Ecclestone confiesa en un juicio que se gastó 15 millones de euros en la boda de su hija

¿Se imaginan gastarse 15 millones de euros en una noche? Pues eso es lo que hizo Bernie Ecclestone para celebrar la boda de su hija Petra el pasado mes de agosto. El enlace no pasó inadvertido debido a la galería de conocidos que se reunieron en el pueblo italiano de Bracciano, pero ahora ha ido más allá al conocerse lo que el patrón de la Fórmula 1 permitió a su hija en el día que contrajo matrimonio con el empresario australiano James Stunt.

En el momento de la fiesta se filtró que Ecclestone había aflojado millón y medio de euros para hacer feliz a su hija, pero la verdad no ha tardado en hacerse pública. Y es que la celebración de un juicio en Alemania contra el banquero Gerhard Gribkowsky, relacionado con el banco BayernLB, ha destapado la realidad de la boda y de otras muchas operaciones que Ecclestone tenía con el imputado banquero.

El dueño de la Fórmula 1 declaró este jueves ante un tribunal alemán y reconoció haber realizado diferentes pagos al citado Gribkowsky para mantener alejadas a las autoridades fiscales. Esos pagos tenían el fin de tapar diferentes actividades de la fundación Bambino Holding, propiedad de su mujer.

Uno de los puntos investigados fue el pago de una partida de 15 millones de euros. Ecclestone confesó que el fin fue el pago de la celebración de la boda de su hija Petra, que tuvo lugar en agosto pasado en el castillo de Odescalchi, en la localidad de Bracciano, cerca de Roma y en dónde años atrás se casó Tom Cruise y Katie Holmes.

Vino de 2.500 euros, Eric Clapton, The Black Eyes Pees...

¿En qué se pudo gastar 15 millones de euros? Lo primero y más caro en el alquiler del castillo, en las actuaciones que tuvieron lugar en la fiesta como las de Eric Clapton o del grupo The Black Eyed Pees, que días antes actuó en el estadio Vicente Calderón de Madrid ante 60.000 personas. Esta vez lo hicieron antes los 400 invitados. La lista de gastos sigue con el vestido de la novia valorado en 80.000 euros o las 4.000 botellas de Chateau Petrus. Vino que en la calle vale 2.500 euros la unidad. "A mí me parecía absurdo gastarse tanto dinero en bebidas", confesó Ecclestone ante el juez alemán.

El caso busca las comisiones (se habla de 50 millones de euros) que recibió el banquero por la firma de la venta del 50% de los derechos audiovisuales de la Fórmula 1, contrato que ascendía a 840 millones de euros y de los que solo aparecen en las cuentas del BayerLB 770 millones de euros.

El juez no tiene nada claro el origen y el destino de ese dinero. En Alemania apuntan a que detrás de ese gasto está gran parte del dinero de las comisiones que uno y otro han manejado a su antojo en los últimos años.