El ex madridista Robben apea al Manchester de la Liga de Campeones

El Manchester United apeló al espíritu de las grandes noches de Old Trafford para remontar e intentar sentenciar la eliminatoria de cuartos de la Liga de Campeones frente al Bayern. Alex Ferguson cumplió su amenaza y puso a Wayne Rooney, lesionado en la ida, en el once inicial, algo que imprimió seguridad a los ‘red devils’ que sintieron su ‘efecto’ desde el primer minuto.

La misión de los ingleses no era nada sencilla: levantar el 2-1 del Allianz Arena. El equipo se puso el mono de trabajo desde el pitido inicial y decidió cortar por lo sano. A los tres minutos ya había hecho el primer gol, obra de Gibson que enganchó un derechazo desde la frontal, y en el que Butt sólo pudo hacer la estatua. Cuatro minutos después, Nani firmó el mejor gol de la jornada con un taconazo soberbio a centro de Valencia que acabó entrando a cámara lenta por la portería teutona.

Wayne Rooney quiso sumarse a la fiesta y lo intentó con un testarazo que se acabó yendo muy cerca del larguero de la portería de Butt. Poco después el ‘10’ inglés empezó a cojear y parecía que iba a recaer de la lesión de ligamentos de su tobillo derecho, aunque todo quedó en un susto. El máximo goleador europeo con 34 goles en lo que va de temporada se mantuvo en el terreno de juego hasta el comienzo de la segunda mitad.

El partido enloqueció al filo del descanso

A cinco minutos del descanso, el partido se volvió loco. El Bayern tuvo su primera ocasión clara de gol cuando Olic se plantó cara a cara con Van der Sar, pero el croata no controló bien. El mazazo para los teutones llegó en la siguiente jugada, cuando Rafael desde la banda derecha le hizo un sombrero a Demichelis y cedió el balón en el pase de la muerte. Rooney no llegó a rematar y por detrás apareció Nani para fusilar a Butt. El trabajo estaba hecho y la eliminatoria en el bolsillo.

Pero todo fue un espejismo, porque dos minutos después el Bayern reaccionó asediando la portería inglesa hasta que Olic consiguió reducir diferencias con un gran toque para cruzar el balón lejos de Van der Sar. Los germanos se metieron de lleno en la eliminatoria ya que un gol les daba la clasificación y quedaban 45 minutos por jugar.

La expulsión de Rafael fue decisiva

Nada más comenzar la segunda mitad, el colegiado expulsó por doble amarilla al zaguero brasileño Rafael, complicando las cosas al equipo de Alex Fergurson. Desde enconbtes el partido fue otro. El equipo de Van Gaal se volvió mucho más ofensivo y mostró su mejor cara. Las semifinales estaban a tan sólo un gol y por eso los teutones acribillaron la portería de Van der Sar desde todos los puntos, pero sus disparos y remates tropezaban una y otra vez con el portero, la defensa, e incluso con el larguero, como un cabezazo de Lahm. El premio llegó a 15 minutos para el final con un golazo de volea del ex madridista Robben que supuso una losa difícil de levantar para los 'red devils'.

Pese a todo, el Manchester se echó hacia arriba arropado por su público buscando el gol que diese la vuelta a la eliminatoria, pero las fuerzas flaquearon. El Bayern vuelve a clasificarse para las semifinales de la Champions, después de que lo hiciera por última vez en la temporada 2000/01. El equipo de Van Gaal se medirá en el último escalón antes de la final del Bernabéu al verdugo del Real Madrid, al Olympique de Lyon.

Ficha técnica

3 - Manchester United: Van der Sar; Rafael, Ferdinand, Vidic, Evra; Gibson (Giggs, m.80), Carrick (Berbatov, m.79), Fletcher; Valencia, Rooney (O'Shea, m.54), Nani.

2 - Bayern de Munich: Butt; Lahm, Van Buyten, Demichelis, Badstuber; Van Bommel, Schweinsteiger, Ribery; Robben (Altintop, m.75), Müller (Mario Gómez, m.45), Olic (Pranjic, m.84.

Goles: 1-0, m.2: Gibson; 2-0, m.6: Nani; 3-0, m.40: Nani; 3-1, m.42: Olic; 3-2, m.73: Robben.

Árbitro: Nicola Rizzoli (ITA). Expulsó a Rafael por dos amarillas y amonestó a Van Bommel y Baudstuber (tarjetas amarillas que acarrean suspensión).

Incidencias: Partido de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones disputado en el estadio de Old Trafford ante unos 75.000 espectadores