El debate del Santiago Bernabéu sobre Casillas pasa de la crudeza al ridículo

Empieza a aburrir porque se alarga en el tiempo. El debate que envuelve la vida de Iker Casillas vive un capítulo nuevo cada día. La visita del Basilea al Santiago Bernabéu fue una continuación de lo vivido durante el derbi u otros partidos. Silbidos y aplausos seguían cada acción del guardameta. Hasta durante el calentamiento, convirtiendo un ridículo un debate de una excesiva crudeza en pasados momentos. Una excelente parada en realizada en la segunda parte, eso sí, provocó que el bando pro Iker ganara finalmente un nuevo ‘combate’.

Desde el mismo momento en que Iker comenzó el calentamiento, ya se pudo intuir que se iba a vivir un nuevo episodio en esta historia sin final. Al menos por el momento. De la dureza se pasó a vivir una situación casi cómica, ridícula, en la primera noche de Champions de la temporada en el Bernabéu. Mientras unos aficionados mostraban su cariño al guardameta, otros contestaban a continuación con silbidos. No se había puesto el balón en juego y el ambiente en el estadio madridista se torcía.

El Basilea fue el mejor remedio para que el Real Madrid apagara el fuego que generó el Atlético de Madrid el pasado sábado. Cinco goles en una noche apacible. Para el equipo, porque para Casillas, en particular, fue una más de una larga lista. En cuanto el balón comenzó a rodar sucedió lo mismo que en el calentamiento. Era aparecer en escena para que la división de la grada se manifestara claramente. Pitos, aplausos, insultos, loas… No hacía falta que Casillas hiciera algo bueno o algo malo. Su vida es la que es…

El equipo helvético fue un buen rival para el Madrid y, sobre todo, para Casillas. Nada pudo hacer en el gol que marcó el Basilea, pero para una vez que tuvo que aparecer, lo hizo como en sus mejores tiempos. Derlis González, autor del solitario tanto del rival del Real Madrid, se plantó en solitario delante del portero, pero éste sacó una espectacular mano para evitar lo que parecía inevitable. El estadio, en ese momento,ya tomó partido a favor de Iker.La acción lo merecía. Pepe, Varane y Marcelo fueron rápidamente a felicitar a un compañero que necesita cariño.

Carlo Ancelotti, bastante cansado con este asunto, dijo el martes que no volvería a hablar de ello. Tras el partido, se mantuvo en la misma línea, manifestando de nuevo que“ya dije que no voy a volver a hablar de los porteros. Simplemente veo lo que hace sobre el terreno de juego el que juegay en esta oportunidad me ha gustado la actuación de Casillas”.

Otro jugador que respiró en esta plácida noche fue Karim Benzema. Con dos goles marcados en los últimosdieciocho partidos y una actuación más que discutible en el derbi, el Bernabéu le esperaba de uñas. El francés, como su compañero Casillas, fue recriminado por la afición, pero en la segunda parte hizo las paces -o al menos empezó- con un excelente gol tras una combinación con Cristiano Ronaldo. El francés, al ser sustituido por Chicharito, fue cálidamente abrazado por Carlo Ancelotti.

El delantero francés reconoció tras el partido que ve “normal que el público pitara. Voy a luchar para cambiar esta situación, sé que hay mucha presión en el Real Madrid. Estoy contento por el triunfo porque era fundamentalganar este primer partido de Champions. Marcar es importante para mí, pero es más importante jugar con mis compañeros. Así llegan los goles...”. El atacante marcó el gol número 1.000 en Europa en la historia del Real Madrid, pero sabe de sobra que está bajo sospecha y sólo una buena racha acabará con el ambiente tan hostil que está viviendo últimamente en el Bernabéu.