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El Barcelona juega de película para dar un paso más hacia la Liga
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LOS AZULGRANA HICIERON UNA PRIMERA PARTE SUBLIME

El Barcelona juega de película para dar un paso más hacia la Liga

El Barcelona dio un nuevo paso para la conquista del título. Y lo hizo con seguridad desde el primer minuto de juego, en el que ya

Foto: El Barcelona juega de película para dar un paso más hacia la Liga
El Barcelona juega de película para dar un paso más hacia la Liga

El Barcelona dio un nuevo paso para la conquista del título. Y lo hizo con seguridad desde el primer minuto de juego, en el que ya acorraló a un timorato Deportivo, que se limitaba a presenciar muy de cerca el despliegue ofensivo de los hombres de Guardiola. Ante la ausencia de varios titulares como Ibrahimovic, Iniesta o el propio Henry, fue Bojan el que decidió o por lo menos el que derribó el muro de contención gallego. Aparece poco, pero cuando lo hace aporta puntos y triunfos a su equipo.

Esta vez contó con la ayuda de Xavi, que con su tercera asistencia consecutiva, demuestra que llega a tope al final de la campaña. El cerebro azulgrana está que se sale y además de marcar el ritmo que más conviene a su equipo, se atreve a repetir eso de los pases que suponen o abren el camino para los triunfos. ¿Cuándo un Balón de Oro para un jugador de equipo como Xavi? Espero que pronto, después de Sudáfrica.
 
Salió enchufado el Barcelona. Los que vestían de azulgrana pasaban por encima de los de blanco, en este caso el Deportivo y no el Real Madrid, tal y como ocurrió el pasado sábado. Toques, desmarques, movimientos constantes... el manual de Guardiola en su máxima expresión. El balón era del Barça. Es más no salía del campo del equipo gallego. Las ocasiones se sucedían de todas las maneras y de todos los colores. Saques de esquina, constantes ocasiones y hasta un tiro al palo antes de que Bojan apareciera para acerca un poco más la Liga a la Ciudad Condal. La intensidad del juego y, sobre todo, la sucesión de ocasiones, ya con el marcador a favor, invitaban a pensar en la goleada local.

El Barcelona se sintió dueño y señor del partido y algunos de los jugadores confundieron ese dominio con cierto exhibicionismo. En el último cuarto de hora de la primera parte, y con el partido abierto, el Camp Nou presenció demasiados toques frívolos, muchos taconazos, algunos de ellos excesivos. Pese a la sobrada de algunos, especialmente Dani Alves, la primera parte del Barcelona ante el Deportivo fue de lo mejor que se ha visto en la Liga. Sublime.
 
La sentencia tardó más de la cuenta en en llegar

El dominio de los primeros cuarenta y cinco minutos, dio paso a veinte minutos contemplativos. Los azulgrana lo fiaban todo al gran momento de Víctor Valdés (clave en el segundo gol con su pase en largo), la firmeza de Piqué y la capacidad de inventar de Messi. La pelota quemaba, pesaba más de la cuenta y el Deportivo se dio cuenta que al menos estaba en disposición de, al menos, dar algún susto. Y lo dieron con el amenazante uno a cero en el marcador. Rió la tuvo y encima en su pierna buena, la izquierda, pero el ex madreados no estaba por la labor de dar emoción a la Liga. 
 
La tregua de Guardiola duró poco más de un cuarto de hora. Un par de gestos del técnico bastaron para que los suyos espabilaran. Y así llegó el gol de Pedro, que aprovechando un rechace de Aranzubía marcó un gol desde cuarenta y cinco metros. No era sencillo lo que intentó el canario, pero dado el estado de gracia en el que está, todo vale. Y se permitió el lujo de cerrar el partido con un gol desde casi el centro del campo. Puro lujo. Otro que huele a Mundial, como Víctor Valdés, que  hasta también es decisivo en el juego de ataque.

Tras el tanto de Pedro, la máquina volvió a su velocidad de crucero. Las ocasiones volvieron y Aranzubía no tuvo descanso hasta el final del partido. Al final fueron tres goles (Bojan, Pedro, y Touré Yayá), pero el Barcelona sigue transmitiendo las mejores senssaciones posibles. Ya está a falta de cinco victorias y un empate para asegurar la reválida del título. Objetivo más que posible, visto lo visto.

Ficha del partido

3- Barcelona: Víctor Valdés; Dani Alves, Piqué, Márquez, Maxwell; Xavi (Busquest, min.77), Touré Yaya, Jeffrén (Keita, min.51); Messi, Bojan (Henry, min.72) y Pedro.

