Mbappé se pone a rezar y el Real Madrid le ve muy necesario tras ganar la Champions

• Fichaje de Mbappé por el Real Madrid: última hora del jugador en directo

Kylian Mbappé está avisado de que tiene que llegar al Real Madrid con mucha humildad y se pone a rezar para cumplir con las enormes expectativas que tiene Florentino Pérez con su fichaje. Se incorpora a un equipo que ha ganado seis Champions en los últimos diez años. Dos de ellas, mientras Florentino cocinaba su fichaje y chocaba con el Paris Saint-Germain y la falta de palabra del clan Mbappé.

El presidente del Real Madrid lo ha conseguido y en los cinco años que ha firmado va a suponer un fuerte desembolso, entre sueldo, prima de fichaje y bonus, que necesita ser amortizado. Mbappé llega a un equipo que ha ganado la Decimoquinta y tiene conocimiento del fuerte deseo de Florentino por incorporarlo para hacer un equipo invencible. Es un fichaje estratégico y necesario en lo deportivo y comercial. Tiene que marcar una época en el club blanco, convertirse en una leyenda. Su deseo y promesa es estar a la altura y no fallar a sus nuevos compañeros.

Es muy significativo que Jude Bellingham se acordara y mencionara a Kylian Mbappé en el césped de Wembley con su primera Champions recién ganada. El inglés, todavía vestido con la indumentaria de juego y un rostro de agotamiento, no evitó las preguntas sobre la incorporación del francés. No era el día ni el momento de hablar de un jugador que llega al Real Madrid sin haber levantado la Champions.

Bellingham tampoco ha tenido problemas de esquivar las preguntas de Mbappé en los días antes de la final, cuando en la jornada de puertas abiertas con los medios no se cortó para responder que será un placer jugar con el francés.

El nombre de Mbappé se coló en la celebración de la Champions con otra contundente respuesta de Bellingham. En una noche histórica y complicada, como reconocen Florentino, Ancelotti y todos los jugadores. Ganar al Borussia Dortmund fue un sufrimiento. Con una primera parte horrible, en la que el equipo no logró disparar entre los tres palos de la portería de Kobel. Al descanso se fueron pidiendo la hora y en el vestuario se reprocharon muchos errores.

Ancelotti no tuvo problemas en reconocer que el equipo estuvo vago en un primer tiempo en el que faltó intensidad, solidez y profundidad en ataque. Los jugadores pidieron recuperar el bloque compacto, la verticalidad y finalizar las jugadas. Se salió del bloqueo con el gol de Carvajal y la sentencia de Vinícius. Pero quedó la sensación de que el mejor del partido fue Courtois, el salvador, y que con un delantero más incisivo y eficaz se evitaría tanto sufrimiento.

Otro nivel

En las oraciones de Bellingham y otros compañeros está Mbappé. "Lo habéis visto esta noche. Lo único que echamos de menos es un nueve eficaz. Es de los mejores del mundo y nos va a llevar a otro nivel", manifestó el inglés en una entrevista en TNT con Rio Ferdinand, Steve McManaman y Mourinho. Entre futbolistas el clima es de sinceridad y relajación. Se entienden y explican mejor las dificultades que tuvo el Real Madrid para doblegar al Dortmund y cómo vieron peligrar un partido en el que eran claramente favoritos y fueron inofensivos en la primera parte.

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Bellingham podía haber disimulado y no lo hizo. Haber puesto más el foco en los méritos del equipo, la resistencia y la reacción en una segunda parte que cambió con el cabezazo de Carvajal. El lateral derecho convertido en goleador. Pero en el tono de sus palabras se comprobó el alivio que va a ser tener a Mbappé para evitarse tanto sufrimiento y no tener que jugar con el equipo tan replegado, el bloque echado atrás y con problemas para salir. Lo que sucedió en el Etihad Stadium y en Wembley.

Esos apuros a los que se refirió Rodrygo días antes de jugar la final para reconocer que el Manchester City fue mejor o las palabras de Kroos en las que se sinceró sobre el error del árbitro en el gol anulado a De Ligt en el partido de vuelta contra el Bayern de Múnich en el Bernabéu.

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Jude Bellingham demuestra que tiene sensatez y es capaz de hacer autocrítica incluso después de haber ganado una Champions. No hizo un buen partido. Estuvo desatinado en las dos ocasiones que tuvo para marcar, una en un salto de cabeza y otro un remate con el pie. Se le vio fatigado y sin puntería. No oculta que su rendimiento ha bajado desde que empezó el año y que fue perdiendo eficacia.

El principal problema que señalan en el Real Madrid de la mala primera parte que hicieron contra el Borussia Dortmund es que les faltó amenaza arriba, intimidar y claridad para acabar las jugadas. Fue difícil para Vinícius y Rodrygo jugar por dentro y desbordar por las bandas. Mejoraron en la segunda parte y sus incursiones no encontraban un rematador. No consiguieron conectar con Bellingham y el inglés no le importó decir que con Mbappé se verán las cosas de manera diferente.