La 'maldición de Kane' pone contra las cuerdas a un Bayern al que solo le queda la Champions

El Bayern de Múnich tiene un match ball en la Champions League. El conjunto bávaro, un equipo habituado a levantar títulos, está viviendo su peor temporada del siglo XXI, lo que hace que la competición continental sea el único asidero al que aferrarse para tratar de corregir el rumbo errático que ha tomado el club. Jugadores lejos de su nivel, enfados en la plantilla y un entrenador muy cuestionado, se unen a la maldición de Harry Kane, en un cóctel peligroso para el Bayern.

Este verano, saltaba la noticia: el equipo alemán soltaba 100 millones de euros para fichar a Kane, uno de los mejores delanteros del continente. Pronto, el delantero inglés comenzó a demostrar que el desembolso que había hecho su nuevo equipo no era en vano, convirtiéndose en el gran líder goleador del Bayern. El problema comenzó a llegar en otras posiciones que, hasta la fecha, habían funcionado y que, casi de la noche a la mañana, dejaban de dar resultado.

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Pero en la ecuación, esa famosa maldición de Kane empieza a tomar peso. Y es que, a pesar de ser uno de los mejores delanteros del momento, el británico ha sido incapaz de levantar un solo título como profesional. Con el Tottenham, fue subcampeón de la Premier en la 2016-17 y de la Champions en la 2018-19. Además, con Inglaterra, se quedó a las puertas de la Eurocopa de 2021... y, en su aterrizaje en Alemania, no le están yendo demasiado bien las cosas.

El Bayern perdió la Supercopa germana por 3 a 0 ante el RB Leipzig y cayó en segunda ronda de la Copa ante el humilde Saarbrücken. Con la Bundesliga perdida, a 16 puntos de distancia del Bayer Leverkusen de Xabi Alonso, los bávaros solo pueden aspirar a la segunda plaza como objetivo máximo, lo que amplía la maldición de Kane a su nuevo país de acogida. Después de 13 años ganando al menos un título, este año, el Bayern de Múnich puede acabar en blanco.

Por ello, la Champions se ha convertido en la única tabla de salvación del Bayern este curso, por lo que la eliminatoria de cuartos de final ante el Arsenal es más importante que nunca. El problema es que los gunners no son un equipo sencillo y los germanos deberán de hacer dos partidos perfectos para lograr el pase a las semifinales. Y, por si fuera poco, en caso de conseguirlo, Real Madrid o Manchester City les esperarán en la siguiente ronda. Casi nada.

¿Qué le pasa al Bayern?

Si por algo ha destacado históricamente el Bayern es por ser un equipo rocoso, con un estilo de juego muy determinando y, sobre todo, con un concepto de fútbol casi ancestral que, curso tras curso, el equipo se encargaba de replicar para continuar con los éxitos del club. Pero Thomas Tuchel no solo no ha dado con la tecla, sino que ha convertido al Bayern en un equipo menor. Su último bochorno llegó este fin de semana, con la derrota ante el colista de la Bundesliga.

En ese partido, los bávaros se pusieron ganando 0 a 2 con goles de Kane -que suma 38 en todas las competiciones- y Gnabry, momento en el que el Heindenheim dio la vuelta al marcador para endosar una humillante derrota al gigante alemán. Es el último revolcón que ha sufrido un Bayern que ha perdido su personalidad y donde jugadores como Müller, De Ligt o Goreztka ya han mostrado su descontento con el estilo de manera pública. Así, una consecuencia clara se desprende: la Champions es la tabla de salvación.

Haberlo perdido ya todo y no tener opciones en la Bundesliga es un bochorno para el Bayern y, al mismo tiempo, permite al equipo solo pensar en Europa como única vía para levantar un título esta temporada. Así, el equipo solo tendrá en mente la competición continental, lo que le hace aún más peligroso en la Champions. El peor Bayern de siglo XXI se lo juega todo ante el Arsenal. ¿Será capaz de encontrar una vía de salvación a la temporada? En 180 minutos, lo sabremos.