Dos genialidades de Gabriel Jesús doblegan al Sevilla en la batalla del Sánchez-Pizjuán (1-2)

La dinamita de Gabriel Jesús dinamitó las aspiraciones del Sevilla (1-2). Los andaluces apretaron a uno de los mejores equipos de Europa como el Arsenal, pero la falta de determinación en ambas áreas decantó el encuentro para los ingleses. Una genialidad de Gabriel Jesús para asistir a Gabriel Martinelli en última jugada de la primera parte abrió la lata de una primera parte muy disputada y atascado, donde el Sevilla había crecido con el paso de los minutos. Un final inesperado para los sevillistas cuando mejor estaban.

El gol del delantero brasileño noqueó a los andaluces, que encajaron el 0-2 nada más salir del túnel de vestuarios. Otra vez obra de Gabriel Jesús, con un latigazo imparable para Nyland. Nemanja Gudelj recortó distancias de cabeza, pero el resultado ya no se movería más. La letalidad de los delanteros ingleses fue demasiado para un Sevilla que quiso pero no pudo, especialmente en los últimos minutos. El Sevilla es tercero en la Champions League con dos puntos en tres encuentros.

En el segundo partido al mando de Diego Alonso, el Sevilla fue un equipo con las ideas muy claras al que le limitó la diferencia de talento individual. Los andaluces salieron al Ramón Sánchez-Pizjuán con un gran ambiente, como ya sucediera ante el Real Madrid. Con Sergio Ramos en el papel de organizador del juego local gracias a sus cambios de orientación hacia Lukebakio y Soumaré como termómetro defensivo, el Sevilla apostó por morder arriba desde el principio y tratar de conservar la pelota para defenderse.Sin embargo, el primer susto de la noche lo ofreció el Arsenal en un claro mano a mano de Gabriel Martinelli que Nyland sacó con una mano imperial.

El error de Sow y la descoordinación en la presión alta que precedió a la ocasión replanteó la puesta en escena sevillana. A partir de ese momento, el encuentro se equilibró. Los locales contestarían con celeridad. Un centro aislado de Jesús Navas conectó con Ocampos, que remató alto por encima del travesaño. El Sevilla daría un paso atrás para buscar la seguridad defensiva frente a un Arsenal que combinaba con velocidad y verticalidad. El partido se anestesió, sin ocasiones pero con un ritmo trepidante de ida y vuelta.

En una de esas ocasiones, con el Sevilla lanzándose arriba, un mal pase de David Raya provocó la recuperación alta local y solo un control defectuoso de Lukebakio evitó el primer gol del Sevilla. Gabriel Jesús replicó con un disparo demasiado abierto. Al filo del descanso, una gran anticipación de Sergio Ramos generaría un disparo franco de En-Nesyri que no cogió puerta por centrímetros. El Sevilla estaba volcado en ataque, olfateando el gol con sus centros lateralesy poniendo al Arsenal contra las cuerdas.

El gol llegó en el mejor momento del Sevilla

Los andaluces apretaban y el Arsenal temblaba en defensa, pero la Champions League la decide la élite más absoluta. A un minuto del descanso y en la última jugada del primer tiempo, Gabriel Jesús lideró un contragolpe en el que se sacudió a dos defensores con un solo gesto, asistió a Martinelli a campo abierto y el delantero brasileño dejó desparramado por el suelo a Nyland para adelantarse. Solo una genialidad de Gabriel Jesús había decidido una primera parte muy igualada y sin un claro dominador.

La segunda parte empezó sin cambios y con el Arsenal cerca de darle un golpe de gracia al Sevilla. En un saque de banda con pérdida de Rakitic, el Arsenal recuperó arriba y Odegaard envió la pelota por encima del travesaño y con Nyland desprotegido. El resultado pesó como una losa para los andaluces, más partidos en defensa y noqueados por el primer tanto inglés. En el minuto 52, en una ocasión sin aparente peligro, Gabriel Jesús encaró a un Jesús Navas que lo siguió con la mirada y dibujó un misil imparable para Nyland (0-2).

Diego Alonso agitó el equipo con un doble cambio: fuera Sow y Lukebakio y dentro Mariano Díaz y Lamela. El Sevilla reaccionaría rápido y en el primer córner de la segunda parte, Gudelj se elevó por encima de Gabriel Jesús y remató el balón de Rakitic al fondo de la red. El conjunto andaluz encontró el gol antes que el juego, justo en el momento ideal para abrir un encuentro que amenazaba con cerrarse definitivamente.

​Un quiero y no puedo

El tanto del serbio revitalizó al Sevilla, capaz de fajarse del control del Arsenal. Los andaluces volvieron a la carga con los centros al área y dos delanteros centro (En-Nesyri y Mariano) que descolocaron a los visitantes. En una fugaz aventura de Soumaré, el francés envió el cuero para Mariano Díaz. El ex del Real Madrid estrelló la pelota en el travesaño, aunque el colegiado señaló una mano muy controvertida, y buscó el 2-2 con ahínco. El Sevilla era un equipo reconocible y determinado, empujado por una afición que llevaba en volandas a su equipo.

El Arsenal sufría y Arteta movió el banquillo con la entrada de Kai Havertz, Trossard y Nketiah por Odegaard, Saka y Gabriel Jesús. Los andaluces lo siguieron intentando con un juego directo que dañaba al Arsenal, pero dejando puertas abiertas al contragolpe visitantes. El Sevilla quiso pero no supo cómo. Los ingleses lograron anestesiar el despertar del Sevilla, que con el paso de los minutos se quedó sin conexión entre el centro del campo y el ataque. Con la derrota y tres partidos por jugar, el Sevilla es tercero de su grupo con dos puntos tres jornadas.