Haaland, Mbappé, Messi... Los nombres de la campaña del Barça: ¿reclamo o utopía?

El día 24 de enero se conocerá quien es el nuevo presidente del Fútbol Club Barcelona. Al menos, eso esperan la entidad y la Generalitat, que mantendrán una reunión el próximo día 14 para confirmar si es seguro realizar las elecciones convocadas por la Junta Electoral. La actual situación sanitaria que se vive en Cataluña, así como en las ciudades fuera de la comunidad que albergarán sedes para el voto, podría suponer el retraso de la fecha de los comicios. Pero los precandidatos continúan su apretada agenda con el fin de lograr el apoyo necesario para hacerse con las riendas del club.

El objetivo es claro: presentar el próximo 11 de enero las 2.357 firmas necesarias para proclamarse presidenciables de forma oficial al club. Si las pizzas o la imagen de Joan Laporta cerca del Santiago Bernabéu protagonizaron los inicios de la carrera, el plato gordo llegó después. Nombres propios de la actualidad futbolística, encabezados por Leo Messi, copan los titulares de los actos de campaña. Pero, teniendo en cuenta la delicada crisis económica que atraviesa el Barça, ¿es realista situar a fichajes estrella como cabeza de cartel? ¿Veremos a Haaland vestir la camiseta blaugrana?

En la presentación de la campaña de Emili Rousaud, exdirectivo de Josep Maria Bartomeu que llegó a acusar a la dirección del club de “meter la mano en la caja”, Josep Maria Minguella se llevó toda la atención. El mediático agente, famoso por ser el artífice de las contrataciones de Maradona o el propio Messi como blaugranas, será el vicepresidente deportivo si Rousaud es elegido por los socios. En este encuentro con los medios, aseguró que los contactos por Erling Haaland estaban muy avanzados: “Conocemos todas las condiciones y si ganamos, al día siguiente llamo a Mino Raiola y aceptamos las condiciones”. Incluso, se llegó a hablar del futbolista llamado a ser el gran dominador de los años venideros. “Si estamos al frente de esto, Mbappé estará encima de la mesa y ya hemos hecho contactos. Nosotros estaremos allí”, comentó Minguella.

Tanto Haaland como Mbappé figuran en la lista de los 10 jugadores más valiosos del momento según los datos del portal Transfermarkt, superando ambos los 100 millones de euros, 180 en el caso del francés. Estas cifras, tan solo estimaciones de su valor de mercado, son inferiores al precio razonable por los que tanto Borussia de Dortmund como Paris Saint Germain siquiera se sentarían a negociar un posible traspaso. A día de hoy, tan solo se conocen previsiones sobre qué situación financiera se encontrará el próximo presidente del Barcelona cuando se siente en su nuevo despacho, ya que el club no ha hecho públicas las cuentas oficiales de la temporada 2019/20.

Economistas como José María Gay de Liébana han situado la deuda del club en más de 1.000 millones de euros. Además, la masa salarial de la primera plantilla ha ido aumentando los gastos del club temporada a temporada, colocándose como una losa financiera que obligará a un ejercicio de supervivencia a corto plazo. “No hay dinero para fichar a Neymar, a no ser que venga gratis”, reconoció Carles Tusquets, presidente de la Comisión Gestora, en su última aparición pública. Contando con el retraso de los pagos de la nómina de enero a los jugadores, así como los distintos recortes acordados con el vestuario, hablar de fichajes millonarios se convierte en una peligrosa quimera para los candidatos.

El propio Mino Raiola, agente de Haaland, fue preguntado el pasado 31 de diciembre sobre sus conversaciones con Minguella por la cadena alemana Sports1. “¡Fake News!”, respondió el representante de futbolistas. Laporta también salió al paso de sus competidores por la presidencia del Barça, tirando de ironía: “¿Haaland y Mbappé? Por experiencia, hablar de traer ahora un jugador sube su precio y baja el precio del tuyo. Y más a media temporada. Respeto que otros lo hagan, pero yo no lo haré”.

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El que fuera presidente del Fútbol Club Barcelona entre los años 2003 y 2010 sabe de lo que habla. El mismo utilizó una táctica similar como gran reclamo para las elecciones que lo auparían como máximo mandatario de la entidad blaugrana. Laporta escogió a David Beckham como baza electoral, quizás el futbolista que más explotó la figura de megaestrella publicitaria durante y después de su carrera. El acuerdo fue incluso anunciado por la propia página web del Manchester United -durante un solo día- y acabaría por ser decisivo para su victoria.

Aunque, finalmente, el británico acabaría firmando por el Real Madrid -que lo tenía atado desde hace tiempo-, mientras que un brasileño llamado Ronaldinho aterrizaría en el Prat. El resto ya forma parte de la Historia.

Opinión

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El de Haaland y Rousaud no ha sido el único desmentido de la semana en la campaña presidencial culé. Víctor Font, uno de los grandes candidatos a hacerse con el ansiado sillón, presentó el tándem formado por Xavi Hernández y Jordi Cruyff como su mejor baza para convencer a los socios. Ambos tendrían en su mano el futuro deportivo de la entidad. Aunque se confíe en Ronald Koeman, el holandés sería sustituido por el histórico mediocentro español si los resultados no acompañasen. ¿El problema? Que el hijo de Johan Cruyff desmintió su participación en redes sociales: “Me gustaría aclarar que estoy centrado en mi compromiso con el Shenzhen FC y al margen del proceso electoral a la presidencia del Barça”.

Messi, objetivo prioritario mientras las ventas se devalúan

Si en algo coinciden todos los candidatos a la presidencia del Barcelona es en la necesidad de renovar a Leo Messi. El argentino acaba su contrato el próximo junio y ninguno quiere pasar a la historia como el presidente blaugrana que vio marchar al astro de Rosario. El actual capitán comentó recientemente en su entrevista con Jordi Évole su indecisión sobre su futuro, aunque con un halo de despedida en sus palabras.

El sueldo de Messi, aunque acorde a su desempeño de los últimos años sobre el terreno de juego, deja fuera de mercado al Barcelona, sin prácticamente margen de maniobra. “Económicamente hablando habría sido deseable vender a Messi”, fueron las polémicas declaraciones de Tusquets.

Pero no solo el salario de su estrella es el causante de la inmensa masa de gastos que maneja el Barça en la actualidad. En verano habrá que dar salida a jugadores con contratos altos cuyo rendimiento no está justificado, ya sea por lesiones o por falta de fútbol. Samuel Umtiti, renovado al alza en el 2018 por los cantos de sirenas de clubes europeos tras dos años a un altísimo nivel, solo ha disputado 20 minutos de competición en lo que va de temporada.

Coutinho, Griezmann o Dembelé son la otra cara de este entramado: futbolistas fichados por cantidades ingentes de dinero cuya venta será por un previo muy inferior. Además del caso de pesos pesados de la plantilla con veteranía, como Jordi Alba o Gerard Piqué, este último renovado hasta el 2024 en una de las últimas decisiones tomadas por la directiva de Josep Maria Bartomeu.

El presidente elegido el próximo enero decidirá cuál es su estrategia deportiva. Los nombres de posibles fichajes y los elegidos para salir del Barça. Pero, sobre todo, se conocerá el verdadero estado de las cuentas financieras del club.