Rubiales acusa al Gobierno de no "garantizar la separación de poderes" tras la decisión del TAD

Luis Rubiales, suspendido por la FIFA durante 90 días de su cargo como presidente de la RFEF, ha emitido un comunicado tras conocer la resolución del TAD que considera como "grave" todo lo ocurrido entre el dirigente y Jennifer Hermoso. En él, ha acusado al Gobierno de no "garantizar la separación de poderes" después de una rueda de prensa en la que el ministro de Cultura y Deportes en funciones, Miquel Iceta, ha pedido la suspensión cautelar y ha prometido "más medidas".

"El pasado día 20 de agosto cometí algunos errores evidentes de los que me arrepiento, sinceramente, de corazón", empezó el comunicado del dirigente. "He aprendido que por grande que sea alegría, y profunda que sea la emoción, incluso cuando se gana un Mundial, a los dirigentes deportivos se nos debe exigir un comportamiento ejemplar, y el mío no lo fue".

El expresidente manifestó sus disculpas, como también hizo en la comparecencia que ofreció en la Asamblea Extraordinaria. "Reitero, una vez más, mis disculpas por ello a los futbolistas, Federación y demás estamentos del fútbol de manera clara, rotunda y sin paliativos".

Mantiene su postura

Rubiales, eso sí, resaltó de nuevo que el beso fue consentido. "El acto fue mutuo y consentido, producto del gran entusiasmo. En ningún momento hubo agresión alguna. Es más, tan siquiera hubo la más mínima incomodidad, sino un júbilo desbordante en ambos. Repito: con consentimiento de ambas partes, tanto en los cariños abrazos como en el pico y la posterior despedida".

"Me preocupa especialmente que, algunos de quienes deben proclamar y contribuir a garantizar la separación de poderes en nuestro país, se empeñen en tomar parte y presionar en mi contra, en lugar de dejar que la justicia actúe con todas las garantías, manteniéndose al margen", explicó Rubiales.