Alpine le recuerda a Esteban Ocon (por las malas) quién manda en un equipo de carreras

Un equipo de Fórmula 1 tiene en su caja de herramientas suficientes recursos para torpedear o poner palos en las ruedas a uno de sus pilotos. Son varios los ejemplos históricos así lo avalan. Esteban Ocon ha vivido la experiencia en sus propias carnes en el pasado Gran Premio de Canadá.

¿Por qué dañar los intereses propios? Cabría preguntarse. Normalmente, son decisiones en beneficio del equipo como, por ejemplo, subordinar un piloto sobre otro, bien a través de las estrategias en pista o de un equipamiento sutilmente diferente.

La actitud de Alpine hacia Ocon insinúa una caída en desgracia apoyada desde las alturas del Grupo Renault. Antes de llegar a Montreal, se anunciaba su marcha del equipo a final de temporada. Durante el gran premio, se le recordó cuál es ahora su sitio en el equipo francés. Fue la historia de una pequeña humillación.

Abogados y piloto reserva

Cómo vería el panorama el propio Ocon tras el incidente de Mónaco que, primero, pidió disculpas en Twitter y luego publicó una carta justificadora en las redes sociales. Pero antes de llegar a Montreal se anunciaba su marcha a finales de 2024. Quizás internamente asumida desde hace tiempo, aunque anunciada sin conocerse su futuro destino, lo que no dejaba en buena posición al francés a quien, en todo caso, parece que no le falten candidatos.

Ocon explicaba en Montreal que un grupo como Renault no tomaba decisiones de tal calibre por una actuación concreta. Aunque resultaba difícilmente entendible que el francés ignorara de forma tan flagrante la estrategia claramente definida de Alpine para la carrera de Mónaco, crucial para lograr puntos al entrar Gasly en el Q3. ¿Estaba ya decidido de antemano su marcha, pero el incidente de Mónaco sirvió para anunciarlo públicamente?

Tras conocerse su adiós, trascendió que los asesores legales del equipo desaconsejaron la sustitución del piloto francés en el Gran Premio de Canadá, como parecía haberse planteado la cúpula del equipo. Ocón habría amenazado presentarse en el circuito canadiense con sus abogados, escenario legal y público, al parecer nada aconsejable para la marca francesa. Alpine echó el freno de mano.

No obstante, el equipo decidió sustituir a Ocon por el piloto reserva, Jack Doohan, para la primera sesión de libres en Montreal. El propio Ocon desmintió las suposiciones. "He visto esa interpretación muchas veces en los medios, y no es el caso en absoluto. Como equipo tenemos que ofrecer dos libres para los novatos".

Ocon justificaba su sustitución por la pista reasfaltada y a limpiar, y porque tenía pendiente la sanción de cinco puestos de parrilla de Mónaco. "Desde el punto de vista del equipo, creemos que tendremos un coche más competitivo más adelante este año. Para nosotros, es mejor poner a Doohan aquí que en México o Abu Dhabi, como solemos hacer". Sí, pero la sustitución llegaba casualmente después de Mónaco. A la postre, si el equipo deseaba lanzar un mensaje a Ocon lo hizo dando donde más le puede doler a un piloto.

"Por el bien del equipo"

En la recta final de la prueba, el muro de boxes pidió a Ocon que dejara pasar a Gasly para que este atacara a Daniel Ricciardo, que rodaba en octava posición. "¡Olvídalo!", contestó el francés a su ingeniero. "Es una demanda", respondió sutilmente el técnico, por evitar la palabra 'orden'. Ocon se hizo de rogar, por lo que el ingeniero insistió. No estaba el horno para bollos y finalmente el piloto accedió, preguntando si recuperaría la posición de no lograr Gasly su objetivo.

Gasly no adelantó a Ricciardo para descubrir que la orden solo pretendía desplazarle de la novena posición. Como los pilotos de Alpine iban a sumar idénticos puntos al margen de sus posiciones, el francés comprendió que había sido humillado. Su ingeniero intentó apaciguarle ante sus protestas. "He hecho lo que tenía que hacer, que es lo más importante, pero vosotros no hicisteis lo que teníais que hacer. Eso es todo", contestaba por la radio el piloto francés.

"Recibí instrucciones de dejar pasar a Pierre cuando faltaban dos vueltas para alcanzar a Daniel, que estaba dos segundos y medio por delante, por lo que la llamada no tenía sentido", explicaría después un decepcionado Ocon. "Pero hice mi parte del trabajo, que es siempre ser un jugador de equipo. Siempre he respetado las instrucciones que me han dado, siempre ha sido así, y nunca he hecho nada diferente en mi carrera" apuntaba. "He hecho mi trabajo, pero el equipo no. Es muy triste".

El equipo tenía sus razones, según su responsable, Bruno Famin: "Lo hicimos a propósito por el bien del equipo. Esteban estaba luchando con la gestión de energía, consumiendo bastante, y luego teníamos dos Haas detrás. Esteban estaba frenando a todo el mundo, era bastante obvio en la televisión, y el riesgo era que los dos Haas nos pasaran. Por eso que dimos esa instrucción".

Según Famin, esos problemas de motor no le iban a permitir adelantar a Ricciardo. Faltaban solo dos vueltas para terminar cuando recibió la instrucción. Sin embargo, cuando Gasly ni siquiera pudo intentar adelantar al australiano, el equipo tampoco devolvió a Ocon la posición cedida a su compañero.

Adiós de la escudería, sustitución en los libres, órdenes en carrera... De una forma u otra, quien manda en un equipo siempre tiene medios para demostrarlo.