0- Deportivo: Aranzubía; Manuel Pablo, Lopo, Pisku, Laure; Pablo Álvarez (Juan Domínguez, min.53), Juan Rodríguez, Antonio Tomás, Sergio (Iván Pérez, min.85), Guardado; y Riki (Lassad, min.70).

Goles: 1-0, min.15: Bojan. 2-0, min.69: Pedro. 3-0, min.71: Touré.

Árbitro: José Luis Paradas Romero, del comité andaluz. Mostró cartulina amarilla a Lopo (min.13), Pablo Álvarez (min.30) y Manuel Pablo (min.79).

Incidencias: Partido correspondiente a la trigésimo segunda jornada de la Liga, disputado en el Camp Nou ante 75.897 espectadores, según datos ofrecidos por la organización.

Se guardó un minuto de silencio en memoria del periodista deportivo cántabro José Manuel Gozalo, que falleció esta semana en Santander.

El Barcelona dio un nuevo paso para la conquista del título. Y lo hizo con seguridad desde el primer minuto de juego, en el que ya acorraló a un timorato Deportivo, que se limitaba a presenciar muy de cerca el despliegue ofensivo de los hombres de Guardiola. Ante la ausencia de varios titulares como Ibrahimovic, Iniesta o el propio Henry, fue Bojan el que decidió o por lo menos el que derribó el muro de contención gallego. Aparece poco, pero cuando lo hace aporta puntos y triunfos a su equipo.

Esta vez contó con la ayuda de Xavi, que con su tercera asistencia consecutiva, demuestra que llega a tope al final de la campaña. El cerebro azulgrana está que se sale y además de marcar el ritmo que más conviene a su equipo, se atreve a repetir eso de los pases que suponen o abren el camino para los triunfos. ¿Cuándo un Balón de Oro para un jugador de equipo como Xavi? Espero que pronto, después de Sudáfrica.
 
Salió enchufado el Barcelona. Los que vestían de azulgrana pasaban por encima de los de blanco, en este caso el Deportivo y no el Real Madrid, tal y como ocurrió el pasado sábado. Toques, desmarques, movimientos constantes... el manual de Guardiola en su máxima expresión. El balón era del Barça. Es más no salía del campo del equipo gallego. Las ocasiones se sucedían de todas las maneras y de todos los colores. Saques de esquina, constantes ocasiones y hasta un tiro al palo antes de que Bojan apareciera para acerca un poco más la Liga a la Ciudad Condal. La intensidad del juego y, sobre todo, la sucesión de ocasiones, ya con el marcador a favor, invitaban a pensar en la goleada local.

El Barcelona se sintió dueño y señor del partido y algunos de los jugadores confundieron ese dominio con cierto exhibicionismo. En el último cuarto de hora de la primera parte, y con el partido abierto, el Camp Nou presenció demasiados toques frívolos, muchos taconazos, algunos de ellos excesivos. Pese a la sobrada de algunos, especialmente Dani Alves, la primera parte del Barcelona ante el Deportivo fue de lo mejor que se ha visto en la Liga. Sublime.
 
La sentencia tardó más de la cuenta en en llegar

El dominio de los primeros cuarenta y cinco minutos, dio paso a veinte minutos contemplativos. Los azulgrana lo fiaban todo al gran momento de Víctor Valdés (clave en el segundo gol con su pase en largo), la firmeza de Piqué y la capacidad de inventar de Messi. La pelota quemaba, pesaba más de la cuenta y el Deportivo se dio cuenta que al menos estaba en disposición de, al menos, dar algún susto. Y lo dieron con el amenazante uno a cero en el marcador. Rió la tuvo y encima en su pierna buena, la izquierda, pero el ex madreados no estaba por la labor de dar emoción a la Liga. 
 
La tregua de Guardiola duró poco más de un cuarto de hora. Un par de gestos del técnico bastaron para que los suyos espabilaran. Y así llegó el gol de Pedro, que aprovechando un rechace de Aranzubía marcó un gol desde cuarenta y cinco metros. No era sencillo lo que intentó el canario, pero dado el estado de gracia en el que está, todo vale. Y se permitió el lujo de cerrar el partido con un gol desde casi el centro del campo. Puro lujo. Otro que huele a Mundial, como Víctor Valdés, que  hasta también es decisivo en el juego de ataque.

Tras el tanto de Pedro, la máquina volvió a su velocidad de crucero. Las ocasiones volvieron y Aranzubía no tuvo descanso hasta el final del partido. Al final fueron tres goles (Bojan, Pedro, y Touré Yayá), pero el Barcelona sigue transmitiendo las mejores senssaciones posibles. Ya está a falta de cinco victorias y un empate para asegurar la reválida del título. Objetivo más que posible, visto lo visto.