Cristiano Ronaldo, el rico que no es feliz en la Liga saudí: un feo gesto, broncas y mofas

Cristiano Ronaldo no encuentra la felicidad en el fútbol saudí. El portugués lleva una vida de lujo, con la riqueza que da un sueldo de 550.000 euros al día, 23.000 euros a la hora y 383 euros al minuto. Pero cuando echa el balón a rodar no es invencible y protagoniza comportamientos con los que ensucia su imagen. Ha tenido el feo gesto de hacer un desplante a un futbolista rival que fue a darle la mano en el último partido en la Liga Profesional Saudí. Su frustración la pagó con una reacción colérica, reprochando el juego antideportivo del equipo rival. "No queréis jugar", recriminó a un futbolista del Al Feiha tras el empate a cero del Al Nassr.

A Cristiano le ofusca que le hagan marcajes férreos y las estrategias o artimañas de los adversarios para trabar el partido y perder tiempo. Después del incidente con el jugador al que le negó la mano, se marchó del campo sin saludar a sus propios aficionados. Otro gesto más de la falta de pasión del portugués en su nueva casa. De sobra es conocido que tiene un mal perder cuando acaba los partidos sin marcar un gol y no logra el resultado deseado, pero los planes no son los que se imaginaba el luso.

Faltan siete jornadas para que finalice el campeonato saudí y el Al Nassr está segundo en la clasificación, a tres puntos del líder, el Al Ittihad. El empate del último partido pone más difícil el gran objetivo para el que se fichó a Cristiano Ronaldo. El título se complica y la estrella portuguesa estalla contra los rivales, negándoles la mano porque considera que se extralimitan con sus marcajes, y contra Rudi García, su entrenador. Según la prensa saudí, el enfado de Cristiano en el último partido siguió en el vestuario y tras una bronca, el club tomó la decisión de despedir al técnico francés.

Más decepciones

Hace tres meses y medio que Cristiano Ronaldo fichó por el Al Nassr y el equipo no ha mejorado con su incorporación. A nivel individual ha marcado 11 goles en 10 partidos y ha dado 2 asistencias. Pero en lo colectivo, el Al Nassr no ha progresado. El equipo está en la misma posición en la Liga y ha sido eliminado de la Supercopa de Arabia, ya con el portugués disputando todos los minutos, en el encuentro de semifinales que perdieron contra el Al-Ittihad.

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El primer balance, a falta de la resolución de una Liga que se ha puesto complicada para el Al Nassr, es de más decepciones que alegrías. A todo esto se suma una corriente entre los aficionados que se mofan del portugués con cánticos de Messi cuando se retira de los partidos. Si Cristiano Ronaldo esperaba que le pusieran la alfombra roja en la Liga saudí, se está llevando un desengaño.

"Estoy encantado con una nueva experiencia en una Liga y un país diferente. La visión que tiene Al Nassr es muy inspiradora", manifestó tras firmar un contrato de dos temporadas y media con el que ingresa 200 millones de euros netos al año entre salario y acuerdos comerciales. En Arabia está exento de impuestos y decidió, tras el Mundial, poner punto y final a su carrera en Europa. Rescindió el contrato con el Manchester United y abandonó el club que le lanzó al estrellato de una manera muy triste. El Al Nassr le presentó como "el mejor atleta del mundo" y el Gobierno saudí como un producto de marketing para la promoción turística del país y la candidatura para organizar el Mundial de 2023.

Ha comprobado que, a sus 38 años, no hay facilidades en una Liga saudí reforzada con equipos que tienen en sus plantillas hasta siete futbolistas extranjeros. Sus inicios en Arabia no fueron sencillos. Marcó un gol en los tres primeros partidos, cayó eliminado en la Supercopa y Luiz Gustavo, un compañero de su equipo, hizo unas declaraciones que le dejaron en mal lugar. "La presencia de Cristiano nos dificulta los partidos", comentó Luiz Gustavo, en lo que se entendió como los problemas del equipo para adaptarse a la estrella y tener que jugar para el portugués.

Un fuerte carácter

Con el entrenador tuvo sus diferencias después de que le cambiara en un partido de la Copa del Rey de Campeones. Rudi García decidió sacarle del campo con 3-1, en el minuto 87, y el portugués le puso mala cara. Tras el último mal resultado del Al Nassr aparece el ego y la desesperación de Cristiano Ronaldo. El fuerte carácter que conocieron en el vestuario de la Juventus cuando en el descanso de un partido de Champions contra el Oporto abroncó a los compañeros y les dijo: "No jugamos una mierda. No jugamos a nada".

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El Mundial de Qatar lo recordamos por la imagen con la que se fue llorando por la eliminación y el castigo del seleccionador, Fernando Santos, por reprocharle con gestos su cambio. Fernando Santos no siguió en el cargo y llegó el español Roberto Martínez. Tuvieron una reunión y Cristiano se propuso cambiar, ser uno más, demostrar que está para competir. Lo llegó a comentar en una charla con los compañeros de la Selección, agradecido al nuevo seleccionador por no cerrarle las puertas. "Estoy aquí como si fuera la primera vez", dijo, con un talante más humilde, para subrayar que quería hacer equipo. A Arabia se marchó a ganar mucho dinero y estar en buena forma para seguir compitiendo y poder llegar a la Eurocopa de 2024. Pero cuando a Cristiano no le salen las cosas como espera, reacciona con malos modales.

¿Qué pensará Cristiano Ronaldo cuando en Barcelona piden el regreso de Messi? Tras el Mundial de Qatar pidió al Real Madrid poder entrenarse en las instalaciones deportivas de Valdebebas. Hay informaciones que hablan de las ganas que tenía de regresar al club blanco, pero Florentino Pérez no lo contempló. La felicidad del Cristiano Ronaldo que disfrutaba como futbolista empezó a decrecer en el momento de su salida del Real Madrid.