En Mercedes, reunión de pastores: ¿oveja muerta?
Wolff podría haber buscado la mayor amenaza que tiene sobre la mesa para continuar permitiendo libertad de movimientos entre sus pilotos: el castigo de irse a casa un tiempo
Reunión de pastores, oveja muerta, reza el refrán. EnBrackley, sede de Mercedes, Wolff y Lauda se reunen hoy a cara de perro con Rosberg y Hamilton. Llamada a capítulo con visos de últimatum, y pronto sabremos cuál será ladecisiónrespecto a sus pilotos y la futura estrategia del equipo, que tanto pueden influir en el resultado del actual campeonato. Hasta aquí hemos llegado: los sesenta puntos perdidos por los incidentes entre Rosberg y Hamilton han costado una montaña de dinero a Mercedes, al margen de debilitar -aunque relativamente todavía- sus opciones a la lucha por el título.
¿Habrá o no órdenes de equipo a partir de ahora? ¿Se bajará del monoplaza -y quién sabe del equipo a quien vuelva a provocar otro incidente?. Hamilton cuenta con un solo motor frente a los cuatro de Rosberg para el resto de la temporada, mientras el alemán confirmó en Red Bull Ring que está dispuesto a llevar al extremo su defensa en la pista frente al británico. Nadie quiere debilitar su posición, y los enfrentamientos en la pista parecen inevitables ¿Habrá finalmente 'oveja muerta?
Toto Wolff podría ser muy directo conNico Rosberg y Lewis Hamilton: el próximo que provoque una colisión se bajará del monoplaza enalguna carrera. Según filtró este martes la prensa inglesa, Mercedes está sopesando castigar así a los pilotos en vezde aplicar las “impopulares órdenes de equipo”. Quien mida mal podría quedarse sin título (están separados por 11 puntos). ¿LlegaráMercedes a llegar hasta este punto?
[Mercedes da un tirón de orejas a Hamilton y Rosberg]
“Fue estúpido. Parecemos un manojo de idiotas”, señaló en caliente Wolff, “harto de tener que analizar” el golpe y sentenciadoque, “simplemente, no quiero que ocurra más”. Dos incidentes similares en cinco carreras han forzadoun gabinete de crisis para sofocar esta situación, aunqueMercedes que puede permitirse el lujo de afrontar el dilema de diferentes maneras ante su holgura en el campeonato. ¿Cabría imaginaren Hungría a Pascal Wehrlein con unMercedes y a Nico o Lewis viendo por televisión la carrera? Decisiones que parecen descabelladas y peregrinas pero posibles si se producen imágenes similares a las de Montmeló y Red Bull Ring.De momento, el pasado fin de semanaWehrlein confirmó que puedeestar preparado para dar un salto como piloto titular.
Accident or aggression? HAM/ROS's #AustrianGP 🇦🇹 clash explained >> https://t.co/EWfi4AWi4u #F1 pic.twitter.com/EtiZgltJHj
— Formula 1 (@F1) 5 de julio de 2016
Con un título en juego ya 300 km/h parece que de poco sirve esacharlala que mantuvieron ambos pilotos en su piscina de Mónaco, ahora tan polémica por las declaraciones de Niki Lauda desmentidas ayer. “Estaba nadando en mi piscina y creo que (Rosberg) me vio desde su apartamento y bajó. Se sentó en el trampolín y cuando terminé de hacer algunos largos hablamos durante 20 minutos o media hora de forma relajada. Tendremos momentos buenos y malos y habrá momentos donde nos odiemos uno al otro y otros en los que nos queramos, pero al final, cuando nos retiremos y tengamos niños y esas cosas, siempre habrá respeto entre nosotros”.
“Me dijo que iba a romperlo todo”
“Lewis mintió, así de simple. Lo dijo porque quería suavizar las cosas y tener paz el pasado fin de semana. Hizo lo que pudo, pero la pelea se vuelve más caliente cuando Nico está delante”.Lauda dijo que el británico 'mentía' en un afán de relajar la situación entre ambos. Ya vimos el resultado en la pista. Lauda también desmitió sus declaraciones en este sentido...
[Verstappen contra Hamilton: sin complejos fuera de la pista]
Never let the odds keep you from doing what you know in your heart you were meant to do. Rise Up. #TeamLH pic.twitter.com/Qpkqzi1phB
— Lewis Hamilton (@LewisHamilton) 4 de julio de 2016
Tampoco Hamilton habría destrozadosu habitación privada en el circuito de Bakú como si de una estrella del rock se tratara.“Lewis lo hizo porque había chocado (en clasificación). Tendrá que pagar los desperfectos, eso te lo puedo asegurar. Me dijo que no entrase porque iba a romperlo todo y así fue”, indicó Lauda al mismo canal austriaco. Más leña a la hoguera
La culpa es de Rosberg: ahora presiona más
Realidad o manipulación periodística,Toto Wolff y Mercedes quierenresponsabilizara los pilotosde lo que pase en el futuro. Nada sería tan impopular como unas hipotéticas órdenes de equipo en Silverstone, en casa de Hamilton y ante su público. Pero ¿Cómo podrán manejar ambos pilotos sus opciones al título en situaciones semejantes a las del Red Bull Ring en duelo similares por la victoria? Hamilton ya ha mostrado esta semana su radical oposición a las órdenes, y solo cabe pensar en cuál sería su actitud si se encontrara luchando mano a mano con Rosberg por la victoria ante los aficionados ingleses.
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— Nico Rosberg (@nico_rosberg) 5 de julio de 2016
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Estos nervios a flor de piel están apareciendo durante la temporada en la que más está apretando Nico a Lewis. Este ganó diez carreras en su primer año juntos, ydemostró que encircunstancias era superior a Rosberg.En 2015, Hamilton fue superior desde el primer momento y sólo cuando logró el tercer Rosberg logró tres victorias consecutivas, que le impulsaron para ganar las cuatro primeras de 2016. Afortunadamente para la Fórmula 1, Rosberg se está subiendo a las barbas de un tricampeón y ya leyenda del Gran Circo. En 2016, Mercedes ha decidido evitar con buen criterio las órdenes de equipo hasta el momento, lo que ha permitido intentos y polémicos momentos como los que hemos vivido. Ojalá no se cambie de opinión.
Reunión de pastores, oveja muerta, reza el refrán. EnBrackley, sede de Mercedes, Wolff y Lauda se reunen hoy a cara de perro con Rosberg y Hamilton. Llamada a capítulo con visos de últimatum, y pronto sabremos cuál será ladecisiónrespecto a sus pilotos y la futura estrategia del equipo, que tanto pueden influir en el resultado del actual campeonato. Hasta aquí hemos llegado: los sesenta puntos perdidos por los incidentes entre Rosberg y Hamilton han costado una montaña de dinero a Mercedes, al margen de debilitar -aunque relativamente todavía- sus opciones a la lucha por el título.
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