Tras Valentino Rossi... ¿ha llegado también 'la hora del barranco’ para Kimi Raikkonen?

Por primera vez en su carrera, Kimi Raikkonen parece estar acusando signo de la edad en su rendimiento. ¿Mala racha o principio del fin de su carrera en Fórmula 1? Con el finlandés siempre ha sido fácil hacer bromas gracias a su singular personalidad y su historial de ‘incorrecciones políticas’. Son muchos los que le dan por acabado desde hace años, pero la realidad es que incluso una versión supuestamente decadente del finlandés siempre ha sido suficiente para ser capaz de lograr ‘pole positions’ en su último año en Ferrari o dominar a placer en Sauber a Antonio Giovinazzi, de lo mejorcito surgido en la potente cantera transalpina de pilotos.

Y sí, Kimi nunca ha sido el piloto más profesional, ni el de mejor forma física, ni el más sensible en la puesta a punto de un coche. Pero es rápido. Muy rápido. El día que está inspirado es tan veloz como cualquier piloto de la parrilla. Sin embargo, desde que lograra inesperadamente el título en 2007 ha dado frecuentemente la impresión de que sólo saca a pasear su inmenso talento las veces necesarias que justifiquen su elevado sueldo.

De ‘prejubilación’ nada

Cuando el piloto finlandés salió de Ferrari muchos pensaban que su llegada a Sauber sería un mero trámite de cara a su jubilación, cuando una de las exigencias en su contrato establecía hacer sólo las actividades de relaciones públicas que a él le apetecieran. Aparentemente, un plan de prejubilación dorado, vamos. Sin embargo, la realidad es que Kimi ha rendido estas dos temporadas pasadas a muy buen nivel y Giovinazzi, hasta este año, ni le ha olido. Cabe preguntarse si ahora que el italiano empieza de forma recurrente a batir al finlandés es fruto de la experiencia, o estamos ante la confirmación del declive del segundo.

En Moto GP, el ‘derrumbe’ de Valentino Rossi esta temporada ha sido estrepitoso. En cierto modo, la caída de rendimiento de un piloto como consecuencia del paso de los años se puede asimilar al fenómico de la vida útil de los neumáticos en una carrera, cuado van perdiendo progresivamente su eficacia hasta que, de repente, se produce el temido ‘cliff’ (barranco). A partir de ese momento, los escalones de la pérdida de competitividad ya no se bajan de uno en uno sino de cinco en cinco. Justo lo que le ha pasado al campeón motociclista italiano.

Raikkonen cumplirá 42 años este próximo octubre y asimismo dos décadas de competición al máximo nivel. Su bajada de rendimiento es mucho menos llamativa que la de Valentino Rossi, pero el finlandés ha podido estar por delante de Antonio Giovinazzi este año ni en entrenamientos ni en carrera salvo flashes de brillantez esporádicos. Si la comparación con el compañero de equipo es el primer termómetro del rendimiento de un piloto, de aquí las dudas respecto al nivel actual del finlandés.

El difícil momento de decir basta

Es ley de vida que, tarde o temprano, los años pasem factura y llegue inevitable el momento de decir basta. Los avances en seguridad y preparación física facilitan que los pilotos lleguen a la cuarentena mucho más ‘jóvenes’ que en el pasado. No hay que sorprenderse del nivel de los Hamilton, Raikkonen o Alonso en Fórmula 1 cuando vemos lo que Federer, Nadal y Djokovic hacen en el tenis. Sin embargo, antes o después llegará ese momento cuando el atleta siente que ya no es el mismo, y tiene que afrontar el difícil momento de decir basta.

Sorprenden en este sentido las declaraciones de Fernando Alonso hace unos días en una entrevista en el Diario AS, donde reconocía su intención de permanecer en Fórmula 1 hasta 2024. El asturiano es dos años más joven que Raikkonen y físicamente se ha cuidado un poco mejor que el finlandés. Alonso también se toma su trabajo con mayor intensidad que el finlandés, lo que contribuye a prolongar un poco más su carrera deportiva. Pero en 2024 el español tendrá casi 44 años y parece difícil que para entonces no haya comenzado ya su particular ‘barranco’. Además, si finalmente Kimi Raikkonen cuelga el casco a finales de esta temporada la vieja guardia (los Hamilton, Vettel y el propio Alonso) se enfrenta a una generación extremamente talentosa donde no sólo reina Max Verstappen sino que también los Russell, Norris, Ocon, Sainz, Leclerc, etc.

Otros ‘barrancos’ ilustres

Uno de los grandes de la historia, Graham Hill, estiró su carrera deportiva mucho más allá de lo recomendable, pues le sobraron prácticamente sus cuatro o cinco últimas temporadas. Sólo cuando sufrió la humillación de no clasificarse para la carrera de su país con 44 años en Silverstone entendió que había llegado la hora de dejarlo. Niki Lauda se retiró una primera vez por saturación mental (en cierto modo similar a lo ocurrido a Alonso), pero la definitiva llegó tras lograr su última victoria en el GP de Holanda de 1985. El austríaco comprendi que su experiencia ya no compensaba su creciente déficit de velocidad respecto a Alain Prost, ni el francés tampoco tenía ya flaquezas en sus planteamientos en carrera. Por ponerlo en perspectiva, Lauda tomó esa decisión rondando la cuarentena, pero sin olvidar que arrastraba unas ‘heridas de guerra’ muy superiores a las de Raikkonen o el propio Alonso.

Otros ejemplos de ilustres campeones mundiales sobrepasada la cuarentena son los de Alain Prost, -inmediatamente después de su cuarto título, o la de Nigel Mansell, quien se resistió a admitir que su corpulencia y ‘vieja escuela’ ya no podía competir con los atletas de laboratorio tipo Michael Schumacher. En el caso de Raikkonen, será interesante observar su rendimiento en esta segunda fase de la temporada para comprobar si puede revertir su tendencia declinante y mostrarse competitivo para seguir incluso una temporada más en Fórmula 1. O, por el contrario, su ‘barranco’ se acentúa y asistiremos a las últimas actuaciones de uno de los más singulares pilotos de la Fórmula 1.