la interpretó perfectamente Jasper Philipse, con un ataque lejano y mantenido que evitó debates. Es el sprinter más en forma del Tour.

La quinta etapa del Tour entra este miércoles en Pirineos con la quinta etapa entre Pau y Laruns, de 162,7 km de recorrido. Llegan los puertos importantes, entre ellos, y para empezar, el Col de Soudet, a mitad de recorrido, el primero de categoría especial, con 15,1 km al 7,2 %), para continuar con el Col D'Ichére (3a, 4,2 km al 7) y terminar con el mítico Marie Blanque (1a, 7,7 km al 8,6 %), con la cima a 18 km de meta.