¿Un lastre? Lance Stroll apunta a ser una ayuda para Fernando Alonso en Aston Martin

El mejor fin de semana de la temporada de Fernando Alonso, donde casi logró la pole position y la victoria, contrastó de forma estrepitosa con el de su compañero de equipo Lance Stroll, que no pasó el primer corte en la clasificación y acabó fuera de los puntos tras una buena colección de errores. En Mónaco, una sucesión de calamidades le puede pasar a cualquiera y ahí están los Grandes Premios de Checo Pérez y Carlos Sainz para atestiguarlo. El problema, que ocurrió justo después de una carrera de similar nefasto resultado como fue la de Miami. Es inevitable que muchos se pregunten si es un capricho de Lawrence Stroll mantener a su hijo en la escudería. Y, sobre todo, si no le va a salir muy caro tanto a él como a Fernando Alonso.

Lance Stroll comenzó la temporada mucho más cerca de Fernando Alonso en rendimiento de carrera e incluso de velocidad en clasificación. Y ha sorprendido lo ocurrido, porque el canadiense llegó a las primeras carreras de la temporada convaleciente aún de una lesión en su muñeca. Además, se había perdido los entrenamientos de pretemporada como consecuencia de la misma. Hay una cuestión dolorosa: Stroll es actualmente octavo en el campeonato con 27 puntos por los 93 de Alonso, que amenaza ya incluso a Sergio Pérez por el segundo puesto en la clasificación.

Un buen piloto

Lance Stroll es un gran piloto. Sólo así se puede estar durante dos temporadas casi a la par de todo un cuatro veces campeón del mundo como Sebastian Vettel. Para quien no le sirva el dato y argumente que el alemán estaba de capa caída, quizá se convenza más cuando vea que, con mucha frecuencia, Stroll rueda apenas una o dos décimas mas lento que un pletórico Fernando Alonso. Con independencia de que el asturiano se pudiera encontrar ahora en un especial estado de gracia, no hay muchas personas capaces de llevar un monoplaza y no quedar en evidencia frente al asturiano.

Vean, por ejemplo, lo sucedido con Dani Pedrosa en MotoGP. Al ser batido una y otra vez por Marc Marquéz, surgieron voces que sugirieron que quizá no era tan bueno como se creía. Esas voces, por cierto, calaron en la jefatura de Honda HRC y motivaron la búsqueda de un sustituto que compitiera con Márquez. Craso error. El enorme mérito de Pedrosa era su capacidad de estar siempre muy cerca del catalán. Y en ocasiones incluso superarlo, algo que sus sucesores ni lo han olido. Cuando pones a un piloto a medirse con un extraterrestre, es conveniente siempre añadir algo de perspectiva en el juicio. No es casual, por tanto, que Esteban Ocon se sacara de la manga su tiempazo de clasificación en Mónaco. Es el único piloto junto a Lewis Hamilton que ha aguantado el pulso de forma regular a Fernando Alonso. Por tanto, si sustituyeran a Stroll por otro en Aston Martin es posible que lo hiciera peor que él.

No es descartable que el precipitado regreso de Stroll a la competición después de fracturarse la muñeca entrenando, ahora no le esté pasando factura. Se trata de unos huesos y articulaciones críticas en un piloto de Fórmula 1. Por tanto, esa falta de consistencia de Stroll quizá tenga que ver con una lesión mal curada. El estrés al que se somete a una muñeca en la Fórmula 1 sólo es comparable al propio motociclismo y tenis, e incluso también golf. A una vuelta, el dolor o la sensibilidad no provoca fallos. Pero quién sabe lo que le puede estar afectando a lo largo de hora y media de carrera, en circuitos de absoluta precisión como Miami y Mónaco.

La notable diferencia en resultados entre Fernando Alonso y Lance Stroll está pesando también, sin duda, en la fortaleza de Aston Martin en la clasificación del Mundial de constructores. Esta clasificación siempre es mucho menos mediática que la de pilotos, pero no hay que olvidarse de que es la que sirve de baremo para el reparto del dinero que genera la Fórmula 1 entre los equipos. Acabar por delante o detrás de Mercedes y Ferrari suponen decenas de millones de euros de diferencia. Ahora bien, ¿quién nos dice que Aston Martin en su desconocida faceta de equipo grande aún no tiene capacidad para actuar como tal? Es decir, si ya es difícil para equipos habituados a estar en la pomada mantener la igualdad entre sus dos pilotos, más difícil será aún hacerlo cuando no estás habituado a ello.

Un equipo 'alonsocentrista'

No es cuestión de que le Stroll tenga peor coche que Fernando Alonso. Los tiros quizá vayan más por la personalidad absorbente y dominante del asturiano. Su grado de intensidad y eficacia en sus resultados es inevitable que provoque una cierta desatención al segundo piloto del equipo. Que nadie se equivoque. Por mucho que Lawrence Stroll tenga interés en que su hijo prospere en la Fórmula 1, es un empresario competitivo que ante todo quiere que triunfe su inversión. El asturiano ha catapultado a un gran coche, a un lugar que muy pocos imaginaban. Verse peleando por un Mundial hace que todo gire ahora mismo alrededor de él.

Tener alguien como Stroll hijo en una situación así puede ser más una bendición que un problema. Quizá otro piloto aceptaría de mucho peor grado el rol secundario que es obvio que desempeña el canadiense en estos momentos. A la hora de sacar un coche a calificar, cuando se busca una mejora en la puesta a punto o se necesita modificar algo concreto, los deseos de Fernando son prioritarios e indiscutibles. Y así debe ser, si se quiere aprovechar este círculo virtuoso en el que ha entrado equipo y piloto. Lance es joven y tendrá su momento. Fernando, de hecho, le ha anunciado como el futuro de su equipo. No es mala cosa aprender del maestro y estar en un segundo plano ahora mismo. Pero no todos los pilotos aceptarían esta circunstancia. Y esa armonía es muy positiva para Aston Martin.

Ahora vienen circuitos normales. Lance Stroll tendrá que demostrar no sólo que lo vivido estas últimas carreras es una mala racha y que está en condiciones de dar muchos puntos a su equipo, sino incluso de ayudar a su compañero de equipo en momentos puntuales a nivel de estrategia. El compañero de equipo de Fernando Alonso ha sido campeón en categorías inferiores de la Fórmula 1 y ha brillado al lado de otros pilotos de mucho nivel como Felipe Massa, Checo Pérez o Sebastian Vettel. Quizá ahora está ante el examen más difícil de su carrera deportiva. Ni ser hijo del dueño del equipo, ni su trayectoria pasada, le servirá para mantener su volante si Aston Martin se consolida en la cima. Pero calidad tiene para revertir la situación.