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Del "estúpido" al "mocoso malcriado": De Bruyne y un periodista se enganchan tras la eliminación de Bélgica de la Eurocopa
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CON TANCREDI PALMERI

Del "estúpido" al "mocoso malcriado": De Bruyne y un periodista se enganchan tras la eliminación de Bélgica de la Eurocopa

La selección belga fue eliminada ante Francia en una de las oportunidades de una espectacular generación que no ha llegado a responder como se esperaba

Foto: Kevin de Bruyne, tras caer eliinado. (EFE/EPA/Christopher Neundorf)
Kevin de Bruyne, tras caer eliinado. (EFE/EPA/Christopher Neundorf)

"Ojo con Bélgica, que yo creo que este año sí", "la coloco entre las favoritas" y, especialmente, "tienen un equipazo para salir campeones"... pero la historia volvió a repetirse. La selección belga puso contra las cuerdas a la que bien podía ser la principal candidata a ganar esta Eurocopa, por muy gris que haya sido su actuación día sí, día también, la Francia de Deschamps, pero el desenlace se repitió de nuevo: verán la final desde casa mientras son conscientes de que la mejor oportunidad de su historia hace tiempo que se marchó por el desagüe.

Lejísimos del nivel que tenía hace no tanto tiempo, la selección belga ni siquiera logró completar un buen partido y contra Francia acabó clasificándose el menos malo. O el que más suerte tuvo. Vertonghen, el último representante atrás de la vieja guardia que tanto prometía y que en tan poco se ha quedado, metió el pie a un disparo de Kolo Muani a cinco minutos para el final, despistando al portero para confirmar que esta Eurocopa también iba a acabar en tragedia. Se acabó lo que se daba en una selección belga que lo más destacado que ha tenido en el torneo ha sido la equipación de Tintín. Con eso se dice todo.

Foto: Oliver Bierhoff celebra su gol en la final de la Eurocopa de 1996 (Efe).

Los últimos componentes de la gran generación dorada del fútbol belga vieron cómo el que bien pudo ser su último baile acababa con la encendida de las luces antes de tiempo. Otra vez. De Bruyne ya tiene 33 años; Lukaku, 31; el propio Vertonghen, 37; o Carrasco, a meses de los 31. Pero a ello hay que sumarle un Wistel, con 35, que no sumó ni un minuto en el torneo y, cómo no, los otros dos grandes representantes que hacían pensar que Bélgica alcanzaría la gloria: Eden Hazard, ya retirado del fútbol, o Thibaut Courtois, con 32 años y ausente en el torneo tras perderse casi toda la temporada por una grave lesión -mala relación con De Bruyne aparte-. Fellaini, Kompany, Vermaelen o Mertens y Alderweireld -únicos que sigue en activo, y con 37 y 35 años respectivamente-, fueron las otras cabezas visibles de la impotente Bélgica que lo tuvo todo y nunca llegó a nada. Y en Alemania, cuando el tiempo ya había pasado y nadie contaba con ello, el sueño se acabó definitivamente.

De Bruyne y un periodista se enganchan

Fue el capitán de la selección belga, Kevin de Bruyne, quien salió a dar la cara tras la eliminación contra Francia. Con la ya de por sí fría actitud que lo caracteriza, el centrocampista del Manchester City se mostró serio, respondiendo a las preguntas que le tocaba por ser quien era, hasta que recibió una que no le gustó nada. Fue de Tancredi Palmeri, colaborador en varios grandes medios de comunicación: "Kevin, ¿te duele que la generación dorada no haya logrado alcanzar una final?", a lo que el futbolista le preguntó que qué era una generación dorada y el periodista respondió: "La vuestra".

De Bruyne trató de justificar la actuación de Bélgica en los últimos grandes torneos: "¿Y dices que Francia, Inglaterra, España, Alemania no tienen una generación dorada?...", y mientras se marchaba de la zona de preguntas le dijo "estúpido" con evidente enfado.

Tras ver la toma desde el lado opuesto y ver cómo De Bruyne le había insultado, Tancredi Palmeri quiso responder al jugador belga en las redes sociales: "Jaja. De Bruyne acaba de llamarme estúpido. Hola Kevin, una pequeña nota para ti: la generación dorada que mencionaste de Francia, Inglaterra, Alemania y España... ¡TODAS LLEGARON A UNA FINAL! Futbolista de siempre que solo quiere que le pregunten lo buenos que son. Mocoso malcriado".

Después de quedarse fuera de los Mundiales de 2006 y 2012, Bélgica volvió a la Copa del Mundo en 2014, cayendo en cuartos de final frente a Argentina. La máxima cuota de esta gran generación se produjo en Rusia 2018, metiéndose en las semifinales, en las que perdieron contra Francia, pero logrando al menos el tercer puesto al vencer en el siguiente partido a Inglaterra. Su tope histórico. El descalabro total se produjo en Qatar 2022, cuando ni siquiera fueron capaces de superar la fase de grupos.

No mucho mejor les ha ido en las Eurocopas, siendo su techo los cuartos de final que alcanzaron en 2016 y 2020, eliminados por Gales e Italia respectivamente, antes de despedirse en octavos frente a Francia en este 2024. Una selección plagada de talento que llegó a convertirse en el equipo de moda, pero que siempre acabará siendo recordado por la Bélgica que quiso y no pudo. Un desperdicio de calidad en un once formado por estrellas de primer nivel que, como bien dice Tancredi Palmeri, ni siquiera logró colarse en una gran final pese a que tenía mimbres de sobra para hacerlo.

"Ojo con Bélgica, que yo creo que este año sí", "la coloco entre las favoritas" y, especialmente, "tienen un equipazo para salir campeones"... pero la historia volvió a repetirse. La selección belga puso contra las cuerdas a la que bien podía ser la principal candidata a ganar esta Eurocopa, por muy gris que haya sido su actuación día sí, día también, la Francia de Deschamps, pero el desenlace se repitió de nuevo: verán la final desde casa mientras son conscientes de que la mejor oportunidad de su historia hace tiempo que se marchó por el desagüe.

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