Bronca en Manchester: el derbi de Mourinho y Guardiola acabó a botellazo limpio

El derbi se presentaba como casi definitivo en el caso de que ganara el Manchester City, lo que sucedió finalmente. El equipo de Pep Guardiola asaltó (1-2) Old Trafford y se distancia en 11 puntos al equipo que adiestra Mourinho. Partido de máxima intensidad, aleja a los 'citizens' de sus perseguidores y sólo un cataclismo le privaría de ganar la Premier League. Si caliente fue el partido en el verde, más en los vestuarios a su conclusión, donde tuvo lugar una tremenda bronca.

Los medios de comunicación británicos, de manera unánime, informan de los acontecimientos que acaecieron en las entrañas de Old Trafford, cuando el equipo de Pep Guardiola celebraba el importante triunfo obtenido en la casa del eterno enemigo, mientras los de Mourinho rumiaban sus penas tras alejarse un poco más de la lucha por la Premier League. Mikel Arteta, uno de los asistentes de Pep Guardiola, fue el peor parado salió, con una herida en el rostro, en concreto en una ceja.

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Según desveló la 'Cadena Ser', fue Romelu Lukaku, atacante del Manchester United, el que en un momento dado perdió los nervios y lanzó una botella que alcanzó a Arteta. Fue cuando el City disfrutaba ruidosamente del triunfo obtenido, perdiendo los nervios el discutido delantero belga. La prensa británica asegura que el ayudante de Guardiola sangró por la herida causada por la botella, aunque el asunto no tuvo mayores consecuencias.

Por su parte 'The Sun' informó que todo comenzó cuando José Mourinho se acercó al vestuario del Manchester City debido a la música, que salía con demasiados decibelios de su interior. El entrenador portugués se molestó por la estruendosa celebración y exigió algo más de respeto al equipo de rival, momento en el que apareció Lukaku, lanzando una botella que impactó en la cabeza Mikel Arteta.

Medios como 'Mirror' y 'Daily Mail', adjuntando imágenes del momento, informaron que Mikel Arteta se presentó en el entrenamiento del lunes cubriéndose con una mano la zona afectada. En dichas instántaneas se le ve conduciendo su vehículo, acompañado por Lorenzo Buenaventura, y en todo momento evitando que los fotógrafos y cámaras pudieran captar su rostro perfectamente.

Se apunta que hasta 20 personas se vieron involucrados a continuación en una dura trifulca, incluyendo un áspero enfrentamiento entre José Mourinho y Ederson, guardameta del Manchester City. Otras fuentes aseguran que otra botella, de las muchas que volaron en el interior de Old Trafford, impactó en el estratega portugués, aunque cuando apareció ante los medios para analizar el encuentro, no se apreció ninguna marca en su rostro.

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The Football Association (Asosiación de Futbol) ya ha iniciado una investigación para tomar medidas si procede. El informe del colegiado del encuentro será fundamental a la hora de imponer multas o sanciones. Ambos clubes podrían ser castigados llegado el caso. El enfado de Mourinho se pudo comprobar en la sala de prensa. Escocido por la derrota, dijo que "los goles que marcó el Manchester City fueron una vergüenza".