Una rejilla revienta el neumático de Grosjean a 300 km/h. Alonso, quinto

El primer día del Gran Premio de Malasia de Fórmula 1 estuvo marcado por el fuerte accidente de Grosjean en la segunda sesión de entrenamientos libres después de una sesión matinal acortada por la lluvia. Después de pasar Raikkonen por encima del arcén de la curva 13, uno de los desagües quedó suelto y cuando llegó el piloto de Haas, que venía por detrás, sufrió un pinchazo súbito que le mandó directo hacia el muro. Aunque inicialmente parecía ser un caso aislado, Charlie Whiting confirmó a El Confidencial que todos los desagües del circuito deberán ser cambiados de cara a mañana para evitar que algo así pueda ocurrir otra vez. La preocupación llegaba sobre todo en caso de que algo así pudiera suceder en carrera, en medio del grupo, causando un grave accidente múltiple, o si una rejilla suelta golpeaba el chasis por debajo.

El incidente de Grosjean esta tarde en Malasia recuerda a lo ocurrido con Barrichello y la tapa de alcantarilla en el Gran Premio de Mónaco de 2010. Entonces, el brasileño tuvo un fuerte golpe y ya entonces se habló de la presencia de elementos rígidos sueltos en el asfalto, puesto que un golpe por debajo del chasis podría tener consecuencias mucho más serias para el piloto. En ese sentido y visto lo visto, podría considerarse que hoy se ha esquivó una tragedia en Sepang de la misma forma que hace siete años en Mónaco. A pesar del forzado trabajo del circuito de Sepang para evitar que la situación se repita mañana, Whiting apunta a que no debería haber ningún problema para el sábado ya que hay tiempo de sobras para solucionar el problema, aunque reconoce que será algo tedioso de completar.

Más allá del accidente, el día tuvo también una situación unusual con la lluvia que cayó durante la mañana y que afectó a la disputa de la primera sesión de entrenamientos libres. De hecho, esta quedó reducida en media hora aunque afortunadamente para los pilotos y equipos, la segunda sesión se disputó con normalidad hasta le accidente de Grosjean, que hizo que la actividad del día acabara 22 minutos antes de lo previsto. Se sacan así las primeras conclusiones del fin de semana: Ferrari parece estar por delante y buscarán a una Mercedes que vivió uno de sus peores viernes de la era híbrida. Red Bull volvió a mostrarse particularmente competitiva mientras Fernando Alonso se lució bajo la lluvia y rindió bien en seco.

Lal luvia del jueves tuvo su réplica la mañana del viernes y después de la caída durante toda la noche, la primera sesión de entrenamientos libres del GP de Malasia se vio afectada por más precipitaciones, ya que impidió el comienzo de la primera sesión a la hora prevista. Hubo que esperar media hora a que la pista estuviera menos encharcada, para que la acción diera comienzo. Alonso, con el Halo en su monoplaza, fue uno de los primeros en salir. También partieron pronto Leclerc y Giovinazzi, los dos pupilos de la Ferrari Driver Academy que participaron solo en los libres 1. No tardaron en salir Gasly, Gelael y Sirotkin, las otras novedades con respecto a lo habitual aunque solo el francés disputará la carrera, claro.

Las primeras vueltas rápidas llegaron a falta de poco más de media hora para el final, con la mayoría de pilotos evitando rodar demasiado con el objetivo de guardar neumáticos de lluvia e intermedios —usados en la segunda parte de los Libres 1— para lo que queda de fin de semana. Las predicciones hablan de lluvia todos los días y puede ser importante tener más gomas nuevas el sábado y el domingo. El mejor tiempo de la mañana fue para Verstappen, con Ricciardo segundo y Alonso tercero, en unas condiciones poco representativas de lo que es la pista de Sepang, pero importantes teniendo en cuenta lo que puede pasar mañana y domingo. Aún así, los espaciados registros entre las posiciones delanteras dejaban claro que no había información sólida para analizar.

Ferrari manda y Grosjean asusta con un fuerte accidente

Donde sí se pudo sacar alguna conclusión más fue en los libres 2, que mostraron a una inusualmente débil Mercedes. El propio Toto Wolff reconocía que el viernes se sentía como el peor que han vivido desde 2014, aunque hay quien cree que aún están guardando algo para mañana. Pero tanto Hamilton como Bottas sufrieron sendas salidas de pista que deberían ser indicativas de sus problemas. También estuvieron a buen nivel los Red Bull que, sin llegar a ser tan veloces como los Ferrari, marcaron registros interesantes tanto en velocidad pura como en tandas largas. Por su parte, un sorprendente Alonso acabó la sesión con el quinto mejor tiempo, algo impensable para un McLaren que incluso superó a ambos Mercedes.

La sesión estuvo marcada por el accidente sufrido por el mencionado accidente de Grosjean a falta de poco más de veinte minutos para el final. El resultado de su pinchazo al pisar la rejilla suelta fue un golpe fortísimo golpe contra las barreras y una bandera roja que se alargó hasta el final de sesión, con los trabajadores del circuito centrados en solventar la situación tanto para mañana. Las conclusiones del viernes son bastante limitadas pero sí puede afirmarse que Ferrari vuelve a ser competitiva y que McLaren podría darle a Alonso un coche para puntuar. En cuanto a Mercedes, habrá que esperar a mañana para confirmar su nivel. Pero por ahora, parece que Malasia quiere despedirse de la Fórmula 1 a lo grande.