El golpe (de zorro) de Florentino con Joselu y que en el Real Madrid no se podían imaginar

Solo hay una persona en este mundo que está igual o más feliz que Joselu. Florentino Pérez. Es difícil porque el éxtasis y la satisfacción de convertirse en el héroe del Real Madrid con dos goles al Bayern de Múnich que dan el pase a la final de la Champions, solo lo puede experimentar y explicar el delantero gallego. Lo que siente el presidente es orgullo y un desquite que le sirve de venganza personal con los agoreros que vaticinaban un fiasco.

Florentino se salió con la suya en un golpe de zorro con Joselu. Tiene la astucia de ser un chollo, en lo deportivo y lo económico, pero se quedó muy lejos del gusto y el criterio con el que realiza sus grandes fichajes. Si salía bien, triunfaba. Si el rendimiento era regular, convenía por el bajo coste. Si salía fatal, se hablaría de escarmiento. Joselu no es un primer espada, ni mucho menos un diamante. Lo dejamos en bisutería. Había que esperar al final de la temporada para hacer el balance de la planificación deportiva con la salida de Benzema y el refuerzo de Joselu. Si la decisión era acertada o errónea. Florentino se pone la medalla de Joselu.

Ancelotti es el primero que se llevó una decepción con la decisión de no reforzar la plantilla con un delantero top y planteó sus dudas de quedarse corto en la línea de ataque. La decisión de Florentino fue firme. No se podía gastar dinero y Joselu era una ganga. Había que hacer más con menos, tirar con cuatro delanteros (Vinícius, Rodrygo, Brahim Díaz y Joselu) y potenciar el fichaje de Bellingham. Ancelotti recibió una respuesta negativa a su petición de reforzarse con Harry Kane.

Florentino, ni en sus mejores sueños, podía imaginar el rendimiento que le ha sacado Ancelotti a la plantilla en una temporada en la que dejó desierto el dorsal 9 y se debilitó con las lesiones de futbolistas importantes. Lo mejor para el presidente estaba por llegar. Joselu ha metido al Real Madrid en la final de Wembley y el Bayern de Kane está eliminado. El equipo alemán tampoco ha sido capaz de ganar la Bundesliga.

Joselu no cumple con los parámetros de los fichajes de presente y futuro en la estrategia del club (talentoso, joven y mediático), pero consiguió colarse en la planificación del Real Madrid como cedido y a un buen precio. Lo hizo por su insistencia de dejar el Espanyol (para muchos aficionados pericos y en el club no salió de la mejor manera) y su madridismo.

Cero riesgo

La oportunidad era irrechazable para Florentino. El riesgo económico de que saliera mal era cero y en lo deportivo tenía la seguridad de que Joselu se dejaría la vida para aprovechar cada minuto que le diera Ancelotti. Lo extraordinario o milagroso ha sucedido. Joselu es un jugador cedido por el Espanyol, por el que el Real Madrid pagó medio millón de euros, y en tres minutos ha marcado dos goles históricos y de un enorme valor económico y deportivo para Florentino.

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En el Espanyol se tiran de los pelos por una operación en la que le podían haber sacado más tajada si se hubiera negociado con cláusulas de goles, partidos, minutos y títulos. Se tendrán que conformar con el millón y medio de euros que pagará el Real Madrid en la opción de compra del delantero, pero le podrían haber sacado más beneficio.

Joselu es la operación más sencilla que ha hecho Florentino en los últimos años y el rédito es satisfactorio en lo deportivo, económico y lo personal. Rinde con goles (lleva 17), algunos de ellos decisivos (dos al Getafe y otros dos al Bayern de Múnich), hace equipo y da identidad al proyecto. Esto último es importante para Florentino, que presume de tener jugadores que son madridistas y con Joselu, además, de ser canterano.

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En un club que esta temporada presupuestó unos ingresos de 939,5 millones de euros y que tras pasar a la final se van a incrementar, la operación de Joselu ha sido calderilla en lo económico y el gordo de la lotería en lo deportivo. Pero hay algo más importante y que es intangible. La revancha que se cobra Florentino, que ni él mismo esperaba, de confeccionar una plantilla sin 9 y que acabe siendo decisivo Joselu.

El éxito de Joselu le sirve al presidente, además, para quitarse un peso de encima. La ruina en las operaciones de dos delanteros que fracasaron: Mariano y Luka Jovic. Dos atacantes que costaron 75 millones de euros (15 de Mariano y 60 de Jovic) y que naufragaron en sus años en el Real Madrid. Joselu, el regreso de un canterano con 34 años, ayuda a compensar contrataciones fallidas. Lo que demuestra que hay factores fuera de control en la planificación deportiva y económica del Real Madrid. Unos fichajes salen bien, otros mal y alguno fatal (Eden Hazard).