El pelotazo de Florentino este verano es vender a Varane por 60 millones de euros

El Real Madrid tiene en venta a Raphaël Varane y calcula recaudar entre 50 y 60 millones de euros. Es, sin duda, un buen negocio para los tiempos que corren, en que los ingresos disminuyen por la pandemia y el mercado de fichajes está contenido. A los jugadores hay que venderlos en el momento justo, antes de que se devalúen o lleguen al final de su contrato y se puedan ir libres. Florentino lo tiene claro. Con Raphaël Varane hay que hacer caja, porque es de los pocos que están cotizados en una plantilla que pierde valor. Es un pelotazo sacar ese dineral en una plantilla de estrellas que se hacen viejas. Modric y Kroos, dos de ellas, no dejarán ni un euro cuando acaben sus contratos. Lo mismo sucederá con Marcelo.

Varane todavía tiene un valor alto y como le queda una temporada de contrato es urgente atender a las ofertas que llegan de los equipos de la Premier League, que son, junto al Paris Saint-Germain, los que menos acusan la crisis. El Manchester United es el más interesado por el central francés, lleva tiempo negociando con el jugador y está cerca de llegar a un acuerdo en cuanto al salario y los años. En el Madrid, permiten las conversaciones porque no hay manera de competir con la oferta de los ingleses. El United dobla el sueldo a Varane y en el Real Madrid deciden no entrar en la puja para mejorar el contrato.

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Del Madrid solo se quiere ir Varane, y esta es la razón por la que Florentino no pone obstáculos al jugador, pero aprieta al Manchester United para subir el precio todo lo posible. Llegará un momento en el que tenga que plantarse si no quiere que se estropee la venta. Hacer caja por más de 50 millones de euros ya se considera un éxito dentro del club con un jugador que lleva 10 años y costó 10 millones de euros. La aspiración son los 60 'kilos'.

El francés, cotizado

Varane ha ganado 18 títulos, pero también ha alternado partidos buenos con otros en los que ha cometido fallos importantes. El de peor recuerdo es la eliminación contra el Manchester City en el partido de vuelta de la Champions la pasada temporada.

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Ha llegado el final de un jugador que era mejor con Sergio Ramos y que dejaba dudas cuando no tenía al sevillano a su lado. Aunque un día le preguntaron por esta cuestión y el francés se rebeló. “Yo también hago mejor a Ramos”, llegó a decir para reivindicar su liderazgo y cualidades. Sin Sergio Ramos y Raphaël Varane, se rompe la pareja de centrales que estaba consolidada con Zidane y ganó las últimas cuatro Champions, entre otros títulos.

Supone dar un paso en la planificación que los dirigentes consideran necesario en lo deportivo y lo económico. La reestructuración pensada está siendo más complicada de lo que se podría imaginar y tiene mucho que ver con la depreciación de la plantilla. Ni Marcelo, Odriozola, Isco, ni tampoco Bale tienen ofertas ni ganas de marcharse del Real Madrid. Se agarran al contrato, a que remita la crisis y aspiran a quedar libres. Tampoco hay una disputa por Jovic y Mariano. Todos estos se conforman con la rebaja salarial que les propone el club y prefieren seguir, aunque sean más suplentes que titulares.

Varane ayuda a amortiguar el golpe de la crisis, y en los planes del club no está suplir su baja con otra incorporación. Se descarta la opción de ir al mercado a por un defensa tipo Koundé o Pau Torres. No hay un plan alternativo a la baja del francés y en el Madrid existe la convicción de que Ancelotti sacará rendimiento de David Alaba, Militao y el recién renovado Nacho. Además, están Jesús Vallejo y los canteros Chust y Gila. Con esto puede ser suficiente para afrontar la temporada. Es la visión más optimista del club, que no coincide con otras que ven un Real Madrid más débil atrás por dejar salir en el mismo verano a Sergio Ramos y Raphaël Varane.

Ancelotti acepta la venta

Carlo Ancelotti no puede hacer nada para frenar la salida del francés y se hace cargo de lo importante que es el ingreso de entre 50 y 60 millones de euros para el club. El técnico italiano trabajará con lo que tenga, sin rechistar, poniéndolo fácil en su segunda etapa en el banquillo. Se encontró con una plantilla de 29 jugadores y a menos de un mes para que empiece la Liga solo ha salido Brahim Díaz con destino al Milan. Apenas lo ha podido ver en los entrenamientos, pero Carletto colabora en las salidas y todavía más si suponen unos ingresos para el club. Brahim deja tres millones de euros por una cesión de dos temporadas, el Milan tiene una opción de compra de 22 millones de euros y el Real Madrid otra de recompra por 27 millones.

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Las cuentas o el ejercicio económico tienen mucho que ver en la composición de una plantilla en la que hay demasiados supervivientes. El Real Madrid cerró la temporada 20-21 con un superávit de 874.000 euros y la 19-20 con un beneficio de 313.000 euros. No llega a los 1,2 millones de euros, ha dejado de ingresar 300 millones de euros por la pandemia y, aunque se considera un resultado positivo, es insuficiente. Vender a Varane da liquidez para el posible fichaje de Mbappé si el Paris Saint-Germain se abre a una negociación o a tener una tercera temporada con saldo positivo hasta que se recuperen definitivamente la normalidad y el crecimiento en los ingresos, y esté en marcha el nuevo Bernabéu como máquina de hacer dinero.