"Soy más tímido de lo que piensan". Alonso entra en Q2 y sigue con las despedidas

“Fernando, somos P14. ¡Eso ha sido mágico, amigo mío!”. El ingeniero de Fernando Alonso lo felicitó por la radio tras haber logrado entrar en la Q2 de los entrenamientos del Gran Premio de Abu Dabi. El piloto reía dentro del caso. "¡Sí, disfrutando la vuelta, aunque aún no somos suficientemente rápidos", contestó al conocer que había pasado a la siguiente tanda. "No lo teníamos en los planes", explicaría después el piloto español. Al final saldrá 15º en su última carrera de Fórmula 1.

“Es el momento adecuado”, volvió a repetir Alonso tras haber completado la que será su última sesión clasificatoria. Celebrar el pase a la Q2 como un éxito se ha convertido en una triste celebración para quien aspira a la victoria tan pronto sale de la Fórmula 1. Y si el español siempre ha puesto el énfasis en los enfrentamientos directos con sus compañeros…"Seguramente redondear un año perfecto en cuanto a cronos, 21-0 con el mismo coche, no lo ha hecho nadie. Contentos al menos con este sabor de boca".

Con el viento cambiante

“Contento de haber conducido al límite otra vez”, resumió un satisfecho Alonso. "Sabemos que pasar de la Q1 era muy difícil, así que optamos por poner tres juegos de neumáticos para, por lo menos, intentarlo. Y salió bien". Durante gran parte del primer bloque dio la sensación de que el McLaren iba a quedar una vez más apeado de la sesión en la primera tanda, pero una sustancial mejora en el último giro dio la sorpresa. Vandoorme terminó a casi siete décimas de Alonso.

El piloto de McLaren destacó la capacidad de adaptación necesaria ante las circunstancias cambiantes en las que tenía lugar la tanda, especialmente con el viento, y cómo exprimió al máximo esa última vuelta en los compases finales de la Q1. "Teníamos el viento totalmente girado respecto a todo el fin de semana, estaba ahora en contra y había que adaptarse un poco a las condiciones. De la primera vuelta a la segunda bajamos solo un segundo con este nuevo viento. Se trataba de hacerlo lo más rápido posible porque solo había tres intentos… Era fácil subirse al piano de la penúltima curva o bloquear algún neumático en las largas frenadas que hay, así que intentando controlar todo".

TE PUEDE INTERESAR

El "Hasta luego" de Alonso también pasa por subirse al McLaren de Sainz en 2019

Javier Rubio

Antes de salir a la sesión clasificatoria, el rey emérito Juan Carlos I se acercó a desearle suerte en compañía de José Luis, el padre del piloto. "Me llamó mi padre, que había hecho una foto antes con él rememorando…Tenemos una foto en el box de hace 18 años con Fabri (su fisioterapeuta en la F1) e intentamos hacer la misma. Le pregunté qué quería, la foto estába hecha… Y veo la mano del rey. Siempre es un placer tenerle en el paddock”. El rey emérito fue saludado también por otras personalidades de la Fórmula 1, como Mansour Ojjeh, uno de los accionistas de McLaren, y Flavio Briatore, también presente en la última carrera de Alonso.

Para Alonso, puntuar en su última carrera es el gran objetivo. "Pero tenemos cinco puestos por delante", avisó. Por ello, para la estrategia insistió en que "a veces hay que ser conservador, las cosas ocurren delante, no hace falta atacar”. Con el nivel del MCL33, el piloto anticipó que dependerá de terceros para lograrlo. "Salimos 15º, y para entrar en los puntos necesitaremos ayuda de la gente que está delante; por prestaciones no somos suficientemente rápidos. Pero aquí siempre suele pasar algo en las primeras curvas, en las primeras vueltas, esperemos poder aprovechar los incidentes”.

"Me da un poco de vergüenza"

"Fuera del coche están ocurriendo muchas cosas este fin de semana, muchas emociones y cosas que te tocan por aquí y por allá", dijo Alonso, que contó cómo en el pesaje recibió también el aplauso de todos los miembros de la FIA. "Mañana, cuando me poga el casco y me meta en el monoplaza, será una carrera más, pero también la última, así que intentaré disfrutar y hacerlo lo mejor posible".

Tras la sesión de entrenamientos, Alonso fue el protagonista de una gran barbacoa de despedida, y volvió a dejar patente esa faceta de su personalidad no siempre entendida. “Intentaré pasar de puntillas, todos estos homenajes me dan un poco de vergüenza, soy más tímido de lo que ellos piensan, así que quiero que pase rápido. Querría ser invisible hasta el lunes, pero me tocará estar aquí y hablar un poquito”. Queda ya solo hablar en la pista por última vez en la Fórmula 1.