"Y ahora va a decirle a todo el mundo lo que ha hecho mal": el palo al Guardiola más quejica

Pep Guardiola sabe que el Manchester City tiene por delante 20 días de verdadera locura. Después del empate a cero ante el Arsenal, que le deja a tres puntos del liderato de la Premier, el técnico catalán no dudó en quejarse públicamente del complicado calendario que tiene su equipo por delante, donde se jugará tres títulos diferentes en seis exigentes partidos. Pero, solo unos minutos antes, recibía un inesperado palo por su comportamiento sobre el césped.

El City no pudo pasar de la igualada ante el Arsenal de Mikel Arteta, y el empate sin goles permite al Liverpool escaparse en solitario en la cabeza de la tabla. A falta de 11 partidos para el término de la competición, la distancia no es insalvable, pero el City no puede volver a tropezar si no quiere complicarse la lucha por el triunfo final. Y, al mismo tiempo, no puede perder de vista los cuartos de final de la Champions League ni las semifinales de la FA Cup.

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Por esa razón, Guardiola se quejó amargamente en sala de prensa del exigente calendario que tiene en cuestión de 20 días, que comparó con el del Real Madrid. "Jugamos el miércoles contra el Aston Villa a las 20:15 horas y, luego, el sábado a las 12:30 horas contra el Crystal Palace. ¡A las 12:30! Y, después, vamos a Madrid el martes. Mientras, el Madrid tiene nueve días para prepararse, ¡nueve días! Jugaron este fin de semana y no volverán a hacerlo hasta nuestro partido".

El problema del City no está solo en la acumulación de partidos, que puede conllevar lesiones y sobrecarga por los minutos jugados, sino que todos ellos son transcendentes para el conjunto inglés. Tres partidos de Premier —Aston Villa, Crystal Palace y Luton—, los dos encuentros de los cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Real Madrid y las semifinales de la FA Cup ante el Chelsea. O, dicho de otra manera, tres competiciones abiertas donde no puede permitirse tropiezos.

Quizá por eso se pudo ver a Guardiola más nervioso de lo habitual ante el Arsenal, otros de los contendientes a la lucha por la Premier. El empate a cero en el Etihad ante un rival directo provoca que no se puedan permitir más fallos en un momento clave del curso. Y uno de los que lo pagó fue Jack Grealish, pues, nada más acabar el choque, el técnico catalán se dirigió a él para explicarle un par de acciones que no había hecho bien sobre el césped que el inglés aceptó de buen grado.

Pero a quien no le gustó nada la manera de actuar de Guardiola fue a Richard Keys, narrador de BeIn Sports encargado de comentar el choque. Ver estas imágenes del técnico provocó sus críticas: "Guárdatelo para el vestuario. Es todo por las cámaras, ¿no? Es muy cansado. Vete al túnel de vestuarios, no deberías estar sobre el césped diciendo eso. Y ahora va a decirle a todo el mundo lo que ha hecho mal, por supuesto", decía en antena ante lo que sucedía.

Lo que el comentarista explica implícitamente era su incomprensión ante este tipo de gestos, que pueden ser explicados en privado y lejos de la vista de todos, lo que hace pensar a Keys que son acciones para la galería, para gustarse y demostrar que no se ganó el partido porque no se hizo lo que pedía. Las críticas están a la orden del día en Inglaterra: de los aspavientos de Guardiola al calendario del City. Y lo cierto es que los nervios ante lo que está por llegar empiezan a ser evidentes.