Nico Williams y Lamine Yamal, a lo Joaquín en el Corea 2002 (pero sin Al-Ghandour)

La Eurocopa llega a los momentos más decisivos y cada vez falta menos para conocer al campeón. Ya solo quedan ocho selecciones que aspiran a levantar el trofeo continental: España, Alemania, Francia, Portugal, Turquía, Países Bajos, Inglaterra y Suiza. El viernes y sábado se disputarán los cuartos de final. El primer enfrentamiento será a las 18:00 horas en Stuttgart, donde se medirán España y Alemania.

Esta es la Eurocopa de los jóvenes talentos. Jamal Musiala, Arda Güler o Cody Gakpo sobresalen, pero hay dos nombres que han cautivado a todos los aficionados: Nico Williams y Lamine Yamal. ¿Cuándo fue la última vez que España jugó con extremos tan vertiginosos? Hay que remontarse al Mundial de Corea 2002, cuando un imberbe Joaquín de 20 años de edad cautivó al mundo del fútbol.

Con un rango de edad similar —Nico 21 y Yamal a punto de cumplir 17—, los puñales del combinado nacional buscarán ganar a la anfitriona, lo mismo que intentó Joaquín hace 22 años y que acabó frustrado por la desastrosa actuación arbitral de Gamal Al-Ghandour.

España se juega el pase a las semifinales de la Eurocopa frente a Alemania, la anfitriona, este viernes a las 18:00. Estas dos jóvenes perlas han irrumpido en el panorama futbolístico de forma apabullante. Se esperaba que fueran importantes, no tan determinantes. Como Joaquín o Vicente en el pasado, España recupera las alas para volar.

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El Confidencial

Williams, una estrella emergente

Nico mostró su descaro y talento ante Georgia el pasado domingo. Sus diabluras ayudaron a enmendar el gol georgiano. Es una de las piezas fundamentales para De la Fuente en esta Eurocopa y guía a la Selección Española en su camino.

Lamine y Nico destacan por su talento con el balón en los pies y por su atrevimiento, típico de dos niños que disfrutan en el patio del colegio. No tienen miedo a probar jugadas nuevas, quiebros, filigranas que sorprendan a cualquier rival. No saben cómo defenderlos.

El rendimiento del pequeño de los Williams es sobresaliente, como si de un torbellino se tratara, algo que asusta a los alemanes. El enfrentamiento con Joshua Kimmich será uno de los puntos más importantes del partido.

Conexión Lamine-Nico

Ambas bandas de la Selección destacan por su electricidad y el dinamismo continuo. Han aportado un cambio radical en el juego, y son ambos unos puñales peligrosos en ataque.

Además de contar con estilos similares, Nico y Lamine tienen una relación sana, la misma que entre dos chavales de 21 y 16 años, respectivamente. Reflejan esa química tanto dentro como fuera del terreno de juego. Se entienden a la perfección y se buscan en numerosas ocasiones.

Es una conexión mágica, como si de hermanos se tratara, que quedó clara tras finalizar el encuentro de octavos. Vimos cómo ambos jugadores decidieron quién bebía primero agua de la botella jugando a piedra, papel o tijera. Son dos niños, pese a que caiga gran parte de la responsabilidad sobre sus hombros.

Esta Euro es el escaparate del futuro talento continental. Se asientan ya jugadores como candidatos a ser grandes estrellas. Y España cuenta con dos importantes piezas. Dos de los cinco mejores extremos del momento.