Es noticia
Por qué la chilena de Cristiano Ronaldo no fue aplaudida por Florentino Pérez
  1. Deportes
  2. Fútbol
el presidente enfría la mejora de contrato

Por qué la chilena de Cristiano Ronaldo no fue aplaudida por Florentino Pérez

El presidente del Madrid, Florentino Pérez, no saltó de su butaca tras la chilena de Cristiano como sí hizo con el gol de Benzema en Lyon y el de Ramos en Lisboa. Enfría la ansiada renovación de contrato

Foto: Cristiano agradece la ovación del público de Turín tras su chilena. (EFE)
Cristiano agradece la ovación del público de Turín tras su chilena. (EFE)

La chilena de Cristiano Ronaldo provocó que se pusiera en pie la afición de la Juventus para dar una ovación a lo que acababan de presenciar. Un golazo que cerraba el partido y el intento de remontada de los italianos. Les dejaba sin esperanza en la eliminatoria. La reacción de la grada fue espontánea y al unísono, como reconocimiento a la plasticidad de la acrobacia del portugués. Después, solo para los medios oficiales de la UEFA y el canal oficial del club, CR7 mostró su agradecimiento por la respuesta de cariño y admiración de la hinchada juventina con estas palabras: "Doy las gracias a la afición de la Juve porque nunca me había pasado algo así en mi carrera y es un momento increíble". El último Balón de Oro y ganador del premio The Best salía del estadio con la piel de gallina después de casi festejar en soledad su hazaña, porque fue requerido por la organización del partido para que pasara el control antidopaje. La reacción de Florentino Pérez fue diferente.

[¿Chilena de Cristiano o de Almudena Cid?]

En el palco del Juventus Stadium hubo más contención, menos éxtasis, y la postura de Florentino Pérez no fue la misma que mostró en otras ocasiones, que han pasado a la historia por ver al presidente del Real Madrid perder las modélicas formas y estallar de alegría por determinados goles. Florentino no se puso en pie, ni se llevó las manos a la cabeza con la chilena de Cristiano, como sí hizo con un gol de Benzema en un partido de octavos de final en el estadio del Lyon. Fue el 22 de febrero de 2011, con Mourinho de entrenador, y el presidente sorprendió por saltarse el protocolo de serenidad y mesura que se exige en los palcos. Pero esta no fue la única vez que se le ha visto en modo 'hincha'. Su celebración más exaltada se produjo en la final de la Champions contra el Atlético de Madrid, en Lisboa, con el gol de cabeza de Sergio Ramos. Florentino, sentado al lado de Mariano Rajoy, pegó un bote en su butaca, abrió los brazos, se los llevó a la cabeza y se fue corriendo a celebrarlo con José María Aznar, que estaba dos filas más atrás y en otro pasillo del palco. Esta última sí que es la más comprensible, por el significado de aquel cabezazo.

No quiere decir esto que el presidente no se alegrara de la chilena de Cristiano. Ni mucho menos, porque vale unas semifinales, con toda probabilidad, rompe el maleficio de no ganar en Turín y potencia la imagen del club. Florentino, sentado en el palco del Juventus Stadium al lado del vicepresidente, Pedro López Jiménez, se quedó atónito y asombrado con lo que acababan de ver sus ojos. Sorprendido con la ovación que estaba ofreciendo la afición italiana a uno de sus jugadores. Motivo de orgullo que, quizá, merecía exteriorizar con su excitación como sí hizo con Benzema en Lyon y Sergio Ramos en Lisboa.

placeholder El gol de Cristiano Ronaldo, desde la portería. (Reuters)
El gol de Cristiano Ronaldo, desde la portería. (Reuters)

"Si no puedes fichar a Neymar... Cristiano"

El contexto es diferente y está marcado por el debate abierto sobre la necesidad y justicia de mejorar el contrato a Cristiano Ronaldo por la enorme diferencia salarial que existe con respecto a Neymar y Messi. Florentino no está cerrado a esa mejora, pero no la quiere ejecutar a cualquier precio, y para dar el paso se tiene que asegurar de que el portugués no está en su declive, ha tocado el techo y se le ha acabo la cuerda con 33 años. Considera a Cristiano un caso especial y hay voluntad para sentarse a renegociar el contrato. Pero con unos plazos que quiere marcar, sin imposiciones del jugador y presiones mediáticas, y en el momento oportuno, porque los problemas con Hacienda del portugués obligan al club y al futbolista a actuar con cautela y sin anuncios públicos. Lo que parece claro es que la chilena es un empujón más en la mejora contractual para despejar más dudas de un presidente que analiza la ecuación salario, edad, rendimiento y demandas (con encuestas) de los socios.

Que Florentino estuviera más frío de lo habitual en Turín tampoco significa que entre los directivos y la expedición desplazada a Italia no se comentara con pasión la barbaridad de la chilena y la contundente victoria. Uno de los más exaltados en el viaje de vuelta a Madrid fue Bertín Osborne, que definió al portugués como un "animal" y había avisado, el día antes en el entrenamiento que presenció en el estadio, que alucinaba por cómo se ejercitaba Cristiano. Florentino va pulsando la opinión de todos los que le rodean en el 'caso Cristiano'. Desde Zidane, que pide un contrato vitalicio para el luso, los directivos (con preferencia, la del director general ejecutivo, José Ángel Sánchez), exjugadores, socios y peñistas. La prensa, menos, por no decir nada. La conclusión es que si no se puede fichar a Neymar, hay que seguir apostando por Cristiano Ronaldo. El portugués, por cierto, para poner más picante, publica en su Instagram la secuencia de la chilena con el siguiente mensaje para quien lo quiera recoger: "¡El trabajo duro paga!".

La chilena de Cristiano Ronaldo provocó que se pusiera en pie la afición de la Juventus para dar una ovación a lo que acababan de presenciar. Un golazo que cerraba el partido y el intento de remontada de los italianos. Les dejaba sin esperanza en la eliminatoria. La reacción de la grada fue espontánea y al unísono, como reconocimiento a la plasticidad de la acrobacia del portugués. Después, solo para los medios oficiales de la UEFA y el canal oficial del club, CR7 mostró su agradecimiento por la respuesta de cariño y admiración de la hinchada juventina con estas palabras: "Doy las gracias a la afición de la Juve porque nunca me había pasado algo así en mi carrera y es un momento increíble". El último Balón de Oro y ganador del premio The Best salía del estadio con la piel de gallina después de casi festejar en soledad su hazaña, porque fue requerido por la organización del partido para que pasara el control antidopaje. La reacción de Florentino Pérez fue diferente.

Cristiano Ronaldo Florentino Pérez
El redactor recomienda