Ancelotti, único madridista que no dobló la rodilla ante la crítica por el arbitraje

“No sé quién es el árbitro ni me gusta saberlo”. Es otra manera de saborear el fútbol, y no le ha ido mal. Carlo Ancelotti fue el único protagonista del Real Madrid que no mencionó al árbitro de los que este miércoles se pararon ante la Prensa tras pasar por el vestuario. La declaración anteriormente expuesta data del pasado 19 de diciembre, cuando había una polémica entre San Lorenzo y Real Madrid sobre quién debía dirigir la final del mundial de clubes. En el Calderón, Sergio Ramos, Isco y James pusieron al árbitro como una de las justificaciones para explicar la derrota frente al Atlético.

En octubre de 2013, Sergio Busquets aseguró que los jugadores del Madrid “cada vez que pierden, buscan la excusa fácil del árbitro”. Este miércoles su teoría –más allá de la veracidad- cobró peso. Sergio Ramos, que no estaba previsto que hablara, saltó a la palestra para defenderse del penalti que cometió sobre Raúl García, “cada día me gusta más la Premier”, comentó al tiempo que dejó claro que para él “no fue penalti” su agarrón. Clos Gómez tuvo pocas dudas y, las repeticiones, le dan la razón. Aunque siempre entra en juego la interpretación.

El colombiano James también comentó su opinión acerca del colegiado, a quien le vio tal vez influido por la grada. “Estuvo con muchas dudas durante todo el partido. Y ante la duda, siempre pitó para el Atlético”. Su visión, en cualquier caso, parte del fútbol y la presión que pueda ejercer el aficionado ante la figura que representa al árbitro y sus emociones.

Por último, Isco Alarcón realizó una reflexión similar a la de James al apuntar que “es raro que el Atlético sea el que haga las faltas y las tarjetas sean para nosotros. A lo mejor es que nosotros no sabemos dar patadas”. No se le ve a Ancelotti dedicando un entrenamiento a que sus futbolistas aprendan a “dar patadas”.

Al Atlético le pitaron el doble de faltas

Pese a las quejas, Clos Gómez sacó seis tarjetas amarillas al Atlético de Madrid por cuatro al Real Madrid, habiendo sancionado 23 faltas al conjunto rojiblanco por 12 al merengue y realizando un total de 24 entradas los locales por 22 de los visitantes. Las proporciones de “patadas” parecen coincidir con las palabras de James e Isco, no así con su conclusión ya que el Clos Gómez sancionó el doble de veces al Atleti por ello. A partir de aquí, cada uno tiene su opinión de la actuación arbitral, incluida la perenne frase de Busquets.

Velasco Carballo, este verano en una entrevista a El País, destacó la cintura que un colegiado debe tener para no caer al suelo desde la cuerda de equilibrio: “Arbitrar en Primera es como conducir un Fórmula 1. Al más mínimo error, el golpe es tremendo. Puede afectar a tu vida”. Y lo peor para este sector es que siempre tendrá enemigos porque una misma jugada se considerará “error” para unos, y acierto para otros.